Los garbanzos con sepia son un plato que combina lo mejor de la tierra y el mar, resultando en una receta reconfortante, llena de sabor y perfecta para los días más frescos. Su proceso sencillo y rápido hace de la sepia con garbanzos uno de los platos de legumbres ideales para quienes carecen de experiencia en este ámbito, una receta ideal para hacer en casa sin complicaciones y que nos asegura un resultado, casi siempre, de lo más sabroso.
Esta elaboración comienza, como suele ser frecuente en los platos de cuchara de la gastronomía española, con un sencillo sofrito a base de cebolla, ajo y tomate, al que también se pueden añadir verduras como el pimiento verde. El sabor de este sofrito, acompañado del de un caldo de pescado bien reducido, nos dará un resultado exquisito.
Podemos preparar este plato con garbanzos secos, cociéndolos primero en la olla rápida durante 45 minutos o en una olla común en 1 hora y media, o si lo prefieres, utilizar garbanzos cocidos en conserva, reduciendo así el tiempo de la elaboración. Escojamos lo que escojamos, el resultado será espectacular, más aún si nos esmeramos en utilizar un caldo de pescado casero en lugar de uno comprado. Esto no solo nos conseguirá un guiso más saludable a nivel nutricional, sino que, además, potenciará al máximo el sabor marinero de esta deliciosa receta.
Además de reconfortante y sabrosa, se trata de una receta llena de nutrientes que nos ayudará a llenarnos de energía en uno de esos días invernales en los que un plato de cuchara se convierte en aliado imprescindible. La sepia, una maravillosa fuente de proteínas y ácidos grasos omega-3, se une al gran poder nutricional de los garbanzos, una legumbre que supone una excelente fuente de calcio y que posee un alto contenido de hierro, magnesio, potasio, fósforo.
Receta de garbanzos con sepia
La preparación de este plato comienza con un sofrito aromático que potencia los sabores del guiso. Los garbanzos, previamente remojados o cocidos, se unen a la sepia en una cocción lenta que asegura una textura tierna y jugosa. Este plato es ideal como plato principal, acompañado de un buen pan para mojar en la salsa.
Tiempo de preparación
- Preparación: 15 minutos
- Cocción: 1 hora y 30 minutos
- Tiempo total: 1 hora y 45 minutos
Ingredientes
- 250 g de garbanzos secos (o 400 g cocidos)
- 400 g de sepia limpia y cortada en trozos
- 1 cebolla grande
- 2 dientes de ajo
- 1 tomate maduro
- 1 pimiento verde (opcional)
- 1 hoja de laurel
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta al gusto
- 1 litro de caldo de pescado o agua
- Perejil fresco para decorar
Cómo hacer garbanzos con sepia, paso a paso
- Preparar los garbanzos: Si usas garbanzos secos, déjalos en remojo durante 12 horas. Después, cuécelos en agua con una hoja de laurel hasta que estén tiernos (unos 45 minutos en olla rápida o 1 hora y media en olla normal). Si utilizas garbanzos en conserva, puedes saltarte este paso.
- Hacer el sofrito: En una cazuela grande, sofríe la cebolla picada y el ajo en aceite de oliva hasta que estén tiernos. Añade el tomate rallado y el pimiento verde troceado. Cocina hasta que el sofrito esté bien reducido.
- Cocinar la sepia: Incorpora la sepia troceada al sofrito y saltea durante unos 5 minutos, hasta que empiece a dorarse ligeramente.
- Añadir el pimentón: Espolvorea el pimentón dulce y mezcla rápidamente para evitar que se queme. Agrega el caldo de pescado y lleva a ebullición.
- Integrar los garbanzos: Añade los garbanzos cocidos al guiso y cocina a fuego lento durante unos 30 minutos para que se integren los sabores. Si el guiso se seca demasiado, añade más caldo.
- Ajustar y servir: Rectifica de sal y pimienta. Sirve caliente, decorado con perejil fresco picado.
¿Cuántas raciones se obtienen de esta receta?
Con estas cantidades, esta receta rinde aproximadamente para 4 personas.
¿Cuál es el valor nutricional de cada porción de esta receta?
- Calorías: 320 kcal
- Grasas: 10 g
- Grasas saturadas: 2 g
- Carbohidratos: 35 g
- Azúcares: 4 g
- Proteínas: 20 g
Cabe señalar que estas son estimaciones, y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.
¿Cuánto tiempo se puede conservar esta preparación?
Este plato se puede conservar en la nevera, en un recipiente hermético, por hasta 3 días. También se puede congelar por un máximo de 2 meses.