Carlos Jaramillo: ”El 80% de las enfermedades son causadas por el estilo de vida”

En este episodio de La Fórmula Podcast, Carlos Jaramillo, científico y médico funcional, explica el origen de las enfermedades crónicas que están en constante aumento y cómo prevenirlas con simples cambios de hábitos. Además, analiza en qué momentos el estrés es beneficioso y cuándo se vuelve perjudicial para el bienestar y la salud física y mental

Guardar
Según Jaramillo, la medicina occidental,
Según Jaramillo, la medicina occidental, centrada en la farmacología y la cirugía, necesita complementarse con un modelo preventivo que permita a las personas no solo curarse, sino mantener su salud a través de una atención integral después de la hospitalización

La Organización Mundial de la Salud (OMS) reveló que las enfermedades no transmisibles (ENT) dominan las estadísticas de mortalidad a nivel global y constituyen 7 de las 10 principales causas de muerte desde 2021. Estas enfermedades, como las cardiopatías isquémicas, el cáncer de pulmón y la diabetes, han superado a las enfermedades infecciosas y otras causas, consolidándose como las principales amenazas para la salud en todo el mundo.

En este episodio de La Fórmula Podcast, Carlos Jaramillo, científico y médico funcional, explica que el 80% de las enfermedades actuales se deben al estilo de vida, no a la genética; y advierte que el estrés, mal gestionado, puede causar graves problemas de salud, pero controlado, puede ser positivo.

El especialista subraya la importancia de la prevención mediante hábitos saludables, pero también enfatiza que la medicina moderna sigue siendo fundamental y debe integrarse con un enfoque holístico. Además, adelantó su visión sobre el futuro de la medicina, que se orientará hacia un enfoque más personalizado, aprovechando herramientas como la inteligencia artificial, pero sin perder el componente humano en el proceso de atención.

El doctor Jaramillo es médico funcional certificado (IFMCP) con formación en Medicina de la Universidad de La Sabana en Colombia y posgrado en bioquímica y fisiología clínica en la Universidad de Harvard.

En su último libro “Antiestrés”,
En su último libro “Antiestrés”, Carlos Jaramillo propone un enfoque para reducir la velocidad vertiginosa de la vida moderna, sugiriendo pausas conscientes como herramientas para mejorar el bienestar y gestionar el estrés de manera más efectiva (Imagen Ilustrativa Infobae)

Inició su camino en la nutrición de la mano de Stanley Dudrick, quien fue su maestro e inspiración en el programa de Nutrición Clínica e Hiperalimentación dentro del programa de Cirugía en la Universidad de Yale y ha dedicado su carrera a encontrar la raíz de las enfermedades crónicas, educando a las personas para que gestionen su salud de manera consciente.

Es fundador del Instituto de Medicina Funcional y autor de bestsellers internacionales, como “El milagro metabólico” y “El milagro antiestrés”, combina su práctica clínica en Bogotá con labores de investigación, docencia y mentoría. Recientemente, lanzó su último libro “Antiestrés”, que propone pausa a la velocidad vertiginosa de la vida actual. Este episodio de La Fórmula Podcast, podés encontrarlo en Spotify y YouTube.

— En tu libro mencionas que el 80% de las enfermedades, tales como las conocemos hoy, son causadas por el estilo de vida que llevamos y sólo una pequeña parte por genética.

— Sí, es bien curioso. La mayoría de las enfermedades son causadas por el estilo de vida, se tratan con el estilo de vida y se acompañan de un medicamento cuando es necesario, o de un suplemento. Al explicar esto, muchos dicen: “¡Entonces la farmacología es mala!”; no, la farmacología es maravillosa, pero no es lo único. El pilar, la base absoluta de los tratamientos de todo debería ser el estilo de vida, los hábitos aplicados de manera científica. Otro factor importante es: las consultas médicas que son necesarias, los consultorios, la salud de urgencia, la salas de cirugía, las unidades de cuidados intensivos, los pabellones de hospitalización son necesarios. Pero no podemos olvidar que la gente sale de ahí y regresa a su casa, donde continuó enfermándose. Así haya tenido un accidente en moto, se haya caído, golpeado y sufrido un politraumatismo que requirió hospitalización en cuidados intensivos, con estrés, incluso estando en coma. Todo su cuerpo estaba estresado: estrés químico debido a la infección, los medicamentos y otros factores, y estrés físico por la reparación del trauma.

