Los hay pequeños, específicos para ensaladas y redondos con una textura carnosa. El tomate es un producto indispensable en muchas despensas de España y una de las frutas más recomendadas por los profesionales de la nutrición.
La Fundación Española de Nutrición (FEN) señala que el tomate está compuesto principalmente por agua y que su principal macronutriente son los hidratos de carbono. En cuanto a las vitaminas, destaca por su contenido de vitamina A, mayormente en forma de carotenoides provitamina A, y vitamina C.
Estos son los beneficios de comer tomate
El tomate es una fuente importante de vitamina A, un nutriente clave para mejorar la visión. Su consumo contribuye a proteger los ojos de enfermedades degenerativas y problemas como la ceguera nocturna. Gracias a su contenido en hierro y vitamina K, el tomate ayuda a mantener la salud de la sangre y a regular la coagulación, lo que lo convierte en un aliado en la prevención de enfermedades cardiovasculares.
Por sus propiedades antioxidantes, el tomate actúa como un remedio natural contra el envejecimiento. Además, su consumo regular beneficia la salud de la piel, el cabello y los dientes, posicionándolo como un alimento clave para el bienestar general. El equilibrio entre el potasio y los bajos niveles de sodio en el tomate favorece la eliminación de líquidos y toxinas, contribuyendo a prevenir la retención de líquidos.
De igual modo, el tomate también es rico en licopeno, un antioxidante más efectivo que la vitamina E. Además, contiene otros carotenoides que refuerzan su capacidad para proteger el organismo del daño oxidativo y del envejecimiento celular.
Cómo incorporar el tomate en tu dieta
El tomate es un alimento versátil y fácil de incorporar en la dieta diaria. Puede consumirse crudo en ensaladas y también es ideal para preparar gazpacho o salmorejo. Cocido, el tomate potencia la absorción de licopeno. Una salsa casera para pastas o guisos es una excelente manera de aprovecharlo. También puede asarse o rellenarse.
En el desayuno, añadir rodajas de tomate a tostadas con aguacate o aceite de oliva es una opción equilibrada. Para snacks, combina tomates cherry con queso fresco o hummus. Finalmente, el tomate deshidratado es una alternativa para dar un toque especial a platos como pizzas, ensaladas o arroces
Cuántos tomates se pueden comer al día
A pesar de sus múltiples beneficios, el consumo de tomate debe moderarse, ya que se considera una fruta dentro de las recomendaciones dietéticas. La ingesta diaria ideal no debería superar las dos o tres piezas de tamaño normal, equivalentes a unos 220 gramos en total.
El exceso de tomates ácidos puede incrementar los niveles de ácido en el estómago, lo que podría derivar en molestias digestivas y, en algunos casos, provocar sensación de ardor en la vejiga.
Además, el tomate contiene histamina, una sustancia que, en altas cantidades, podría desencadenar inflamación y dolor en las articulaciones. Un consumo excesivo de este alimento podría elevar el riesgo de desarrollar síntomas relacionados con la artritis o molestias musculares. Por tanto, moderar su consumo es fundamental para aprovechar sus beneficios sin comprometer la salud.