Ni de plástico ni de madera: este es el material del que deben ser tus tablas de cortar para que sean más higiénicas

Aunque el debate suele estar entre estas dos opciones, existe una tercera que sería la solución perfecta para paliar los defectos de ambos materiales

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ILUSTRACIÓN - Las tablas de madera tienen la ventaja de que no desafilan los cuchillos, pero no son aptas para colocarlas en el lavavajillas. Foto: Christin Klose/dpa
ILUSTRACIÓN - Las tablas de madera tienen la ventaja de que no desafilan los cuchillos, pero no son aptas para colocarlas en el lavavajillas. Foto: Christin Klose/dpa

La higiene es fundamental en la cocina. El correcto lavado de los alimentos, mantener un frigorífico ordenado que prevenga la contaminación cruzada y lavarse las manos adecuadamente son algunos de los factores que determinan una cocina higiénica y, por lo tanto, saludable y segura. Los utensilios que utilizamos para nuestras recetas, desde ollas hasta cucharas, también afectan a la limpieza y sanidad entre fogones.

Las tablas de corte son una herramienta crucial para no dañar el material de la cocina con el cuchillo, aunque siempre surgen dudas sobre cuál es la mejor opción para utilizarla de forma segura e higiénica. A este tema han dedicado una publicación las cuentas de Instagram @cazabacterias y @curiosidadalimentaria ambas centradas en la seguridad alimenticia en las cocinas. En su vídeo, los expertos hablan sobre las distintas posibilidades en cuanto a material se refiere, además de dar sus consejos para manipular estas tablas de manera correcta.

El vídeo comienza tratando uno de los materiales más polémicos a la hora de cocinar, el plástico. Los expertos explican que se trata de un producto versátil y accesible, aunque recuerdan que, para utilizarlo como tabla de cortar, debe tratarse de un plástico apto para alimentos. Aunque existen distintas calidades dentro de estos formatos, las tablas de plástico son una herramienta que, en general, sufre un considerable deterioro con su uso. En estos casos, señalan, cuando el deterioro se hace notorio, debemos sustituir nuestras tablas de plástico para mantener la higiene y seguridad de nuestras recetas.

En cuanto a las tablas de madera, las expertas señalan que, al tratarse de un material poroso, no se aconseja para manipular carnes crudas. Esto se debe a que la madera “absorbe sus jugos” y puede “albergar microorganismos”. En el caso de decidirse por una de estas tablas, se recomienda tratarla entre usos con grasa o aceite para sellar poros, lo que evitaría la intrusión de líquidos y bacterias en estos.

Aunque el debate suele estar entre estas dos opciones, existe una tercera que sería la solución perfecta para paliar los defectos de ambos materiales. Se trata del vidrio templado, un tipo de vidrio procesado por tratamientos térmicos o químicos que hacen que aumente su resistencia en comparación con el vidrio normal. Sobre este material, utilizado para fabricar tablas de cortar, las expertas aseguran que es tremendamente útil, ya que destaca por ser “inerte, fácil de limpiar y duradero” aunque reconocen que también conlleva algunas desventajas, como es el caso de su precio, más elevado de lo habitual al tratarse de un vidrio especial.

Cómo usar las tablas de cortar de forma segura e higiénica

A la hora de mantener la seguridad alimentaria en nuestras cocinas, sobre todo a la hora de utilizar tablas de cortar, el material es un factor fundamental a tener en cuenta. Sin embargo, también lo es el mantenimiento y uso que demos a estos útiles. En el mismo vídeo, los expertos recomiendan algunos cuidados que no solo prolongan la vida útil de las tablas de cortar, sino que además garantizan un entorno de cocina más seguro y saludable.

El uso de tablas de cortar en la cocina requiere atención para evitar problemas de salud. Las grietas visibles en las tablas, ya sean de madera o plástico, pueden albergar microorganismos peligrosos y, en el caso del plástico, liberar microplásticos que contaminan los alimentos. Por ello, es crucial reemplazarlas cuando se detecten estos daños.

Para prevenir la contaminación cruzada, los expertos recomiendan utilizar tablas diferentes para alimentos crudos y cocidos. Si no es posible, se debe cortar primero lo cocido y luego lavar y desinfectar la tabla antes de usarla con alimentos crudos. Este proceso de limpieza debe incluir agua y detergente, seguido de una desinfección con agua hirviendo o un sanitizante adecuado. Es importante asegurarse de que no queden restos de alimentos, ya que estos pueden reducir la efectividad de la desinfección.

El secado y almacenamiento de las tablas también es un aspecto fundamental. Las tablas deben estar completamente secas antes de guardarlas para evitar la proliferación de bacterias. En el caso de las tablas de madera, un truco útil es dejarlas secar sobre la cocina después de apagar el horno, aprovechando el calor residual.

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