El noni, es una fruta considerada exótica, especialmente por su aspecto, textura y olor. Su tamaño es pequeño con una cáscara que cambia de color verde a amarillo pálido cuando está madura. Tiene una textura esponjosa y despide un aroma bastante fuerte y distintivo, en ocasiones es calificado como desagradable.
Pese a no ser agradable como otros alimentos, la también llamada “fruta del diablo” es una fuente rica en nutrientes que pueden aportar importantes beneficios para la salud. El noni contiene compuestos antioxidantes que contribuyen a la prevención de enfermedades crónicas como el cáncer y enfermedades cardiovasculares.
Algunos estudios sugieren que este peculiar fruto puede tener propiedades antiinflamatorias, mejora la función del sistema inmunológico y es utilizado para aliviar el dolor. Incluidas molestias como los dolores de cabeza, el dolor menstrual y el dolor articular.
Sin embargo, tradicionalmente el noni se consume para tratar problemas digestivos, tales como:
- Estreñimiento: puede ser utilizado como un laxante natural. La fruta contiene compuestos que pueden estimular el tránsito intestinal, ayudando a aliviar el estreñimiento.
- Úlceras gástricas: se ha sugerido que el noni tiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes que podrían contribuir a la disminución de la inflamación y la protección del revestimiento del estómago, lo que podría ser útil en el manejo de úlceras gástricas.
- Infecciones gastrointestinales: se cree que el noni tiene propiedades antimicrobianas, lo que podría ayudar a combatir infecciones bacterianas en el tracto gastrointestinal.
- Inflamación intestinal: debido a sus propiedades antiinflamatorias, el noni podría ser beneficioso en la reducción de la inflamación intestinal, útil en condiciones como la colitis o la enfermedad de Crohn.
Cabe destacar que a pesar de estos usos en la medicina natural y tradicional, se deben realizar más investigaciones científicas rigurosas para confirmar estos beneficios y determinar la seguridad y eficacia del noni en el tratamiento de enfermedades específicas. Antes de incluir el fruto a la dieta con fines terapéuticos, se recomienda consultar con un profesional de la salud.