La leche es uno de los alimentos más consumidos en todo el mundo. Sus propiedades, sabor y diversidad de usos la hacen ser uno de los recursos gastronómicos más interesantes. A pesar de ello, uno de los empleos más frecuentes es el echarla en el café o el beberla sola. En ese último caso es donde se comete el error común que los expertos aconsejan evitar bajo una serie de razones.
Con la llegada del frío, la demanda de bebidas calientes se eleva para así ayudar al cuerpo a paliar los efectos del frío típico de la época de invierno. Justo esa acción de calentar la leche provoca el error típico que se comete al beber la leche caliente: una costra superficial. Al hilo de ello, la instrucción que los expertos dictan es no quitarla. Esto se debe a una razón basada en factores de peso, como recoge La Razón y como explica en sus redes Cristina Lora, especialista en seguridad alimentaria.
La costra de la leche al calentar es importante
Aunque tras calentar la leche pueda parecer que esta fina capa en lo alto del vaso parece poco apetecible, no se debe tomar la decisión de desprenderse de ella en ningún momento. La causa se basa en que el análisis de la composición de esa ligera capa está formada de muchos nutrientes y el desechar esa costra podría afectar a su sabor y su aportación nutricional.
En profundidad con por qué aparece esta barrera en lo alto de la leche también se da una explicación argumentada. Al hilo de ello, Lora describe que aunque popularmente se cree que es nata, esta no lo es. En cambio, lo que realmente es esa capa es una proteína llamada Lactoalbúmina. Acorde a más detalles, este componente se desnaturaliza en temperaturas altas. “Cuando la leche se enfría, se cuaja y queda en la superficie por la diferencia de densidad”, detalla la experta.
Otro factor para no quitar la capa reside en el hecho de la digestión posterior del alimento y la composición del mismo. De quitarla, se estaría alterando el consumo y se afectaría al tracto digestivo. “Hará que sea más fácil hacer la digestión”, afirma. “Porque si no, al fin y al cabo estaríamos bebiendo agua con un poquillo de azúcar”, complementa en caso de eliminarla.
Que hacer si no gusta la textura de la capa
En todo caso, los expertos aconsejan el consumo de la leche con todos sus componentes. A pesar de ello, hay personas que aun así no son capaces de bebérsela con esa capa, por lo que se dan algunas soluciones que ayudan a conseguirlo. El primero de ellos pasa por mover la leche para reincorporar esa costra en la mezcla de forma homogénea. De esa forma, se evitará ver y sentir de forma directa la capa y se podrá consumir con los beneficios que esta trae. Por tanto, se ha de acabar con ese estereotipo de que la capa de arriba de la leche caliente no es útil y ha de prescindirse de ella.