Cuáles son las lesiones más frecuentes en la oficina y cómo prevenirlas

México es uno de los países con las jornadas laborales más largas a nivel mundial, con más de 40 horas semanales para cada trabajador. Pese a que ya hay una reforma que se discute actualmente para apelar a que se reduzca el tiempo de trabajo, existen otros factores que deben procurarse, entre ellos la movilidad física y la salud en general.

Incluso para quienes se piensa que tienen los trabajos menos riesgosos, existen factores que puede causar afecciones en su salud y su bienestar físico y mental.

Aun cuando no se habla lo suficiente de ello, quienes trabajan en oficinas tienen mayor propensión a sufrir padecimientos que comprometen sus músculos, sus articulaciones y su movilidad, es decir, trastornos músculo-esqueléticos.

Los trastornos músculo-esqueléticos de origen laboral surgen por actividades repetitivas, posturas incómodas o movimientos bruscos, los cuales provocan a largo plazo enfermedades como la tendinitis, el síndrome del túnel carpiano, la bursitis.

Además de estos, también se pueden originar lesiones de espalda, no solo por levantar objetos pesados, sino también por malas posturas o movimientos repetitivos; lesiones de hombro causadas por movimientos repetitivos por encima de la cabeza, dolor en el cuello y los brazos por malas posturas, uso excesivo de computadoras o equipos ergonómicamente deficientes.

Aun cuando los síntomas y las zonas donde se presentan los siguientes padecimientos son muy similares, es importante reconocer que cada uno de ellos afecta a una parte del cuerpo específica, por lo que los tratamientos no son los mismos para todas, aunque las medidas preventivas en todas se enfocan en la movilidad y el reposo momentáneo del área de trabajo.

De acuerdo el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el síndrome del túnel carpiano es producido por la presión o irritación del nervio mediano, que recorre desde el antebrazo hasta la mano a través de una estructura osteofibrosa conocida como túnel carpiano.

Es la neuropatía por atrapamiento más frecuente, afectando hasta a un 3% de la población general, y 10% de las personas de occidente, y tiene mayor incidencia en mujeres de entre 40 a 60 años de edad. Su origen laboral se produce como consecuencia del desarrollo de tareas que requieren movimientos repetidos o mantenidos de hiperextensión e hiperflexión de la muñeca o de aprehensión de la mano. 

De acuerdo con estudios clínicos, la prevalencia en las mujeres podría estar vinculada a la menor dimensión relativa del túnel carpiano, explica el especialista en neurofisiología clínica, Pablo González. La osteoporosis posmenopáusica y la artritis reumatoide son condiciones que pueden agravar este síndrome en mujeres, al estrechar el túnel carpiano y causar irritación en el nervio mediano.

Los síntomas del síndrome del túnel carpiano se desarrollan de forma progresiva y suelen iniciar con una mayor sensibilidad en la palma, cerca del pulgar y los dedos, con excepción del meñique. Entre los indicios más comunes están el entumecimiento, hormigueo y debilidad en la mano, que pueden interferir con actividades cotidianas como usar un teclado, sostener un teléfono o manejar un automóvil.

La tendinitis es una inflamación o hinchazón de los tendones, que son las estructuras fibrosas que conectan los músculos con los huesos. Esta afección puede afectar a cualquier tendón del cuerpo, pero es más común en áreas como los hombros, codos, muñecas, rodillas y tobillos.

Algunos de los principales síntomas de la tendinitis son dolor y sensibilidad cerca de la articulación afectada, lo cual se empeora con el movimiento, así como inflamación e hinchazón leve en la zona del tendón. Este padecimiento puede aparecer por alguna lesión grave o sobrecargas repetitivas en los tendones.

Cuando los trabajadores presentan tendinitis tienen una pérdida de elasticidad de los tendones por envejecimiento; también puede presentarse debido a ciertas enfermedades como artritis reumatoide, diabetes o problemas tiroideos, según la Secretaría de Salud.

Si se presentan dichos síntomas se debe acudir al médico con el fin de evitar complicaciones como la ruptura del tendón; el tratamiento consiste en reposo, aplicación de hielo en la zona afectada y en algunos casos, medicamentos para disminuir el dolor y la inflamación.

