El chilindrón es una salsa muy típica en la gastronomía de la parte nororiental de la Península Ibérica, en especial en Aragón, el País Vasco, Navarra y La Rioja. Sin estar claro, el origen del chilindrón no puede ser muy antiguo, pues la tríada esencial que lo compone —cebolla, tomate y pimiento— cuenta con dos ingredientes llegados directamente desde las Américas en el siglo XV. Una vez llegados a España, estos productos se introdujeron poco a poco en las huertas aragonesas y navarras, aprovechándose para crear recetas en las que esta salsa acompaña a carnes de varios tipos.
Aunque compartan nombre y un ligero parecido en la elaboración, existen diferentes versiones de lo que conocemos como chilindrón. En la versión navarra o txilindrón, esta receta incluye ingredientes como el pimiento choricero seco y rehidratado, el cordero lechal (incluso el cabrito), ajo, aceite de oliva, perejil y limón. Mientras tanto, en la zona aragonesa se suele elaborar con una carne de ave, generalmente gallina o pollo de corral, pimiento, tomate y cebolla. Esta última es la versión más extendida en el resto de España, una delicia sencilla y saludable que ya ha entrado a formar parte del recetario más tradicional.
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Además de pimiento, cebolla y tomate, a esta receta tradicional se le añade jamón serrano, un ingrediente que le da un toque salado y profundo, complementando perfectamente la dulzura de los pimientos y la acidez de los tomates. Es un plato que se suele servir con una guarnición de arroz blanco o patatas, aunque también se puede disfrutar con una buena hogaza de pan para mojar en la deliciosa salsa.
Sota, caballo y rey
Además de un delicioso guiso español, el chilindrón es un antiguo juego de cartas, muy popular en Zaragoza y sus alrededores, que podría haber dado nombre a esta conocida receta. En las tascas de la zona, era común que los lugareños se reunieran para jugar a las cartas, mientras se discutían asuntos del día a día y se compartían cotilleos. El chilindrón era uno de los juegos más habituales, en el cual uno de los jugadores comenzaba tirando una carta, y los demás seguían el orden ascendente hasta llegar a la sota, el caballo y finalmente el rey. Esta trilogía se conocía como el chilindrón, y el perdedor de la partida invitaba al resto a una ronda o a la comida posterior.
Según algunas teorías, de ahí vendría la relación entre juego y receta: el pollo al chilindrón se elabora con la que se considera la trilogía perfecta en la cocina, la combinación perfecta de ingredientes: sota, caballo y rey equivalen a pimiento, tomate y cebolla.
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Receta de pollo al chilindrón
Tiempo de elaboración: 1 hora y 30 minutos
Raciones: 4 personas
Ingredientes:
- 1 pollo entero, cortado en trozos
- 2 pimientos rojos
- 2 pimientos verdes
- 4 tomates maduros
- 1 cebolla grande
- 3 dientes de ajo
- 150 gramos de jamón serrano
- 200 ml de vino blanco
- 1 hoja de laurel
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta al gusto
Elaboración:
- En una sartén grande, calienta un poco de aceite de oliva y dora los trozos de pollo por todos lados. Retira y reserva.
- En la misma sartén, añade más aceite si es necesario y sofríe la cebolla y el ajo picados hasta que estén dorados.
- Añade los pimientos cortados en tiras y cocina hasta que estén tiernos.
- Agrega los tomates pelados y picados, y cocina hasta que se deshagan y formen una salsa espesa.
- Incorpora el jamón serrano cortado en trocitos y mezcla bien.
- Vierte el vino blanco y deja que se evapore el alcohol, luego añade la hoja de laurel.
- Devuelve el pollo a la sartén, mezcla bien y ajusta la sal y la pimienta.
- Cocina a fuego lento durante unos 45-60 minutos, hasta que el pollo esté tierno y la salsa haya espesado.
- Sirve caliente, acompañado de arroz blanco, patatas o pan.