Baja testosterona: los efectos menos conocidos de cómo puede afectar la salud

Este cambio hormonal masculino actúa en silencio, pero sus consecuencias pueden ser profundas. La comunidad médica trabaja para desentrañarlas y encontrar soluciones efectivas

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Un análisis de sangre es el método más confiable para diagnosticar niveles bajos de testosterona (Imagen Ilustrativa Infobae)
Un análisis de sangre es el método más confiable para diagnosticar niveles bajos de testosterona (Imagen Ilustrativa Infobae)

Aunque síntomas como la fatiga, la depresión y el bajo deseo sexual suelen asociarse con niveles bajos de testosterona, esta hormona masculina esencial afecta a una gama mucho más amplia de funciones en el organismo, de maneras menos evidentes y, a menudo, silenciosas. La hormona sexual masculina no sólo influye en el deseo sexual y el ánimo, también es crucial para la salud ósea, el corazón, el sistema nervioso y hasta la composición corporal.

Un análisis de sangre es el único método confiable para detectar si los niveles de testosterona están bajos; un diagnóstico que es esencial cuando los síntomas no son tan visibles.

Pérdida de masa ósea y el riesgo de fracturas

Entre los efectos menos evidentes de una baja testosterona está la progresiva y silenciosa pérdida de masa ósea. Varias investigaciones vincularon la disminución de esta hormona en los hombres con una densidad ósea menor, lo que a su vez aumenta el riesgo de fracturas y problemas de estabilidad en la estructura esquelética.

Según Stephen Borst, investigador del Malcom Randall Veterans Affairs Medical Center de Miami, los efectos sobre los huesos son graduales y pueden pasar desapercibidos hasta que ocurre una fractura. “No se da cuenta de que sus huesos se están debilitando hasta que se fracturan, pero una menor testosterona puede contribuir a una reducción en la densidad mineral ósea”, explica Borst en diálogo con Everyday Health.

La terapia de reemplazo intenta aumentar testosterona para fortalecer huesos (Imagen Ilustrativa Infobae)
La terapia de reemplazo intenta aumentar testosterona para fortalecer huesos (Imagen Ilustrativa Infobae)

Para contrarrestar esta disminución, los médicos pueden recomendar la terapia de reemplazo de testosterona (TRT), un tratamiento mediante inyecciones o geles que busca aumentar los niveles de la hormona en los hombres afectados. Sin embargo, aunque estudios recientes apuntan a que la TRT puede ayudar a fortalecer los huesos, sobre todo en áreas vulnerables como la columna lumbar, Borst y otros expertos coinciden en la necesidad de investigaciones más amplias y exhaustivas para confirmar estos beneficios de manera concluyente.

La interacción entre testosterona y estrógeno en la salud ósea

La baja testosterona podría no sólo afectar la solidez de los huesos, sino también impactar en el equilibrio entre la hormona sexual y el estrógeno, que juega un rol crucial en la salud ósea masculina. Aunque el mecanismo exacto no se comprende del todo, los expertos sugieren que esta interacción hormonal podría explicar la reducción de densidad ósea en hombres con niveles bajos del esteroide anabólico.

La disminución de testosterona está relacionada con un mayor riesgo de fracturas debido a la pérdida de densidad ósea (Imagen Ilustrativa Infobae)
La disminución de testosterona está relacionada con un mayor riesgo de fracturas debido a la pérdida de densidad ósea (Imagen Ilustrativa Infobae)

El impacto de la testosterona en la salud cardiovascular es otro de los aspectos menos conocidos, pero potencialmente peligrosos. La falta de la hormona en el organismo masculino podría elevar el riesgo de eventos cardíacos graves, como infartos o accidentes cerebrovasculares.

Mike Butcher, urólogo especializado en medicina sexual, explicó en una entrevista con Health Partners que si bien existen debates sobre los riesgos y beneficios de la terapia de reemplazo de testosterona (TRT), lo que se sabe con certeza es que los hombres con niveles bajos de la hormona androgénica enfrentan un mayor riesgo de fracturas y de sufrir problemas cardíacos.

Baja testosterona y problemas cardíacos

Algunos estudios encontraron una fuerte correlación entre la baja testosterona y un aumento de enfermedades cardiovasculares. Por ejemplo, una revisión de 53 estudios sobre la hormona, publicada en 2014 en la revista Andrology, señaló que la deficiencia de testosterona estaba relacionada con una mayor incidencia de mortalidad temprana y eventos cardíacos. Aunque estos estudios sugieren un vínculo preocupante, la comunidad científica sigue solicitando investigaciones más amplias y actuales para confirmar la relación exacta entre la testosterona baja y los problemas cardíacos.

La baja testosterona puede debilitar los huesos antes de detectar fracturas (Imagen Ilustrativa Infobae)
La baja testosterona puede debilitar los huesos antes de detectar fracturas (Imagen Ilustrativa Infobae)

Problemas en la piel y salud nerviosa

Además de sus efectos en el sistema óseo y cardiovascular, la baja testosterona puede afectar la piel y el sistema nervioso. Los hombres con niveles bajos de testosterona pueden experimentar sequedad en la piel y un empeoramiento de condiciones cutáneas como la psoriasis. El Dr. Mike Butcher señaló en Everyday Health que los niveles bajos de esta hormona pueden agravar estas afecciones. También es común que aquellos con baja testosterona padezcan dolor nervioso o entumecimiento, especialmente en personas con condiciones previas como la diabetes.

Dificultades para bajar de peso

La baja testosterona está relacionada además con problemas de peso. Ghandi Saadeh, endocrinólogo de Sentara Medical Group, explica en Everyday Health que los hombres con sobrepeso suelen tener niveles de testosterona más bajos, lo que puede dificultar la pérdida de peso incluso cuando se sigue una dieta y se practica ejercicio. Algunos estudios indican que la terapia de reemplazo de testosterona ayuda a reducir el peso, pero su efectividad no es siempre consistente, por lo que se necesitan más investigaciones en este ámbito.

La testosterona es clave para la salud integral masculina, y su déficit puede manifestarse de formas sutiles y variadas. Ante síntomas no claros, un análisis de testosterona podría ser el primer paso hacia una mejor salud.

El impacto de la baja testosterona se extiende al sistema nervioso y piel (Imagen Ilustrativa Infobae)
El impacto de la baja testosterona se extiende al sistema nervioso y piel (Imagen Ilustrativa Infobae)

Finalmente, la baja testosterona podría afectar la memoria y las habilidades cognitivas, aunque los estudios no siempre son concluyentes. Los expertos insisten en que más investigación es necesaria para entender mejor la relación entre esta hormona y la salud mental.

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