Ocho signos que indican que no estás comiendo suficiente proteína

Este nutriente es esencial para el correcto funcionamiento del cuerpo

Huevos (Pexels)

Muchas veces relacionamos el consumo de proteínas con personas musculosas que pasan más tiempo en el gimnasio que en casa. Pero, consumir suficiente proteína no es sólo para los que quieran ganar músculo con pesas. Es crucial para cualquier individuo, ya que, son las encargadas de que nuestro cuerpo trabaje sin fallos, son necesarias para fortalecer y mantener los huesos, los músculos y la piel.

Los humanos tenemos más de 10.000 proteínas diferentes, que están formadas por unas moléculas llamadas aminoácidos. Para que el cuerpo funcione correctamente, necesita un total de 20 aminoácidos diferentes. Pero, tal y como explica la nutricionista Riya Lakhani-Kanji a la revista británica Glamour, “no es capaz de producirlos todos por sí solo”, únicamente puede fabricar 11. Por ello, para satisfacer todas sus necesidades, es vital obtener los nueve restantes a través de la dieta. “Los aminoácidos son los componentes básicos de las proteínas, esenciales para el crecimiento, la reparación y el mantenimiento de los músculos”, afirma por su parte la también nutricionista Milena Kaler.

Vitales para después del ejercicio

Una persona corriendo (Imagen Ilustrativa Infobae)

La proteína sí que tiene una estrecha relación con el deporte, es una fuente de energía durante el ejercicio prolongado e interviene en la producción y función de las células inmunitarias. Los aminoácidos también son cruciales para la síntesis de colágeno, que proporciona estructura a la piel, los huesos y los tejidos conectivos.

Read more!

Cuánta proteína hay que tomar al día

Las proteínas son los nutrientes que desempeñan un mayor número de funciones en las células de todos los seres vivos, por ello, es importante ingerirlos al diario. Tal y como apunta la Clínica de Navarra, un adulto debe consumir unos 40-60 gramos al día, ya que, consumidas en exceso, dejan residuos metabólicos tóxicos para el organismo. Aunque la cantidad varía según la edad, el nivel de ejercicio y el estado general de salud. Las mujeres embarazadas y lactantes, por ejemplo, también necesitan un extra para favorecer el crecimiento y desarrollo de sus bebés.

Las señales que indican que no estás ingiriendo suficientes proteínas

Hinchazón de pies, tobillos y abdomen

La falta de proteínas afecta al equilibrio de líquidos en los tejidos, según explica Lakhani-Kanji. La albúmina, por ejemplo, ayuda a gestionar el equilibrio de líquidos entre los vasos sanguíneos y los tejidos corporales. Si tenemos un déficit, el líquido se acumula en los lugares equivocados, provocando esa hinchazón notable.

Cambios de humor

Muchos neurotransmisores están formados por aminoácidos, por ejemplo, el triptófano, que es un precursor de la serotonina, la sustancia química que hace sentir bien al cuerpo.

Problemas de cabello, piel y uñas

Cuando el cuerpo no recibe las suficientes proteínas, da prioridad a las funciones vitales, lo que significa que no da tanta atención al pelo y la piel. Provocando una mayor caída del cabello, unas uñas quebradizas y una piel seca, escamosa y con un aspecto más apagado.

Lesiones y heridas que tardan en curar

Una ingesta insuficiente de este nutriente puede provocar una cicatrización más lenta de las heridas, un mayor riesgo de infección y que los esguinces tarden más en curarse.

Músculos débiles y sensación de cansancio constante

La proteína es crucial para el mantenimiento y la reparación muscular, al no consumir suficientes, el cuerpo puede tener dificultades para reconstruir las fibras musculares, lo que puede provocar debilidad y una pérdida de masa muscular.

Sensación de hambre

Este nutriente estimula la sensación de saciedad y reduce los niveles de la hormona del hambre.

Más antojos de azúcar

El consumir una comida sin suficiente proteína significa que los carbohidratos se digerirán más rápidamente, por lo que los niveles de azúcar en sangre subirán y luego caerán drásticamente.

Enfermarse con frecuencia

Una de sus principales funciones es contribuir a la producción de células inmunitarias y anticuerpos, esenciales para combatir infecciones y enfermedades.

Un estudio apunta a que una dieta baja en carbohidratos sería beneficiosa para adultos con diabetes tipo 1.
Read more!