El tiempo que se pasa frente al televisor podría estar robándole años de vida a las personas. Un nuevo estudio de Harvard revela una conexión significativa entre el sedentarismo y el envejecimiento saludable. Cambiar el sillón por actividad física, incluso ligera, se asocia con una mayor probabilidad de vivir más tiempo y con mejor salud.
Cambiar el tiempo frente a la televisión por actividad física está asociado con una mejor longevidad, según un nuevo estudio publicado el martes en la revista JAMA Network Open. Los investigadores del Harvard T.H. Chan School of Public Health analizaron datos del Nurses’ Health Study de más de 45.000 personas mayores de 50 años sin enfermedades crónicas en 1992.
El estudio concluye que cada dos horas adicionales de televisión se asocian con una disminución del 12% en las probabilidades de envejecimiento saludable, mientras que dos horas de actividad física ligera aumentan un 6% esas probabilidades. “Nuestro mensaje es que reemplazar el tiempo de televisión con actividad física ligera, moderada a vigorosa, y sueño (para aquellos con sueño inadecuado) es beneficioso para el envejecimiento saludable,” dijo el autor principal del estudio, el Dr. Molin Wang, catedrático de medicina.
“El problema es particularmente grave cuando se consume una gran cantidad de sal, típica en una dieta estadounidense, sin suficiente movimiento para circular los fluidos,” dijo el Dr. Andrew Freeman, director de prevención cardiovascular en National Jewish Health en Denver. Freeman, quien no participó en el estudio, también agregó que muchos estudios demuestran que los comportamientos sedentarios tienen impactos significativos en la salud.
El análisis se realizó durante un seguimiento de 20 años que incluyó la recopilación de datos sobre el tiempo que los participantes pasaban sentados en el trabajo, en casa o viendo televisión, y el tiempo que pasaban de pie o caminando. La definición de envejecimiento saludable utilizada incluía vivir al menos hasta los 70 años y mantener al menos cuatro dominios saludables, como no tener enfermedades crónicas importantes y no presentar deterioro en la memoria subjetiva, la salud física y mental.
Freeman también señaló que, cuando las personas están frente al televisor, generalmente tienden a consumir alimentos poco saludables, como comida chatarra y cenas rápidas, lo que puede interrumpir el sueño y evitar la conexión con otros. “Cuanto más nos sentamos, más problemas obtenemos, especialmente a medida que envejecemos,” añadió.
Para reducir estos hábitos sedentarios, “mi muy fuerte sugerencia es considerar obtener un escritorio de pie en el trabajo si es posible, o incluso un escritorio con cinta de correr si tienes el espacio,” dijo Freeman. En caso de que estas opciones no sean posibles, recomienda levantarse con frecuencia o tener reuniones caminando. “Si estás sentado más de 30 minutos seguidos, probablemente es demasiado tiempo, y realmente deberías intentar moverte un poco,” añadió.
Freeman también sugiere combinar el tiempo de televisión con comportamientos saludables, como ver mientras se mueve o comer un refrigerio nutritivo, y recomendó herramientas y aplicaciones disponibles que ayudan a llevar un registro del tiempo frente a la pantalla y la actividad física.
Un estudio de 2017 ya había mostrado una relación entre el tiempo sentado y la muerte prematura por cualquier causa. Además, según una investigación de 2023, el tiempo sedentario durante la infancia puede aumentar el riesgo de enfermedades cardíacas en la vida adulta.
En definitiva, reducir el tiempo que se pasa frente a la pantalla de forma sedentaria, aumentando también la actividad física dentro de las rutinas diarias, con cambios simples como caminar durante los anuncios comerciales o también implementando el uso de los escritorios de pie, se puede contribuir de manera progresiva a mejorar la salud y longevidad.