Qué pasa si comes huevos de codorniz todos los días

Aunque su tamaño puede hacer sospechar lo contrario, los huevos de codorniz están repletos de nutrientes que ofrecen múltiples beneficios para la salud. Lo cierto es que son menos populares que los huevos de gallina, a pesar de contar con una variedad de minerales, vitaminas y antioxidantes que pueden contribuir significativamente a una dieta equilibrada.

El nutricionista Saúl Sánchez Arias explora todas las propiedades de este alimento y sus efectos en nuestra salud, que pueden ser varios si los incorporamos en nuestra dieta diaria. Es importante destacar que este consumo debe ir acompañado de una dieta variada y equilibrada

El hierro es un mineral esencial para la formación de glóbulos rojos y el transporte de oxígeno a todas las células del cuerpo. Los huevos de codorniz son una excelente fuente de hierro, lo que los convierte en un alimento útil para combatir y prevenir la anemia, especialmente en personas con deficiencia de hierro. La anemia ferropénica, que la causa la falta de este mineral, puede conducir a síntomas como fatiga, debilidad, y dificultades para concentrarse.

El consumo regular de huevos de codorniz puede ayudar a mantener los niveles de hemoglobina en el rango normal, mejorando así la capacidad del cuerpo para transportar oxígeno y evitar el cansancio. Además, el hierro también desempeña un papel importante en el mantenimiento de un sistema inmunológico fuerte, lo que permite al cuerpo luchar contra infecciones de manera más eficiente.

El potasio es otro mineral vital que se encuentra en los huevos de codorniz, fundamental para la salud cardiovascular al regular la presión arterial al contrarrestar los efectos del sodio. El consumo adecuado de potasio puede reducir el riesgo de hipertensión, una condición que puede llevar a problemas graves como enfermedades del corazón y derrames cerebrales.

Además de su impacto positivo en la presión arterial, el potasio también desempeña un papel clave en la función muscular y nerviosa, puesto que ayuda a mantener el equilibrio de líquidos en las células, lo que es esencial para el funcionamiento adecuado de los músculos y los nervios.

El calcio es bien conocido por su papel crucial en la formación y el mantenimiento de los huesos y los dientes. Los huevos de codorniz contienen calcio, lo que los convierte en una buena opción para quienes desean fortalecer su sistema óseo y prevenir enfermedades como la osteoporosis. Este mineral también es importante para la contracción muscular, la coagulación de la sangre y el buen funcionamiento del sistema nervioso.

Sánchez explica que el calcio en los huevos de codorniz no solo beneficia a los huesos y dientes, sino que también ayuda a mantener un ritmo cardíaco regular. Para las personas que buscan mejorar su ingesta de calcio, los huevos de codorniz pueden ser una adición valiosa a su dieta, especialmente cuando se combinan con otros alimentos ricos en calcio.

Las vitaminas A y D presentes en los huevos de codorniz son esenciales para diversas funciones del cuerpo, como recoge el nutricionista.

• Vitamina A: La vitamina A es conocida por su papel crucial en la salud ocular. Es esencial para mantener una buena visión, especialmente en condiciones de poca luz, y para prevenir enfermedades oculares como la ceguera nocturna. Además, la vitamina A tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, lo que ayuda a proteger las células del daño causado por los radicales libres y apoya la función inmunológica. Consumir huevos de codorniz ricos en vitamina A puede contribuir a una piel más saludable y a un sistema inmunológico más fuerte.
• Vitamina D: La vitamina D, conocida como la “vitamina del sol”, es vital para la absorción de calcio en el cuerpo, lo que refuerza la salud ósea y dental. Además, la vitamina D desempeña un papel importante en el sistema inmunológico, ayudando al cuerpo a combatir infecciones y enfermedades autoinmunes. También se ha vinculado la vitamina D con la mejora del estado de ánimo y la prevención de la depresión. Los huevos de codorniz proporcionan una cantidad significativa de vitamina D, lo que los convierte en un excelente complemento para asegurar una ingesta adecuada de esta vitamina crucial.