Ese paciente, apunta Jaramillo, sale con inflamación crónica, con la microbiota alterada, con pérdida de masa muscular, lleno de líquido, con sus hormonas completamente alteradas y vuelve a su casa. “¿Y entonces? Le dicen: ´Tranquilo, no te preocupes, vete a tu casa, descansa y come de todo´; no, te desmoronaste, te pegamos los pedacitos, pero ahora vas a ir a tu casa a edificarte de nuevo, y edificarte es: te saco del hueco al punto, al nivel y después empiezo a construir y a escalar en los niveles de bienestar. Es necesario aprender a construir escalas de bienestar, construir salud para no tener enfermedad porque la salud no es la ausencia de enfermedad, la salud es salud. Así sea por traumas o por genética, si tienes malos hábitos vas a empeorar lo que quieras.

El doctor Jaramillo defiende un
El doctor Jaramillo defiende un enfoque holístico de la salud, combinando la medicina tradicional con la prevención y el tratamiento de la raíz de las enfermedades, afirmando que la salud no es solo la ausencia de enfermedad, sino un proceso activo de bienestar (Imagen Ilustrativa Infobae)

— Haces una distinción entre estrés físico, mental y el químico. ¿Cuál es la diferencia entre cada uno?

— Son tres puertas de entrada que llevan a lo mismo, se vuelven un embudo. El estrés, por diferentes caminos, va a inducir una respuesta que todas van a ser muy parecidas, todas van a terminar en una respuesta que aumenta la producción de cortisol y de adrenalina. Incrementa la frecuencia cardiaca, la presión arterial, hay una disminución del tracto digestivo, la secreción de hormonas, disminución del deseo sexual, aumenta la tensión muscular, la circulación en las extremidades, disminución en la circulación hacia los órganos, disminución del sistema inmunológico. Es como la compensación: mi cuerpo aumenta la cantidad de respuesta para poder huir, así no vaya a huir. El estrés mental todos lo hemos sentido, lo conocemos, lo hemos tenido en nuestras vida, pero casi que lo tenemos desconectado. Creemos que son como islas aparte, pero el estrés mental también lleva a eso que te acabo de decir.

El estrés químico: el alcohol, el cigarrillo, los medicamentos, las drogas, los químicos en las comidas, los conservantes, cualquier sobrecarga de químicos o la combinación de pequeñitas dosis, que a la larga se vuelve una carga acumulativa, terminan sobrecargando mi sistema en el tiempo al punto tal que la capacidad que mi cuerpo tiene para poder gestionar esas pequeñas intoxicaciones o esa intoxicación aguda se van por el embudo. Mi cuerpo se estresa, supera la carga que puede tolerar y aumenta la frecuencia cardiaca, entre otros síntomas. La carga acumulativa por encima de lo que mi cuerpo es capaz de tolerar se llama una carga alostática. Mi cuerpo está en un estado de homeostasis. Esto es todo lo que hace que en este momento tú y yo estemos aquí con una frecuencia cardiaca y respiratoria, glucosa y presión arterial estables, todo nuestro cuerpo está haciendo un montón de mecanismos para mantenerse así. Si tú dices: “Tengo calor”, prenden el aire acondicionado y a pesar de eso todo sigue igual. Cuando estamos estresados el cuerpo se desvía para tratar de volver otra vez al punto inicial entonces esa desviación se da por la infección del maquillaje, el colorante, los cereales de los circulitos de fruta que no tienen fruta, el tucán, o la inyección, lo que sea, a uno le puede dar fiebre, que es un esfuerzo del cuerpo por sanar. Te da taquicardia o aumenta la frecuencia cardiaca cuando haces ejercicio, es un esfuerzo de tu cuerpo para volver a su estado normal, cuando la carga es tan alta que tu cuerpo no puede volver a su estado normal, eso es una carga alostática.

La medicina preventiva y la
La medicina preventiva y la necesidad de cambiar hábitos a largo plazo son fundamentales para evitar recaídas en enfermedades graves, según el médico funcional Carlos Jaramillo, quien subraya que la recuperación de una enfermedad no termina en el hospital, sino en la modificación de algunos hábitos cotidianos (Imagen Ilustrativa Infobae)

— ¿Hoy en día la conversación en torno a la medicina es poner el foco en la prevención mucho más que en curar un síntoma?

