Cómo puede ayudar el cacao a retrasar el envejecimiento

La preocupación por el envejecimiento es una constante en la vida de muchas personas que buscan mantener una piel joven y saludable. En este contexto, el cacao ha emergido como un aliado potencial para retrasar los efectos del paso del tiempo. Diversos estudios sugieren que los compuestos presentes en el cacao podrían ofrecer beneficios significativos en la lucha contra el envejecimiento, captando la atención de quienes desean preservar su juventud de manera natural.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha revelado datos alarmantes: entre 2015 y 2050, el porcentaje de habitantes mayores de 60 años se duplicará, pasando del 12 % al 22 %. Se estima que para el año 2050, las personas mayores de 65 años representarán más del 30 % de la población. Esta aceleración del envejecimiento implica un incremento en la prevalencia de enfermedades crónicas y estados de salud complejos conocidos como síndromes geriátricos.

Otro punto a tener en cuenta es que las enfermedades más comunes en la vejez se encuentran la pérdida de audición, cataratas, osteoartritis, diabetes, depresión y demencia. Además, a medida que aumenta la edad, es más probable padecer múltiples enfermedades simultáneamente. En este contexto, mantener la salud mientras se envejece es uno de los mayores retos de nuestra sociedad. Estrategias razonables para promover una vejez con calidad de vida e independencia son esenciales.

No obstante, ¿podría una solución tan sencilla como consumir cacao diariamente contribuir a este objetivo? Varios estudios recientes han sugerido que el cacao posee importantes propiedades antioxidantes, antialérgicas y anticancerígenas, principalmente gracias a su contenido en polifenoles, especialmente flavonoles.

El cacao es una fuente rica en fibra, lípidos, proteínas, carbohidratos y micronutrientes como minerales y vitaminas, lo que lo convierte en un potencial tratamiento preventivo para diversas patologías. Diversos estudios han demostrado una asociación entre la ingesta de cacao y una disminución del riesgo de diferentes patologías crónicas, como cáncer, trastornos metabólicos y enfermedades cardiovasculares.

Un aspecto notable del cacao es su amplia aceptación y consumo a nivel global. En los años 2022 y 2023 se produjeron casi cinco millones de toneladas de cacao en todo el mundo. En España, cada persona consume en promedio 3,3 kilos de chocolate y derivados del cacao al año. Este consumo rutinario del cacao podría desempeñar un papel crucial en la prevención del deterioro cognitivo y las enfermedades cardiovasculares. Una dieta rica en cacao afecta positivamente a la función visual, a la audición, al sistema nervioso y a la piel, entre otros.

Uno de los estudios que arroja luz sobre los beneficios del cacao fue realizado en Suecia, donde se analizó durante 9 años la salud de 31.823 mujeres de entre 48 y 83 años. Los resultados mostraron que el consumo regular de chocolate (de 1 a 2 porciones por semana y de 1 a 3 porciones por mes) se asociaba con menores tasas de hospitalización por insuficiencia cardíaca e incluso de muerte. Además, una investigación con 531 sujetos mayores de 65 años durante dos años reveló que la ingesta de chocolate supone un riesgo 41 % menor de padecer deterioro cognitivo.

Estos resultados apuntan a que el cacao no solo es beneficioso para la salud cardiovascular sino también para la cognición. En personas mayores con deterioro cognitivo leve, se evaluó la función cognitiva tras 8 semanas de consumir bebidas con diferentes cantidades de flavonoides de cacao. Al concluir el estudio, aquellos que consumieron dosis intermedias y altas mostraron mejoras en la función cognitiva.

El cacao también parece tener efectos positivos sobre el estado de la microbiota intestinal, lo cual es fundamental para la salud general. Asimismo, un estudio con 60 participantes de entre 55 y 70 años mostró que el consumo de una bebida de cacao rica en flavonoides mejoró la glucemia, los niveles de triglicéridos y colesterol, además de otros parámetros fisiológicos.

• Consumo directo: Comer el cacao puro en forma de polvo o nibs, incorporándolo en batidos, yogurt, avena o postres. Es importante elegir cacao sin azúcar agregado.
• Chocolate oscuro: Ingerir en pequeñas cantidades el chocolate con alto contenido de cacao (al menos 70%) para obtener sus beneficios antioxidantes y antiinflamatorios.
• Infusiones: Preparar té de cacao utilizando cáscaras de cacao, lo cual puede ser beneficioso por su contenido de antioxidantes.

Integrar gradualmente el cacao en la dieta y rutinas de cuidado personal puede contribuir significativamente a mejorar la salud y apariencia de la piel. Los resultados son visibles si se realizan estas prácticas de manera constante.