La bursitis es la inflamación o irritación de las bursas, es decir, las pequeñas bolsas llenas de líquido que actúan como amortiguadores entre los huesos, tendones y músculos alrededor de las articulaciones. Los síntomas de la bursitis incluyen dolor, rigidez, hinchazón y enrojecimiento en la articulación afectada, lo cual ocurre porque la inflamación de la bursa causa fricciona e irrita los huesos, músculos y tendones.

La bursitis puede ser aguda, con síntomas que aparecen de forma repentina, o crónica, cuando los episodios de inflamación se repiten. Algunas articulaciones más propensas a la bursitis son el hombro, la cadera, la rodilla, el codo y el talón

La principal causa de la bursitis son los movimientos repetitivos o presión prolongada sobre una articulación, lo que irrita la bursa. Además, esta enfermedad se puede originar debido a lesiones o traumatismos en la zona afectada, así como enfermedades inflamatorias como artritis reumatoide, gota o infecciones.

La hernia discal es una condición en la que parte del disco intervertebral se desplaza hacia la raíz nerviosa, la presiona y produce dolor. Esto ocurre con mayor frecuencia en la región lumbar y está asociado a una mala postura, movimientos repetitivos o presión prolongada sobre una articulación, aunque este padecimiento se da también por envejecimiento natural.

Tener una afección en la hernia discal puede causar síntomas de ciática, especialmente en personas que trabajan en oficinas con poca actividad física, ya que la falta de movimiento y la postura prolongada sentado pueden degenerar de los discos intervertebrales.

Cuando una hernia discal afecta un nervio, puede causar dolor, entumecimiento, hormigueo o debilidad en la pierna, lo que se conoce como ciática. Asimismo, los síntomas de ciática por hernia discal suelen empeorar con la actividad y mejorar con el descanso. Esto puede dificultar el trabajo en una oficina; aún así, el IMSS recomienda en su manual de Prevención de Padecimientos hacer que los empleados tomen descansos frecuentes para estirarse y moverse, así como usar una silla ergonómica que apoye la espalda y mantener una postura correcta y evitar estar doblado hacia adelante.

Los accidentes de trabajo ocurren debido a las condiciones peligrosas o no adecuadas que existen en los equipos, maquinarias, herramientas de trabajo e instalaciones, así como por la actitud o actos inseguros de los trabajadores al realizar sus actividades. Lo anterior quiere decir que sí hay una forma de prevenir que a un trabajador se le genera alguno de estos padecimientos.

Para prevenir cualquiera de ellos, los especialistas recomiendan la implementación de estrategias que permitan a los trabajadores que pasan mucho tiempo sentados frente a la computadora hacer pausas de descanso, con la finalidad de mantener relajados desde el cuello, hombros, codos y por ende, las muñecas.

• Mantener una postura y movimientos ergonómicos en el trabajo y durante actividades físicas..
• Toma descansos frecuentes durante tareas repetitivas.
• Tomar descansos frecuentes durante tareas repetitivas para los músculos y tendones afectados.
• Mantener un peso saludable para evitar sobrecargar las articulaciones.
• Tratar las lesiones de forma temprana y sigue las recomendaciones de tu médico.

• Mantener una postura correcta al sentarte, estar de pie y levantar objetos.
• Fortalecer los músculos del core para dar soporte a la columna vertebral.
• Evitar movimientos bruscos o cargas excesivas en la espalda.
• Practicar ejercicios de estiramiento y flexibilidad de la espalda.
• Mantener un peso saludable para reducir la presión sobre la columna.

• Adoptar una posición correcta de las manos y muñecas al dormir.
• Utilizar elementos ergonómicos como ratones y teclados adecuados.
• Tomar descansos regulares durante actividades repetitivas.
• Realizar ejercicios de movilidad y fortalecimiento de la muñeca.

Las autoridades resaltan que la clave está en combinar prácticas ergonómicas, ejercicios y un estilo de vida saludable para prevenir eficazmente estas afecciones músculo-esqueléticas. } Aunque la tecnología forma parte de nuestra vida cotidiana, se necesita generar disciplina, establecer tiempos adecuados e ir encaminando a los niños hacia el uso adecuado de la tecnología.