Receta de crema de puerro: una cena ligera y caliente para disfrutar en las noches de invierno

Para una cena ligera y deliciosa en los meses más fríos del año, las cremas y purés de verdura se convierten en buenísimos aliados. Las opciones son casi infinitas, pues prácticamente cualquier hortaliza puede incluirse a la olla y aportar su granito de arena a una crema deliciosa y nutritiva. Calabacín, calabaza, zanahoria, champiñones, brocoli... O todos a la vez.

Una de las opciones más ricas y sencillas es una crema de puerros, una versión caliente de la impronunciable pero archiconocida vichyssoise. Esta receta francesa admite algunas variaciones, que incluyen decisiones como si añadir nata o leche, qué caldo añadir para la cocción o si realmente nos apetece incluir cebolla, por ejemplo. En este caso, haremos una crema de puerros con cebolla, patata y caldo de verdura a la que, además, añadiremos un poco de leche buscando esa cremosidad que tanto caracteriza a este tipo de recetas de cuchara.

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El verdadero origen del puerro no se conoce con certeza, ya que nunca se ha encontrado una variedad silvestre de esta hortaliza. No obstante, se cree que puede proceder de Mesopotamia, Egipto, Turquía o Israel, lugares donde el puerro ya se consumía hacia el año 3000 o 4000 a.C. Más adelante, esta verdura fue cultivada por los romanos, quienes, además de ser grandes consumidores de esta hortaliza, la distribuyeron por el continente europeo. La temporada del puerro comienza a principios de otoño y finaliza en primavera, por lo que esta fecha es ideal para su consumo. Sin embargo, durante los meses estivales también se puede disfrutar de los puerros de verano, aunque serán de un tamaño menor, más tiernos y de un sabor más suave.

Como explica la Fundación Española de Nutrición (FEN), “el agua es el componente mayoritario del puerro” lo que, unido a su bajo contenido en hidratos de carbono, lo convierte en un alimento de escaso aporte calórico adecuado para personas que siguen una dieta de adelgazamiento. Además, es fuente de fibra, lo que le confiere un gran efecto saciante. El puerro también aporta algunas vitaminas como la C, A y B6, así como folatos contribuyen a la formación normal de células sanguíneas.

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Tiempo de elaboración: 30 minutos

Raciones: 4 personas

Ingredientes:

• 3 puerros (unos 400 gramos)
• 1 patata
• 1 cebolla
• 400 ml de caldo de verduras
• 100 ml de leche
• Sal
• Pimienta negra

Elaboración:

1. Limpiamos y picamos los puerros, utilizando solo la parte blanca.
2. En una cacerola con aceite a fuego medio, añadimos los puerros para que comiencen a rehogarse.
3. Pelamos y picamos la cebolla y la patata. Añadimos ambas a la cazuela para que se rehogue junto a los puerros. Salpimentamos.
4. Cuando las verduras empiecen a dorarse, agregamos el caldo de verduras y llevamos a ebullición. Dejamos cocer durante 20 minutos hasta que toda la verdura esté tierna.
5. Una vez la verdura esté blanda, batimos cuidadosamente para que nos quede una crema muy fina. A continuación, añadimos poco a poco la leche sin dejar de remover hasta que consigamos la textura y color deseados. Servimos la crema en cuencos individuales.