Día del amigo, cómo decidimos quiénes son nuestras amistades: 5 claves de la “química” en las relaciones

Las investigaciones muestran que las personas con amistades sólidas disfrutan de una mejor salud, tienen una vida más feliz y longeva. Los expertos explican la forma intuitiva que tenemos de seleccionarlas. Cómo generar nuevos vínculos en la adultez

Honestidad, intereses mutuos y valores y similares son algunas las claves de las amistades duraderas (Imagen ilustrativa Infobae)

Cultivar la amistad es un verdadero “antídoto” contra los males de este mundo. Múltiples investigaciones han confirmado que quienes tienen una red estable de amigos disfrutan de una mejor salud cardiovascular, sufren de menos estrés, son menos propensos a enfermedades y sienten mayor satisfacción, placer y felicidad en la vida.

Los amigos, además de la alegría, las risas y el disfrute nos brindan salud y longevidad. ¿Qué más se puede pedir a estas entrañables relaciones que nos va regalando la vida?

La doctora Mirta Goldstein, presidenta de la Asociación Psicoanalítica Argentina (APA), explicó a Infobae cómo decidimos quiénes son nuestras amistades: “Obviamente, no elegimos amigos al azar, aunque el azar a veces nos acerca amigos. Y gracias a esos encuentros inesperados, conocemos a quien podrá acompañarnos en un tramo de la vida”.

Las amistades son testigos de nuestras vidas, ayudando a construir nuestra memoria y ofrecer diferentes perspectivas (Imagen Ilustrativa Infobae)

En estos tiempos de redes sociales, la amistad puede presentarse en una amplia variedad, desde ser un simple “contacto”, compañeros de trabajo o de una actividad o el amigo de toda la vida. Sin embargo, la amistad no es una cuestión de cantidad, sino de tener vínculos realmente cercanos e importantes”.

No cualquier persona es un amigo. En una nota reciente María Fernanda Rivas, licenciada en Psicología, psicoanalista, miembro de la Asociación Psicoanalítica Argentina, especialista en parejas y familias, definió a Infobae esa relación: “Amigo será aquel con quien se pueda abandonar temporalmente la ‘máscara social’ y mostrarse de ‘entrecasa’; o con quien se pueda establecer una situación de intimidad y compartir un mismo estado afectivo. La intimidad también se asocia al poder estar ‘a solas’ en presencia de otro –sin que esto cause incomodidad- y a la vez estar emocionalmente disponible para este”.

Y agregó: “Un amigo suele ser testigo de diferentes aconteceres de nuestra vida: el crecimiento, los logros, los dolores, las alegrías. Por tal motivo, a veces, participa en la construcción de nuestra memoria, ya que posee recuerdos que quizás hemos olvidado o deformado. Puede acercarnos nuestras distintas “versiones” de otras épocas para que podamos reconocernos. La verdadera amistad requiere tiempo, afecto, historias compartidas, acuerdos -y también desacuerdos- y la libertad de volverse a elegir en cada encuentro”.

La amistad no es una cuestión de cantidad sino de vínculos cercanos y significativos que impactan positivamente la vida (Imagen ilustrativa Infobae)

Por su parte, el licenciado en Psicología Alexis Alderete (MP 85367), egresado de la Universidad del Salvador, especialista en Trastornos de Ansiedad y Entrenamiento en Habilidades y posgrado en Sexología Clínica definió cuáles son las condiciones que reúnen quienes son nuestros amigos y en qué se diferencian de otras relaciones: “Los amigos son nuestras primeras interacciones por fuera del ámbito familiar. Los elegimos porque a medida que compartimos más tiempo y atravesamos diversos eventos, el vínculo emocional y la confianza que depositamos en esas personas se va incrementando. Sabemos de alguna manera que podemos contar con ella cuando la necesitemos”.