— Es igual que una guerra entre quienes practican o quienes practicamos medicina dentro del bienestar. Yo también práctico medicina de tratamientos ya cuando las personas están enfermas, pero los llevo hacia el bienestar, desde la enfermedad hacia el bienestar, no de la enfermedad a no tener la enfermedad. ¿Es necesario tratar los síntomas? Sí, claro que puedo hacerlo. Pero, ¿qué pasa con la causa? No se trata de criticar a nadie, se trata de que a este modelo de la medicina occidental, de la medicina de la farmacología, de la cirugía, las urgencias, la hospitalización que tiene un método bellísimo y una forma de cuidado increíble que evita que nos estemos muriendo hoy por lo que nos morimos por siglos, a esto le falta el modelo preventivo o el modelo de “salgo de cuidados intensivos a mi casa a edificar mi salud”, porque si no voy a volver a cuidados intensivos.

— ¿Hay algún punto en donde el estrés sea beneficioso?

— Sí, mientras yo pueda volver a mi estado de homeostasis. El estrés es un estímulo necesario para el cuerpo y es positivo que el cuerpo se estrese. ¿Por qué formas masa muscular? Estreso al músculo a un nivel al que no pueda levantar más, eso me genera una ruptura de fibras musculares que manda una respuesta neuroendocrina para que haya reparación y que dentro de una semana pueda levantar peso. Pero fue porque se estresó, se rompió, indujo una respuesta que lleva a la reparación, lleva mayor reclutamiento de fibras, mayor incorporación de fuerza. Lleva a que la estructura funcional del músculo se vuelva mucho más eficiente. Cuando ayuno tengo una serie de respuestas que hace que yo me consuma toda mis fuentes de glucosa, el glucógeno hepático, el glucógeno muscular. Se me acabó el sustrato entonces inmediatamente agarro mi grasa para romperla, romper esos ácidos grasos, formar glucosa a partir de la grasa y seguir teniendo energía, producir cuerpos cetónicos, pero es un mecanismo que estresa a mi cuerpo. Aprendes a jugar fútbol con gente que es mejor que tú, te vas a estresar mental y físicamente para desarrollar una nueva habilidad. Estás aprendiendo a hablar un idioma estresándote, saliendo a la calle y teniendo tus sentidos completamente alerta para eso, pero cuando eso supera la posibilidad que tú tienes de volver a tu estado, a dormir, a repararte, resulta que ya estoy tan estresado que hago ejercicios y mis fibras se rompen y por el contrario ya no me reparo, ya no formo músculo, me siento profundamente agotado. Ahí está el problema, ahí es donde el estrés no tiene una respuesta positiva para la gente. Dentro del estrés bueno hay un hueco enorme que se transita en el que vas pasando un estrés un poquito alto, pero todavía respondes, un estrés que ya está siendo alto, pero ya lo está respondiendo también, un estrés que está siendo bastante alto, pero está respondiendo mucho menos bien al punto que ya no respondes.

El estrés mal gestionado se
El estrés mal gestionado se convierte en una amenaza para la salud, ya que puede ocasionar una respuesta fisiológica perjudicial. Sin embargo, cuando se controla de manera adecuada, puede tener efectos positivos en el cuerpo (Imagen Ilustrativa Infobae)

— En tu libro mencionas soluciones como alimentación, deporte y suplementos. ¿Cuáles son los factores más perjudiciales y los más beneficiosos y qué consejos darías para simplificar la vida?

— Hay cosas con las que uno puede luchar y hay otras que no. Voy a vivir aquí en Buenos Aires ¿hay polución? Sí, hay polución. ¿Puedo elegir vivir en sitios con más polución o con menos polución? De pronto puedo vivir un poquito más retirado, pero el precio que voy a tener que pagar es tener que desplazarme un poco más de tiempo, pero lo que yo quiero es caminar, vas a estar en sitios como esos con más polución. Tienes que aprender a elegir, en la medida que vas ganando conciencia y que vas teniendo comprensión y conocimiento, si tú te quieres estresar y te quieres obsesionar por la información que estás recibiendo, esa es una posibilidad. O puedes empezar a decir: “Yo no sabía que estaba tomando esta decisión con este perfume: voy a cambiarlo, voy a empezar a buscar productos de aseo del hogar que sean mejores. No sabía que estos alimentos y estos colorantes le estaban haciendo daño a mi cuerpo, pues voy a tomar la decisión de ir eligiendo en la medida en que los pueda comprar”. Lo puedes hacer con obsesión, angustia, con ira o puedes ignorarlo también, creer que nada de eso es verdad y que todo eso es pura mentira. Yo creo que la gente que se obsesiona con la salud, ya sea por miedo o por lo que sea, y cree que los carbohidratos son malos y se obsesionan con que todo es malo. Son personas que no entienden de qué se trata aprender a darle ganancia, a darle equilibrio a la vida o está tratando de vender un método único para algo, como todo esto es malo lo único que sirve es tomar de mi agua a las tres de la mañana y no hay nada más. Y a los humanos nos encanta buscar las soluciones fáciles, porque lo que sea difícil para nuestro cerebro, es muy incómodo.

