La contundente opinión del chef Pepe Rodríguez sobre las plataformas para hacer reservas en restaurantes: “Ya no se hace como se hacía antes”

El chef Pepe Rodríguez entró en la cocina de una “forma forzada” sin gustarle ni interesarle. Emprendió un largo hasta que los fogones se convirtieron en una pasión, hasta que se dio cuenta de que era el oficio que él quería y que estaba haciendo lo que más le gustaba. Un proceso de “muchos años, de mucho trabajo, de mucho esfuerzo, de empezar a quererlo”. Él mismo le ha hecho un pequeño resumen de sus “treinta y tantos años” de trayectoria a Manel Asensio en su podcast Gastro Lamb.

Por cuestiones de “casi salvar el negocio” que creó su abuela, cuando su hermano y él estaban de camareros y esos cocineros que tenían “o duraban seis meses” o un año y no conseguían hacer “un proyecto serio” de El Bohío, ninguno de los dos se planteó tener que estar al cargo de las sartenes. Por ello, tomaron la decisión de ir turnándose hasta que el jurado de Masterchef se quedó en la cocina, para quitarse también “un poco de la sala”.

Rodríguez confiesa que jamás le preguntó a su abuela ni a su madre cómo era eso de cocinar. “Yo no había pasado por una escuela de hostelería, ni tan siquiera había tenido inquietud o interés. Yo no le había preguntado a mi madre nunca cómo se había hecho eso, porque es que no me interesaba”, le ha contado a Asensio. Admite que los comienzos fueron duros, porque al principio tampoco era consciente de todo lo que conllevaba ser el responsable de un negocio.

“¿Por qué tengo que saber de economía? Porque un restaurante no deja de ser un negocio y te puedes arruinar. Puedes tirar adelante y ganar dinero. Pero nadie te ha enseñado a gestionar. Y todas esas cosas. Te metes de golpe y tienes que ir aprendiéndolas”, apunta. Asimismo, admite que a día de hoy sigue formándose porque “no acabas nunca de aprender”.

Sus primeros pasos los recuerda como una “anécdota pura y dura”. “He fallado tantas veces. Me habré equivocado tantas veces. Habré hecho tantos platos malos hasta que empecé a tener sensibilidad hacia la cocina y a aprender de verdad”, añade el profesional. A pesar de ser un chef de renombre, considera que ha tenido “demasiada suerte” y que le han premiado y reconocido “en exceso”.

Aunque lleva algo más de tres décadas en este negocio, el chef es consciente de que las cosas han cambiado durante todos estos años, por ello trabaja con plataformas de reservas como El Tenedor. Ante todo, lo que él más valora es “una buena gestión”. “Para mí es muy fácil porque hoy el 95%-99% de las reservas que se hacen en este restaurante son online”, ha asegurado. “Ya no se hace como se hacía antes”, comenta. Asimismo, asegura que el libro de reservas “ha muerto” y que ahora los clientes conciertan sus citas a través de Internet. “Yo necesito que alguien me dé esa cobertura”, ha agregado.