Y añadió: “Compartimos nuestros pensamientos, las emociones que vamos transitando en nuestra vida, y con ellos tenemos experiencias que nos acercan aún más, lo que hace que la conexión emocional se haga más fuerte”.

Mirta Goldstein describió esa relación: “El amor entre amigos, como cualquier otro amor, no es eterno ni incondicional, sino un lazo posible entre dos personas diferentes que, además, tienen su propia vida y otros amigos. La idea de ser único para alguien trae sufrimiento”.

La doctora Mirta Goldstein destaca la importancia de las amistades cercanas en tiempos de redes sociales y exilio (Imagen Ilustrativa Infobae)

También la experta remarcó que en la actualidad la amistad y la vecindad han adquirido una dimensión importante porque, en muchos casos, ya no hay familia cerca o cercana. No es lo mismo cerca que cercano. Un vecino cerca puede convertirse en un amigo cercano. Unos padres lejos pueden estar cerca afectivamente o no. Las pantallas ayudan cuando la familia está lejos, pero si se necesita un favor, hace falta alguien cercano y cerca. Esto se ve hoy día en los exilios, o sea, cuando los jóvenes se van del país o cambian de ciudad”, destacó Goldstein.

¿Existe una “química” en la amistad?

El licenciado Alderete comentó que la química en las relaciones con quienes consideramos nuestros amigos se da como una sensación de entendimiento a medida que vamos interactuando cada vez más con esa persona, “podemos confiar en ella y revelar nuestros puntos de vista sobre la vida. Observamos que el disfrute de la relación se da en ambas partes”.

Y añadió el experto: ”A medida que tenemos conversaciones cada vez más duraderas e íntimas, notamos de manera intuitiva que esa persona es distinta a otros vínculos. Hay una facilidad en la interacción, que va fluyendo sola, hay una participación sin planificación en el tiempo que compartimos. Nuestro cuerpo se va relajando porque nos sentimos cómodos y seguros, no estamos en un estado de alerta para evitar salir lastimados. Sentimos que podemos ser nosotros sin ser juzgados”.

Un amigo permite abandonar la máscara social y compartir intimidad y emociones sin incomodidad (Freepik)

En su columna en Psychology Today el doctor Frank McAndrew, profesor de Psicología en Knox College, explicó: “La mayoría de nosotros tenemos un sentido intuitivo de cómo se ve y se siente tener química con alguien. Hay una facilidad y una fluidez para interactuar con ellos; una suavidad y sincronía en los comportamientos no verbales, el turno de conversación y la forma en que se despliega el humor. Hay confianza en que están leyendo las emociones e intenciones de los demás correctamente. Todo esto hace que la experiencia interpersonal sea energizante y divertida, y las interacciones impulsadas por la química fomentan relaciones que son más que la simple suma de sus partes”.

El experto señaló que se ha desarrollado un instrumento llamado “Cuestionario de Química de la Amistad” que identifica los cinco factores principales que contribuyen a hacerse nuevos amigos. Estas son:

  1. Honestidad recíproca y apertura
  2. Intereses mutuos
  3. Calidez y ser agradable
  4. Valores y cosmovisiones similares (especialmente importantes en las amistades)
  5. Atracción física (especialmente importante en las relaciones románticas)
Las actividades placenteras en la vida adulta ayudan a generar nuevas amistades y conexiones emocionales (Imagen ilustrativa Infobae)

“Las relaciones interpersonales que presentan estas cualidades están en camino de convertirse en amistades”, aseguró el experto.

Como hacerse más amigos siendo adultos

La doctora Marisa Franco, exprofesora en la Universidad Estatal de Georgia, investigadora asociada de la Millenium Challenge Corporation, puntualizó en un artículo en Psychology Today que las amistades ocurren cuando tenemos interacciones repetidas no planificadas y vulnerabilidad compartida. Desafortunadamente, como adultos, no se propician estas condiciones con frecuencia, expresó la investigadora.