Jaramillo resalta que el estrés
Jaramillo resalta que el estrés físico, mental y químico, aunque distintos en su origen, terminan desencadenando respuestas biológicas similares, aumentando la producción de cortisol y adrenalina, lo que afecta la presión arterial, la frecuencia cardíaca y la salud digestiva

Jaramillo habla entonces de soluciones. “Por ejemplo, tú necesitas tomar magnesio y yo no, de pronto tú necesitas meditar, hacer ejercicio y ahí es dónde están las mejores herramientas para ti, y lo que yo necesito es no tomar absolutamente nada, alimentarme bien y dormir, así los dos tengamos el mismo resultado, a los dos cuando nos miden nuestro estrés están igualitos, tenemos el mismo dolor de cabeza, el mismo bruxismo, el mismo todo, pero tus causas son las tuyas y las mías son las mías. Y la respuesta fisiológica, en ti y en mí son igualitas. Entonces, ¿a quién trato o con qué lo trato si es talla única, si es la guía de los siete pasos del éxito para salir del estrés? Eso en salud no existe. Pero algo que suena muy incómodo es que los profesionales de la salud no trabajamos sobre la salud sino sobre la enfermedad”, explica.

Y sigue: “Si tú miras los gobiernos son gestores de la administración de la enfermedad, construyen clínicas, construyen hospitales y compran medicamentos para que haya distribución pero para la enfermedad, no para la salud. Los médicos aprendemos de salud y no la practicamos para nosotros. Cuando viene la gente a que yo sea su profesor, les digo: “Si no estás viviendo la salud, si tú no comes bien, no haces ejercicio, no entrenas, no duermes, no aprendes sobre todo eso, yo no voy a ser tu profesor”. ¿Por qué? porque está siendo como un profesor de kung fu que no sabe hacer kung fu. Se sabe la teoría, pero no lo practica. Y la medicina es de las pocas profesiones donde quienes la prescriben no la viven. Tienes una sola vida y es la tuya. El auto, la casa y el celular los cuidamos de maravilla, les ponemos el protector de pantalla para que no le pase nada, invertimos más en el celular que en el aceite de oliva, invertimos más en la botella de vino que en el aceite de oliva. A la larga, es una serie de decisiones que tomamos en el día a día para complacer un montón de cosas desde afuera y para nosotros, poco. Entre más pacientes atiendo, para mí la gran solución es poner la vida en orden”.

Hacer ejercicio es solo uno
Hacer ejercicio es solo uno de los pilares que ayudan a tener calidad de vida y bienestar (Imagen Ilustrativa Infobae)

— ¿Qué es para vos una vida en orden?

— Hacerte cargo de tu vida, simplemente para monitorear los siete pilares: cómo está mi nutrición, cómo está mi actividad física, mi sueño, mis prácticas de meditación o de gratitud, mis relaciones. Cómo está mi exposición a tóxicos y la forma en que yo hago todo esto. Primero pongo mi vida en orden y, en la biología, cuando tú pones la vida en orden la vida se manifiesta de manera correcta. Hay veces que basta sólo con modificar un factor.

— La última pregunta que les hago a todos los invitados es: ¿hay algo que hayas escuchado, leído, visto en redes sociales o cualquier cosa que te haya llamado la atención últimamente? Puede ser un libro, un mensaje o algo que te haya dejado pensando y vale la pena compartirlo.

— Yo trabajo mucho sobre el principio de la aceptación y el respeto. Aceptación de mi vida, aceptación de la vida de otros. Mi maestro decía: “Todo lo que no soy capaz de aceptar solamente me muestra una limitación mental mía”. Si no lo puedes aceptar solamente te muestra la limitación mental tuya, porque no saber aceptar y no saber respetar es una limitación mental propia.

Según Carlos Jaramillo, el 80% de las enfermedades actuales están relacionadas con el estilo de vida, más que con la genética, destacando la importancia de hábitos saludables y un enfoque preventivo para combatir enfermedades crónicas como cardiopatías y diabetes
Guardar