Cómo hacer alcachofas al horno, una receta que ayuda a reducir el colesterol y a mejorar el sistema digestivo

La entendemos como una verdura, pero en realidad la alcachofa, uno de los ingredientes más deliciosos de la gastronomía mediterránea, es una flor. Es una flor de sabor increíble y llena de nutrientes, rica en fibra, baja en calorías y diurética, que se puede cocinar de muchas formas diferentes, todas ellas deliciosas. Alcachofas guisadas, alcachofas con jamón, en tempura, confitadas, rehogadas...

Las alcachofas son perfectas tanto para comer como para cenar, un picoteo ideal de fin de semana o como guarnición de carnes y pescados. En esta ocasión, las prepararemos al horno, una forma sencilla y deliciosa de disfrutar de este vegetal. Con ajo, aceite de oliva y un toque de pan rallado y queso parmesano que aporta sabor y textura, este plato es perfecto como entrante o acompañamiento, resaltando el sabor natural de las deliciosas alcachofas.

La alcachofa (Cynara scolymus), es una planta invernal originaria de Etiopía, una hortaliza que destaca por sus múltiples beneficios para la salud y su significativo aporte en la cocina a nivel gastronómico. En España, el cultivo de alcachofas se centra en las zonas de Tudela (Navarra), de Benicarló (Alicante), donde cuenta con su propia denominación de origen protegida, y en El Prat (Barcelona).

En lo que a propiedades nutricionales se refiere, entre sus principales componentes se encuentran los hidratos de carbono, especialmente la inulina y la fibra. La alcachofa también es rica en minerales como el potasio, que contribuye al funcionamiento adecuado del sistema nervioso y muscular, y el fósforo, esencial para mantener huesos y dientes en condiciones normales. Además, este alimento tiene un bajo contenido calórico, con apenas 44 kcal por cada 100 gramos.

Uno de los compuestos más importantes que contiene esta planta es la cinarina, un ácido hidroxicinámico y un componente químico biológicamente activo que puede estimular la producción de bilis. Además, este compuesto es el responsable del control del colesterol LDL y de los triglicéridos. Esto sucede porque actúa obstaculizando la síntesis endógena del colesterol y los lípidos, al tiempo que estimula la transformación del colesterol en ácidos biliares.

Tiempo de elaboración: 1 hora y 15 minutos

Raciones: 4 personas

Ingredientes:

• 4 alcachofas grandes
• 4 dientes de ajo, picados finamente
• 1 limón
• 4 cucharadas de aceite de oliva
• Sal al gusto
• Pimienta negra al gusto
• Perejil fresco picado (opcional)
• 1/4 taza de pan rallado (opcional, para un toque crujiente adicional)
• 1/4 taza de queso parmesano rallado (opcional)

Elaboración:

1. Precalienta el horno a 200 °C.
2. Limpia las alcachofas quitando las hojas exteriores más duras y corta las puntas espinosas.
3. Corta los tallos para que las alcachofas puedan mantenerse de pie y frota las alcachofas con el limón para evitar que se oxiden.
4. Con cuidado, abre las hojas de cada alcachofa para que parezcan flores.
5. En un bol pequeño, mezcla el ajo picado con el aceite de oliva.
6. Con una cuchara, vierte la mezcla de ajo y aceite entre las hojas abiertas de las alcachofas.
7. Sazona con sal y pimienta al gusto.
8. Si deseas un toque crujiente, espolvorea pan rallado y queso parmesano entre las hojas.
9. Coloca las alcachofas en una bandeja para hornear.
10. Cubre la bandeja con papel aluminio y hornea durante 45 minutos.
11. Retira el papel aluminio y hornea por 15 minutos adicionales o hasta que las alcachofas estén doradas y tiernas.
12. Sirve las alcachofas calientes, espolvoreadas con perejil fresco si lo deseas.