La experta recomendó recrear esta infraestructura para hacerse de nuevos amigos. “Podemos hacerlo llevando a cabo nuestro pasatiempo favorito en una comunidad. Podemos unirnos a un grupo de caminata, running, un club de lectura, una clase de idiomas o meditación”, propuso la experta.

La doctora Goldstein destacó que en todas las etapas de la vida, las amistades son necesarias: “en el jardín, en la escuela, cuando se es joven y se hace deporte, y cuando se es adulto para compartir las experiencias familiares, tener hijos y nietos, festejar los cumpleaños. En todas las etapas de la vida hace falta con quién compartir tanto los momentos felices como los más dolorosos. La vida de todos está llena de alegrías y de tristezas, y hacen falta amigos con quien sentarse a una mesa, con un café o una copa de vino, y poder compartir esas experiencias”.

Brindar tiempo de calidad y ser sinceros son claves para cultivar y mantener amistades que mejoran la salud y el bienestar (Imagen Ilustrativa Infobae)

Alderete comentó que a medida que vamos creciendo entramos en la vida adulta que va llenándose de responsabilidades y obligaciones y contamos con menos tiempo para nuestras actividades de disfrute y ocio. “Pero aún así podemos desarrollar y participar en actividades que son placenteras en las cuales podamos generar nuevas amistades”, recomendó.

A diferencia de la infancia y adolescencia, en la vida adulta podemos desarrollar ciertas actividades que son de nuestro más íntimo interés, en las cuáles muchas veces, por falta de dinero de nuestros padres tal vez, no pudimos realizarlas. “Siendo adultos es buen momento de sacar a flote “nuestro niño/a” interior y ahí es donde podremos ser nosotros mismos. Encontraremos relaciones que tengan gustos afines y donde podamos compartir tiempo de calidad sin ser juzgados por la elección que hagamos”.

“En el transcurso de nuestras vidas atravesamos momentos difíciles y también alegres. Saber que nuestros amigos estarán ahí para comprendernos y, muchas veces, compartir esos momentos con ellos, nos permite internalizar que desarrollar amistades auténticas es parte de la felicidad que merecemos como personas”, resumió Alderete.

Las amistades son necesarias en todas las etapas de la vida para compartir experiencias y emociones - (imagen ilustrativa infobae)

La doctora Goldstein recomendó, para tener amigos, “no hablar mal de otros, ser amable, decir gracias, saber escuchar. Socializar justamente es hacer vínculos de ternura, amor y amabilidad”.

Más consejos de expertos para hacerse amigos

  • Brindar tiempo de calidad. No importa qué tan ocupada tengamos nuestra agenda, siempre guardar unos minutos al menos para contactar con los amigos, programar encuentros y concretarlos. Convenir una fecha, aunque sea lejana, y respetarla.
  • Saber comunicarse. Es fundamental ser reales y mostrarse como seres humanos, vulnerables y con errores y aciertos. Practicar la atención plena a los amigos privilegiando el disfrutar de una buena comunicación. La humildad y la generosidad para estar presente cuando se sabe que el otro nos necesita (aunque no se atreva a pedirnos esa ayuda) son experiencias que fortalecen el vínculo.
La química en la amistad se caracteriza por la sincronía en comportamientos y confianza (Imagen Ilustrativa Infobae)
  • Ser sinceros. Decir la verdad, por amarga que sea, ayuda a mantenernos unidos y a enmendar los errores, lo cual permite que la relación perdure en el tiempo. La amabilidad es fundamental.
  • Tener empatía y aceptación. La capacidad de ponernos en el lugar del otro y entender sus sentimientos es un gran símbolo de amistad, al igual que el apreciar todos los aspectos positivos de nuestros amigos y expresárselos. Es clave respetar y aceptar las diferencias.

Trabajar para tener buenos amigos y mantenerlos es uno de los mejores consejos para una buena salud, bienestar y felicidad; además, es la base de la construcción de vidas plenas y de sociedades basadas en valores trascendentes para toda la vida.