“Sin una taza de café no me levanto” o “hasta que no me tomo un café por la mañana, no soy persona”, seguro que en alguna ocasión has escuchado a alguien decir alguna de estas frases y si no las has escuchado, es que esa persona eres tú. Para los amantes de esta bebida, es imposible afrontar la mañana sin una taza. Otros tantos tomarán varias al día. Aunque la Autoridad Europea en Seguridad Alimentaria (EFSA) recomienda no superar los 400 miligramos al día de cafeína, es decir, no más de 3-4 tazas.
Una de las bondades más apreciadas del café es su alto aporte en sustancias antioxidantes. Karen de Isidro, miembro de la Academia Española de la Nutrición y Dietética, apunta que “diferentes estudios muestran una asociación entre el consumo de café y un menor riesgo de padecer ciertas enfermedades, como la diabetes tipo 2, enfermedades neurodegenerativas, cardiovasculares o hepáticas, al igual que diversos tipos de cáncer, como el de piel”.
Cuál es el mejor momento del día para tomar café
No es sólo importante tener en cuenta cuánto café se consume, sino cuándo. Los expertos aseguran que es un aspecto clave para no interferir en los procesos fisiológicos del cuerpo y potenciar los beneficios de la bebida. Por ello, no es recomendable tomarse una taza nada más despertar, es preciso esperar.
La cafeína que contiene es un estimulante natural, tal y como explica la nutricionista Mugdha Pradhan, fundadora de iThrive a Vogue. Lo que significa que puede activar el metabolismo aumentando el ritmo cardíaco y el gasto energético del cuerpo. Pradhan recomienda tomarlo 90 minutos después de despertarse, ya que, de esta manera se sincroniza con el ritmo natural de cortisol del cuerpo. Consumirlo antes de hacer ejercicio puede mejorar el rendimiento físico y favorecer la quema de grasas, mientras que hacerlo después también podría ayudar a la recuperación muscular. Otro apunte que hace la experta es que es mejor no ingerir café a primera hora de la mañana.
A qué hora se debe tomar el café por la tarde
La nutricionista también ha aportado consejos sobre el café vespertino y recomienda no tomarlo una vez entrada la tarde. Después de comer los niveles de energía son más bajos, por lo que una taza en ese momento puede ser una opción funcional. Como los niveles de cortisol disminuyen de forma natural a estas horas, la cafeína puede aumentar el estado de alerta y aporta ese impulso de energía necesario.
Sin embargo, es esa capacidad de aumentar el estado de alerta la que nos puede tener despiertos toda la noche. Pradhan recomienda no consumirlo después de las cuatro de la tarde, especialmente para quienes tienen problemas para abrazar a Morfeo por las noches. La cafeína, que tiene una vida útil de unas ocho horas, puede seguir presente en el organismo a la hora de acostarse.
Cuánto café es demasiado
Una vez identificado el momento ideal para consumir café, hay que averiguar cuál es la cantidad adecuada. “El café actúa como diurético y tiende a deshidratar el cuerpo. Por lo tanto, si se toma en exceso, se deshidrata y aumenta la micción”, advierte Mugdha. La ingesta abundante de cafeína también puede elevar los niveles de estrógenos, provocando un aumento de peso. Por lo que racionar su consumo l para evitar estas situaciones.