El gazpacho es, sin duda, una de las recetas más conocidas de la gastronomía española. Se trata de una elaboración sencilla que, como también sucede con su complementario el salmorejo, tiene miles de variantes. En su versión primigenia, elaborado con una mezcla de pan desmigado, aceite de oliva y vinagre, el gazpacho alimentó a campesinos ibéricos del sur durante siglos. Ahora, esta receta ha evolucionado hasta convertirse en una deliciosa sopa fría que hace las delicias de cualquiera en un día caluroso de verano. Su sabor y su frescura hacen de este plato uno de los básicos del recetario español, una elaboración muy sencilla que no necesita trucos ni ingredientes especiales.
Durante sus programas en televisión, el cocinero Karlos Arguiñano ha elaborado muchas recetas de gazpacho diferentes, quitando y poniendo ingredientes o variando detalles de la receta para adaptarla a todos los gustos. En este caso, hablaremos de la receta más tradicional de todas las elaboradas por el chef, un gazpacho hecho a base de pan, tomate, pepino, pimiento, ajo y vinagre.
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Para disfrutar al máximo de este gazpacho, lo mejor es tomarlo lo más frío posible. Eso sí, debemos evitar el truco de añadirle cubitos de hielo para que esté más fresco pues, como explica el cocinero, puede “aguarse” y perder todo su sabor. Lo ideal para degustar el gazpacho tradicional en todo su potencia es prepararlo con antelación, teniendo en cuenta que lo conveniente será dejarlo enfriar en la nevera unas dos horas antes de su consumo. De este forma, conseguiremos mantener nuestro gazpacho en su óptimo sabor. También podemos dejarlo enfriar de un día para otro, eso sí, cubriéndolo con un papel film para que no se oxide o estropee.
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Cómo acompañar el gazpacho
Cuando hacemos gazpacho en casa, es habitual acompañarlo con algunos ingredientes de guarnición que aporten sabor, textura y valor nutricional a nuestro gazpacho. Además del clásico huevo duro troceado, Arguiñano tiene algunas ideas deliciosas que ha compartido en su programa, en las ocasiones en las que ha preparado un gazpacho con guarnición incluida.
Una posible idea es decorar el gazpacho con trocitos de jamón serrano crujiente. Para hacerlo en casa, solo tenemos que hacerte con unas lonchas de jamón y colocarlas en una bandeja de horno cubierta con papel vegetal. Las hornearemos a 190º C durante 12 minutos para conseguir unas láminas de jamón supercrujientes, que luego podremos picar y añadir a nuestro gazpacho para un delicioso contraste de texturas.
Otra opción que puedes apuntarte para acompañar al gazpacho es acompañarlo de los mismos ingredientes con los que lo has elaborado. En otra de sus recetas, Karlos Arguiñano preparaba una guarnición con tomate, pimiento verde y cebolleta picados muy finamente. Además, terminó la elaboración con unos daditos de pan fritos en aceite de oliva.
Receta de gazpacho tradicional andaluz de Arguiñano
Tiempo de elaboración: 30 minutos
Raciones: 4 personas
Ingredientes:
500 g de tomate maduro
Medio pimiento verde
1 diente de ajo
Medio pepino
100 ml de aceite de oliva
4 cucharadas de vinagre de vino
1 rebanada de pan blanco o pan de molde
Una pizca de sal
Elaboración:
- El primer paso será escaldar los tomates para poder pelarlos. Hacemos un corte muy superficial en forma de cruz en la base del tomate y los sumergimos en agua hirviendo entre 1 y 2 minutos. Los sacamos del agua y los pasamos por un chorro de agua fría. Ya podremos pelarlos fácilmente, tirando de la piel con las manos.
- Remojamos el pan en agua. Pelamos y cortamos el pepino y el ajo y picamos el pimiento verde. Añadimos los tomates, el pan remojado, el pimiento, el pepino y el ajo en el vaso de una batidora.
- Trituramos durante unos segundos y añadimos la sal, el vinagre y el aceite probando para rectificar si fuera preciso.
- Pasamos nuestro gazpacho por un colador chino y lo vertemos en una sopera: Dejamos enfriar en la nevera durante como mínimo una hora.
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