Este es el alimento clave en las dietas de las regiones con mayor esperanza de vida del mundo, según un experto en longevidad

Okinawa (Japón), Nicoya (Costa Rica), Ikaria (Grecia), Loma Linda (California, Estados Unidos) y Cerdeña (Italia) son consideradas las zonas azules del mundo, aquellas regiones donde la esperanza de vida de sus habitantes es superior a la media. En estos lugares llegar a vivir 100 años no es extraño e investigaciones científicas de todo el mundo se centran en averiguar por qué.

Dan Buettner es uno de los mayores expertos en longevidad y conoce de primera mano todas estas regiones del mundo. Durante años, sus investigaciones se han centrado en estudiar qué tienen de especial estos lugares para que su población destaque por sus centenarios. Uno de los factores claves que comparten todas estas zonas es la alimentación.

Aunque las dietas que sigue cada zona azul difiere una de otra, existe un alimento en común en ellas que ha llamado la atención del investigador estadounidense: las legumbres. En la península más grande Costa Rica, Nicoya, sus habitantes comienzan el día con un desayuno compuesto por una tortilla de maíz caliente rellena de frijoles. En Cerdeña, un almuerzo típico puede ser un plato de minestrone, que es una especie de sopa de habichuelas con cebollas, apio, zanahorias y tomates. Para la cena, los vecinos de la isla de Okinawa, al sur de Japón, pueden tomar un salteado de judías verdes con soja.

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Según Buettner, “las legumbres no solo aportan los carbohidratos complejos, las proteínas y los oligoelementos que nuestro cuerpo necesita, sino que también aportan la fibra que requiere nuestro microbioma, lo que refuerza nuestro sistema inmunológico”. Esto podría explicar que los habitantes de las zonas azules no deban su longevidad a una genética especial, sino también a una alimentación que previene la obesidad, la diabetes, las enfermedades cardiovasculares, el cáncer o la demencia.

• Salud cardiovascular: el consumo regular de legumbres puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas. La fibra soluble en las legumbres ayuda a disminuir los niveles de colesterol LDL (colesterol malo), mientras que su contenido en magnesio y potasio contribuye a mantener una presión arterial saludable.
• Control de peso: las legumbres son bajas en calorías pero muy saciantes debido a su alto contenido en fibra y proteínas. Esto puede ayudar a controlar el apetito y prevenir el exceso de calorías, facilitando el mantenimiento o la pérdida de peso.
• Control de la glucosa en sangre: la fibra soluble en las legumbres ayuda a ralentizar la absorción de azúcares en el torrente sanguíneo, lo que puede ayudar a mantener niveles de glucosa estables. Esto es particularmente beneficioso para personas con diabetes o aquellos en riesgo de desarrollar la enfermedad.
• Mejora de la digestión: la fibra insoluble presente en las legumbres promueve una digestión saludable al aumentar el volumen de las heces y facilitar el tránsito intestinal, lo que puede prevenir problemas digestivos como el estreñimiento y la diverticulosis.
• Prevención de enfermedades crónicas: el consumo regular de legumbres se ha asociado con un menor riesgo de enfermedades crónicas como el cáncer, especialmente el cáncer de colon. Los antioxidantes y compuestos bioactivos en las legumbres pueden ayudar a proteger las células del daño y la inflamación.