Son muchas las personas que sienten que el frenético ritmo de vida que llevan terminan por consumirles la energía. Acaban el día exhaustas o a duras penas, y no se encuentran con fuerzas de realizar actividades de ocio o de aprovechar al máximo el tiempo libre con los seres libres.
Aunque hay quienes recurren al consumo de ciertos suplementos, la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard recoge en una publicación una serie de recomendaciones para potenciar nuestra energía al máximo de manera natural.
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Controla el estrés
Las emociones inducidas por el estrés consumen enormes cantidades de energía. Hablar con un amigo o familiar, unirse a un grupo de apoyo, practicar yoga o consultar a un psicoterapeuta puede ayudar a aliviar el estrés.
Haz ejercicio
El ejercicio casi garantiza que dormirás más y mejor, además de proporcionar energía a las células y mejorar la circulación del oxígeno. Además, la actividad física puede aumentar los niveles de dopamina en el cerebro, lo que ayuda a mejorar el estado de ánimo.
Evita fumar
Fumar quita energía porque provoca insomnio. Esto se debe a que la nicotina del tabaco es un estimulante que acelera el ritmo cardíaco, aumenta la presión arterial y estimula la actividad cerebral asociada con la vigilia, dificultando el sueño. Una vez dormido, el poder adictivo de la nicotina puede despertarte con antojos.
Restringe tu sueño
Si crees que tienes falta de sueño, intenta dormir menos. Este consejo puede parecer extraño, pero determinar cuánto sueño realmente necesitas puede reducir el tiempo que pasas en la cama sin dormir. Esto facilita conciliar el sueño y promueve un sueño más reparador a largo plazo.
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Come para obtener energía
Comer alimentos con un índice glucémico bajo (cuyos azúcares se absorben lentamente) puede ayudarte a evitar la caída de energía que ocurre después de consumir azúcares o almidones refinados que se absorben rápidamente. Entre ellos encontramos los cereales integrales, las verduras ricas en fibra, nueces y aceites saludables como el aceite de oliva. En general, los alimentos ricos en carbohidratos tienen los índices glucémicos más altos, mientras que las proteínas y las grasas tienen índices glucémicos cercanos a cero.
Utiliza la cafeína a tu favor
La cafeína ayuda a aumentar el estado de alerta, por lo que tomar una taza de café puede ayudar a agudizar la mente. En cambio, para obtener los efectos energizantes de la cafeína, hay que utilizarla con prudencia ya que puede provocar insomnio si se consume en grandes cantidades o después de las 14:00 horas.
Limita el alcohol
Una de las mejores defensas contra el cansancio de media tarde es evitar beber alcohol durante el almuerzo. El efecto sedante del alcohol es especialmente fuerte al mediodía. Si vas a beber, hazlo con moderación en un momento en el que no te importe perder energía.
Bebe agua
El agua es el único nutriente que se ha demostrado que mejora el rendimiento en todas las actividades de resistencia, por lo que si tu cuerpo tiene escasez de líquidos, uno de los primeros signos es una sensación de fatiga.