Son fuentes de vitaminas, minerales, fibra y agua. Además, habiendo tanto dulces como amargas, hay opciones para todos los públicos. Las frutas son un indispensable para una dieta saludable. Tanto es así, que nutricionistas y médicos aconsejan consumir hasta cinco piezas de frutas y verduras al día. Aunque a algunos esta cifra les puede resultar excesiva.
La ausencia de hábito o la disconformidad con el sabor de las piezas más comunes son algunas de las principales razones por las que muchas personas no incluyen las frutas de forma regular en su dieta. Sin embargo, esta percepción resulta paradójica, ya que algunas frutas destacan por su dulzura natural, comparable al sabor de las gominolas, con la ventaja de aportar beneficios muy superiores.
Los arándanos son una de esas frutas que parecen golosinas. Sin embargo, son perfectos para mejorar el tránsito intestinal y acabar con problemas relacionados. Pero este no es su único beneficio.
Los beneficios de los arándanos
Los arándanos son una fuente rica en vitaminas, minerales y antioxidantes que aportan múltiples beneficios para la salud. Según la revista Healthline, su alto contenido en antioxidantes ayuda a reducir los daños en el ADN, un efecto que podría proteger contra el envejecimiento y el cáncer. Estas propiedades también combaten los radicales libres, moléculas que dañan las células y contribuyen al deterioro del organismo.
Ricos en vitamina K, los arándanos son esenciales para la salud ósea y cardiovascular, además de jugar un papel clave en la coagulación sanguínea. Diversos estudios han señalado que esta fruta puede ayudar a reducir la presión arterial, prevenir enfermedades cardíacas, ofrecer efectos antidiabéticos, combatir infecciones urinarias y disminuir el daño muscular tras el ejercicio.
Aunque no existen pruebas concluyentes de que los arándanos “limpien” los pulmones, su contenido en antioxidantes, como antocianinas y vitamina C, refuerza la salud general y podría beneficiar al sistema respiratorio.
Contraindicaciones de los arándanos
Aunque los arándanos ofrecen numerosos beneficios para la salud, no son adecuados para todos. Su alto contenido en fibra, con 3,6 gramos por taza, puede causar malestar, como hinchazón, gases o diarrea, en personas no acostumbradas a consumir esta sustancia en grandes cantidades, según explica el Dr. McDonald. Cabe recordar que la ingesta diaria recomendada de fibra para adultos es de 25 a 28 gramos, según Mayo Clinic.
Además, su elevado nivel de vitamina K, esencial para la coagulación sanguínea, puede interferir con medicamentos anticoagulantes como la heparina. Esto podría incrementar el riesgo de formación de coágulos, tal como advierte el portal Live Strong. Por ello, es fundamental que quienes toman este tipo de medicación controlen su consumo de arándanos y consulten con un médico antes de incluirlos en su dieta de forma regular.
Cuántos arándanos se pueden comer al día
La cantidad de arándanos recomendada es de aproximadamente 150 gramos al día, el equivalente a una taza. Para quienes no disfrutan de su sabor o buscan variar su consumo, una alternativa práctica es optar por suplementos en cápsulas que concentran sus propiedades, aunque siempre es preferible priorizar su forma natural.