Spaghetti, rigatoni, caracolas, fusilli, macarrones… Existen más de 300 tipos de pasta diferentes, un producto italiano que ha traspasado fronteras para convertirse en el plato favorito de muchos alrededor de todo el mundo. Aunque siempre podamos disfrutar de un buen plato de pasta comprada en el supermercado, cocinando en casa una salsa casera como acompañamiento, no hay nada como la pasta fresca elaborada por chefs italianos. Ahora, en Madrid, los amantes de la pasta fresca casera tienen un nuevo templo.
En plena glorieta de Bilbao, el chef y empresario napolitano Ciro Cristiano, junto al equipo de Baldoria, ha abierto su segundo restaurante en Madrid. Se trata de Beata Pasta, un restaurante basado en la pasta fresca que trata de mostrar la esencia de la Italia actual a través de su producto más popular, protagonista absoluto de una experiencia de artesanía, pasión y absoluta devoción por la pasta.
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Este pasta bar viene dispuesto a democratizar y revolucionar el mundo de la pasta fresca en Madrid a través de una propuesta gastronómica, casera, de calidad y hecha al momento. Aunque su propuesta parte de una base de cocina tradicional, cada uno de sus platos cuenta con un toque fresco y actual.
Beata Pasta está dividida en cuatro espacios: el obrador, la zona de bistró italiano, la despensa y, al fondo, la cocina, donde ocurre la magia de la pasta fresca. Así, los clientes pueden ver todo el proceso de creación de la pasta, desde la harina y el huevo, hasta los ingredientes extras que se le añaden, pasando por la transformación en un plato ya en la cocina. Este colorido local, que llama la atención con sus colores amarillos y blancos, es también un lugar para aprender gracias a las masterclasses que acogerá cada semana.
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Pasta fresca y productos ‘madie in Italy’
Como no podía ser de otra manera, la pasta fresca es la estrella de la carta, que se puede solicitar sin gluten. Su materia prima, procedente en un 70 % del país transalpino, incluye productos como la burrata de los hermanos ‘Cammarota’ de Puglia o la harina de Amoruso, con ingredientes también de pequeños productores con los que mantienen una estrecha relación.
De su oferta de pastas frescas, los clientes pueden elegir propuestas como ‘Pistacho love’ (11,90 €), una oda a este fruto seco; ‘Ravioli alla Sorrentina’ (12,90 €), rellenos de queso ricotta al limón de Sorrento, salsa de tomate, scamorza y aceite de albahaca; ‘Call me mamma’ (14,50 €), papardella XXL, ragú tradicional napolitano de ternera y cebolla confitada durante ocho horas; o ‘Gran Torino’ (12,90 €), raviolis rellenos de tres carnes, salsa de carne y gremolada de cítricos.
Otras de sus opciones más llamativas son la ‘Tornnarello alla Nerona’ (14,50 €), la famosa pasta preparada en una rueda de queso acompañada con calabacín frito, pecorino, Parmigiano Reggiano y albahaca; o la ‘Por fin, carbonara’ (11,90 €), una receta de auténtica pasta a la carbonara con yema de huevo, pecorino Romano, pimienta y guanciale. Para hacer la experiencia más personalizada, Beata Pasta ofrece a los comensales la opción de customizar sus recetas, pero, eso sí, para mantener la autenticidad de las elaboraciones, el propio local sugiere los toppings a añadir.
Inspirada en recetas tradicionales del sur de Italia, la carta de Beata Pasta incluye, además de sus pastas, entrantes especialmente pensados para compartir y con precios entre 5,90 y 12 euros. De esta sección de entrantes; destacan la ‘Burrata Putanesca’, la croqueta de cacio & tartufo, la parmigiana classica napoletana, la ‘Pizzeta 50 top’ (un guiño a la laureada pizza de Baldoria) y la ‘Kale cesar salade’, una versión renovada de la clásica ensalada, con kale, lascas de parmiggiano, aguacate y soja crujiente.
Entre los postres, no falta uno de los grandes hits italianos, el tiramisú, que se suma a la tarta de queso, con crema de gianduja y avellanas caramelizadas, y a otras opciones como el ‘Cannoli Siciliano’, con ricota de oveja y pistacho de Bronte, o el ‘Latte Imperiale’, un flan suave y cremoso acompañado de caramelo dorado.
La carta también incluye una propuesta de tres cócteles frescos y genuinos: spritz clásico, beata sangría y limonada casera. Siete referencias de vinos italianos, cada uno de ellos elegido por el sumiller del grupo y acorde a la propuesta de pasta, conforman la bodega de Beata Pasta; el comensal puede elegir entre blancos, tintos, espumosos y rosados, que se ofrecen por copas y por botellas.