En el mundo de las plantas medicinales, existe un árbol cuyas hojas contienen 15 veces más vitamina C que la naranja, además de generar beneficios para la salud. Este “árbol milagroso” se está ganando el interés de científicos y nutricionistas alrededor del mundo debido a que incluye proteínas, vitaminas, minerales y antioxidantes.
Se trata de la moringa, un superalimento que está entre las tendencias más relevantes a día de hoy. Gracias a sus nutrientes esenciales, esta planta ayuda a sentirse mejor desde la limpieza y purificación de los cuerpos, marcando la diferencia en la dieta de quienes lo incorporan.
Qué es la moringa
La moringa es una planta originaria de la India y su nombre científico es moringa oleifera. Su árbol alcanza entre los 10 y 12 metros de altura y se adapta a otras zonas con climas tropicales y subtropicales. Algunos ejemplos son Misiones, en Argentina y varias regiones de América Central y África.
Es una medicina herbal que sirve para aliviar dolores, tanto digestivos como inflamaciones, diabetes e, incluso, enfermedades cardíacas. Gracias a sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, la moringa colabora para evitar el daño celular y las enfermedades crónicas.
Cuál es el valor nutricional de la moringa
La organización Echo Community se encargó de recolectar datos nutricionales de la moringa. Para eso, tomó la información de los nutrientes en 100 gramos de hojas frescas y crudas.
- Proteínas: presenta una concentración elevada, alrededor de 9g por cada 100g de hojas frescas, lo cual es notable para una planta. Las hojas secas pueden contener aún más proteínas.
- Vitamina C: por cada 100g de hojas frescas, la moringa puede ofrecer entre 120 a 200 mg, aunque este contenido puede disminuir con el procesamiento.
- Vitaminas del grupo B: aunque se necesita mayor investigación usando metodologías actuales, la moringa contiene vitaminas B como ácido fólico, piridoxina (B6), entre otras.
- Calcio: las hojas secas pueden aportar hasta 2000mg por cada 100g, aunque hay variabilidad según las condiciones del suelo.
- Hierro: por cada 100g de hojas secas, puede haber hasta 28mg, siendo una fuente significativa de este mineral.
- Fibra dietética: importante para la digestión, las hojas de moringa contienen aproximadamente 2g por cada 100g de hojas frescas, pero este valor aumenta significativamente en las hojas secas.
Los beneficios para la salud de la moringa
Esta planta medicinal tiene múltiples beneficios para sus consumidores. Una investigación realizada por los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos, reveló que “la moringa oleifera está clasificada como una planta herbaria importante debido a sus inmensos beneficios medicinales y no medicinales”.
Este estudio afirmó que cada parte de la planta puede usarse para sanar un dolor diferente y se extendió: los usos de moringa oleifera se observan en alteraciones patológicas como antihipertensivos, ansiolíticos, antidiarreicos y diuréticos. También se usa para tratar la disentería y la colitis, mientras que una cataplasma hecha con hojas de moringa es un remedio rápido para afecciones inflamatorias como inflamación glandular, dolor de cabeza y bronquitis.
La investigación también asegura que las vainas tratan la hepatitis y alivian el dolor en las articulaciones; las raíces se usan convencionalmente para tratar cálculos renales, enfermedades hepáticas, inflamación, úlceras y dolor asociado con el oído y los dientes. La corteza del tallo se utiliza para tratar heridas e infecciones de la piel.
Cómo consumir moringa
Hay diferentes maneras de consumirla y obtener sus numerosos beneficios. Sin embargo son tres las formas más populares.
- En infusiones: Las hojas se pueden cocer para crear infusiones que aprovechan sus propiedades. Este método se aplica comúnmente para mitigar dolencias articulares y potenciar los niveles de serotonina. Para su preparación, se seleccionan hojas frescas (evitando las de color amarillo) y se cocinan en agua hirviendo durante 3 a 5 minutos.
- En suplementos: La planta es base para la elaboración de complementos alimenticios, disponibles tanto en cápsulas como en formato de polvo, que se puede incorporar a diversas bebidas como jugos y batidos, alimentos, o incluso usarse para hacer infusiones.
- Aceite de moringa: Obtenido de las semillas de la planta, este aceite es ideal para aderezar ensaladas. Destaca por sus efectos rejuvenecedores, sus propiedades antiinflamatorias, su capacidad para disminuir lípidos perjudiciales y su contenido de omega 3.