Ha tardado algo más de lo habitual en llegar. Pero el otoño ya está aquí. Las temperaturas han bajado, las lluvias se están asentando en las predicciones meteorológicas y las hojas de los árboles ya están prácticamente caídas. En este contexto, la alimentación y los planes se alinean con el tiempo. Todo es distinto con respecto a hace 3 meses.
Las cremas y las sopas se convierten en los aliados perfectos para combatir las gélidas temperaturas. Del mismo modo, las castañas son uno de los alimentos de moda de esta temporada, además, también es uno de los frutos secos más ricos y sanos que existen. Por ello, la crema de castañas se presenta como la receta perfecta para un plato de cuchar de domingo. Aunque también está la opción de hacerla muy espesa y así disfrutar de unas contundentes tostadas. A continuación se expondrán los ingredientes necesarios para este plato, así como una guía para su preparación.
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Cómo hacer crema de castañas
La elaboración de esta receta es algo muy sencillo. La mayoría de los productos necesarios para su elaboración están habitualmente en las despensas de los hogares.
INGREDIENTES
- Una cebolla.
- 250 gramos de castañas cocidas.
- Dos puerros.
- Sal.
- Pimienta.
- Caldo. Puede ser de pollo o de verduras.
- Nata líquida o leche evaporada.
- Aceite de Oliva
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PROCEDIMIENTO
- El primer paso es cocer las castañas en una cacerola durante un tiempo aproximado de 5 minutos. El agua tiene que estar hirviendo. Para cuando llegue el momento se recomienda hacer un corte en cruz, así será más fácil pelarlas después.
- En otra cacerola se vierte dos cucharadas de aceite de oliva. Allí se pocharán la cebolla y el puerro a fuego lento, ambos habrán sido cortados previamente. Las piezas tienen que quedar muy blandas.
- Cuando la cebolla y el puerro estén lo suficientemente blandas, hay que incorporar las castañas cocidas a esa olla. Seguidamente, se cubre el contenido con el caldo y se deja cocer durante un tiempo aproximado de 30-40 minutos. Las castañas tienen que quedar muy blandas para que triturarlas sea lo más fácil posible.
- Para comprobar que las castañas están correctamente hechas se recomienda pincharlas previamente con un tenedor. Así, cuando se haya alcanzado el grado de cocción deseado, será necesario triturar el contenido de la olla. Para ello, se utilizará la leche evaporada o la nata líquida. El tiempo en el vaso de la batidora dependerá del grado de espesor que se quiera obtener.
El último paso es servir la crema en un plato. Después sólo queda disfrutarla. Se recomienda tomarla muy caliente y acompañarla con una guarnición otoñal como unas láminas de champiñón crudo, unas avellanas o unos piñones tostados. También está la opción de experimentar con las especias. Por ejemplo, el jengibre seco aportará fresco y un ligero toque picante.