Cuáles son los 3 movimientos que necesita el cuerpo semanalmente para estar saludable

Una caminata al día no es suficiente para mantener el bienestar general del organismo

En el corazón de un gimnasio, un señor mayor demuestra que la edad es solo un número, realizando sentadillas para mantener su salud y promover una vida sana. Este abuelo ejemplifica el cuidado personal y la importancia del ejercicio en la tercera edad. (Imagen ilustrativa Infobae)

El ejercicio físico se ha convertido en una de las piezas clave para mantener un estilo de vida saludable, los especialistas siempre han recomendado realizar al menos una caminata tres veces por semana para mantenerse en forma, sin embargo, con el paso del tiempo se han ido descubriendo nuevas formas de movimiento que el cuerpo necesita para conservar el bienestar general del organismo.

Algunos expertos en los campos de la salud y el estado físico afirman que, si bien caminar es ciertamente bueno para la salud y el estado físico, en realidad no es un ejercicio de alta calidad. Una de esas expertas es Melissa Boyd, entrenadora personal certificada y entrenadora de Tempo, una plataforma de entrenamiento personal en línea.

Dar al menos 2.300 pasos al día reduce el riesgo de morir por enfermedad cardiovascular, según un estudio publicado en la edición de 2023 del European Journal of Preventive Cardiology. Además, los ejercicios con pesas, como caminar, ayudan a prevenir la osteoporosis, según otro estudio publicado en la revista Nature Scientific Reports, pero según Boyd, existen nuevos métodos que son más efectivos para mantener al cuerpo saludable.

Una caminata diaria no garantiza por sí sola el bienestar general del organismo. (Imagen ilustrativa Infobae)

“Nuestras vidas se han vuelto tan ocupadas, viajamos, nos sentamos todo el día y luego estamos agotados por la noche, que dar un paseo corto te hace sentir como si hubieras hecho algo grande y exponencial”, dijo Boyd. “Pero caminar es en realidad un movimiento básico que su cuerpo requiere para funcionar bien, para ayudar con cosas como la circulación y la digestión, y para descomprimir”.

Para ayudar a sus clientes a comprender mejor por qué una caminata diaria no dará como resultado un cuerpo de playa, algo que muchos de ellos creen, gracias a varias personas influyentes en las redes sociales, discute con ellos los tres tipos de movimiento que son beneficiosos para la salud y el estado físico en general.

Cuáles son los 3 movimientos que ayudarán al cuerpo a mantenerse saludable

La importancia de incorporar una variedad de movimientos en nuestra rutina diaria es fundamental para mantener un cuerpo saludable, de acuerdo a expertos en el campo de la medicina deportiva y el bienestar físico. Según destacan Boyd y Carl Cirino, especialistas entrevistados por CNN, existen tres tipos de movimiento esenciales: el movimiento cotidiano, como caminar o estirarse; el movimiento atlético, que se practica varias veces a la semana para mejorar la condición física; y el movimiento social, como bailar o jugar voleibol, que nos conecta con otros a la vez que beneficia nuestra salud.

El movimiento social, como bailar o jugar voleibol, beneficia tanto la salud física como mental. (Imagen ilustrativa Infobae)
  • El movimiento cotidiano es aquel que “se le debe o requiere a su cuerpo todos los días”, menciona Boyd. Incluye actividades como caminar, estirarse y agacharse, esenciales para contrarrestar las consecuencias de un estilo de vida sedentario.
  • El movimiento atlético, recomendado varias veces a la semana, busca optimizar el estado físico general o preparar el cuerpo para algún deporte.
  • Finalmente, el movimiento social, actividades que realizamos por diversión o para interactuar con otros, contribuye tanto a nuestra salud física como mental.

Boyd señala la creciente normalización de un estilo de vida sedentario como una de las principales razones por las que debemos prestar atención a cómo y cuánto nos movemos. “Nuestras vidas son tan sedentarias que muchos de nosotros estamos tratando de salir de un déficit de movimiento”, explica. A diferencia del ejercicio enfocado y planificado, el movimiento físico incluye todas las formas en que nuestro cuerpo interactúa con el espacio a lo largo del día.

El movimiento cotidiano incluye actividades esenciales como caminar, estirarse y agacharse. (Imagen ilustrativa Infobae)

Por su parte, Cirino, cirujano de medicina deportiva de HSS Orthopedics de Stamford Health, enfatiza la necesidad de más que sólo caminar para mantener un cuerpo funcionalmente apto. “Caminar es genial, pero es solo una forma unidireccional de movimiento, y nuestros cuerpos necesitan más para estar funcionalmente en forma”, indica Cirino. Actividades como el yoga y el pilates, al requerir que trabajemos y estiremos nuestros músculos en diversas direcciones, resultan particularmente beneficiosas.

Los expertos coinciden en la importancia de mantener los músculos “sueltos y flexibles”, no solo para preservar el equilibrio y la estabilidad, sino también para prevenir caídas y lesiones. Además, aconsejan incrementar la frecuencia cardíaca varias veces a la semana con actividades que estimulen el corazón, esencial para una salud cardiovascular óptima.

Un desafío común es la percepción de que integrar todos estos tipos de movimientos en la vida cotidiana puede resultar abrumador. Para superar esto, Boyd sugiere adoptar “bocadillos para hacer ejercicio” como táctica para incorporar el movimiento necesario. Esto puede incluir realizar sentadillas cada vez que se visita el baño o hacer flexiones contra una pared al tomar agua.

“Si adjuntas estos bocadillos de ejercicio a otra cosa que ya estás haciendo, puedes convertirlo en un hábito”, agrega Boyd, y subrayó el éxito observado con este enfoque.

Dar al menos 2.300 pasos al día reduce el riesgo de morir por enfermedad cardiovascular. (Imagen Ilustrativa Infobae)

La elección de actividades que resulten agradables y no se sientan como un entrenamiento es crucial. Tanto Boyd como Cirino resaltan la importancia de encontrar formas de movimiento que se disfruten genuinamente, lo cual no solo facilita la adhesión a una rutina de ejercicio, sino que también promueve la interacción social y el bienestar emocional. Este aspecto es especialmente relevante en el caso de los niños y adolescentes, para quienes el disfrute de la actividad seleccionada puede influir significativamente en su disposición a participar en ella.