En un reciente estudio publicado por Unicef, se ha revelado que hasta 11 millones de niños y jóvenes en la Unión Europea (UE) están enfrentando problemas relacionados con la salud mental, una cifra que resalta la creciente preocupación sobre el bienestar psicológico en las sociedades más prosperas del mundo. Este informe, denominado Estado de la Infancia en la UE, pone de relieve el desafío significativo que representa la pobreza, la exclusión social y otros factores de riesgo para la población infantil en los 27 países miembros.
Según el documento, uno de cada cuatro menores en la UE, lo que se traduce en 20 millones de niños y niñas, se encuentra en riesgo de caer en la pobreza o la exclusión social, una situación que ha empeorado desde 2019 con un aumento de 1,6 millones de niños. España es el país con la tasa más alta de pobreza infantil dentro de la unión, donde más de 2 millones de menores viven en estas condiciones.
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El estudio señala que los adolescentes son particularmente vulnerables a sufrir trastornos graves como la ansiedad y la depresión, afectando a una quinta parte de los jóvenes entre 15 y 19 años. Adicionalmente, se observa una disminución en los niveles de satisfacción vital entre los jóvenes de 15 años, pasando del 74% en 2018 al 69% en 2022 en 22 países de la UE. A pesar de este panorama, España se posiciona como el noveno país con mayores índices de bienestar y satisfacción entre los jóvenes, con un 76% expresando satisfacción con su vida.
Contaminación y ciberacoso
Otro aspecto preocupante es la exposición de casi uno de cada 20 niños a altos niveles de contaminación por plaguicidas, una preocupación ambiental que tiene repercusiones directas en la salud y el desarrollo infantil. La contaminación atmosférica, por su parte, fue responsable de 472 muertes de niños y jóvenes en la UE en 2019, con España figurando como el séptimo país con niveles más bajos de contaminación del aire. Por otro lado, el avance de la tecnología digital, aunque brinda oportunidades, también expone a los menores a riesgos como el ciberacoso, la explotación sexual online y mensajes de odio, con uno de cada ocho niños de 12 años recibiendo solicitudes sexuales no deseadas a través de internet.
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Ante esta situación, Bertrand Bainvel, representante de Unicef en las instituciones europeas, declara: “La UE es una de las regiones más prósperas del mundo y, sin embargo, las altas tasas de pobreza y exclusión social, los problemas de salud mental, la exposición a la contaminación y los numerosos riesgos ‘online’ están privando a millones de niños de oportunidades y minando el potencial de la generación más joven de la UE”.
Posibles soluciones
Respecto a medidas específicas, en España, Unicef sugiere la implementación de una deducción fiscal reembolsable por hijo menor de 18 años de 120 euros mensuales, además de ampliar las medidas de conciliación y garantizar la dotación de especialistas en salud mental para niños y adolescentes. A nivel europeo, el informe insta a salvaguardar y acelerar el progreso en materia de derechos infantiles y a reforzar las políticas y legislación de la UE considerando sistemáticamente su impacto en los derechos de la infancia.
Como parte de sus recomendaciones, Unicef aboga por la implementación de una garantía infantil europea, el establecimiento de una estrategia global de salud mental con recursos suficientes, y una evaluación del impacto del nuevo pacto verde europeo en la salud y bienestar infantil, incorporando sus hallazgos en políticas medioambientales. Finalmente, subraya la importancia de actualizar y hacer cumplir la legislación para promover el uso seguro de las tecnologías digitales por parte de los menores, cerrar la brecha digital y fomentar las competencias digitales.