La menopausia precoz afecta a 1 de cada 100 mujeres menores de 40 años: “Sigue siendo un tema tabú”

Esta etapa de la vida suele producirse en torno a los 45-55 años en España, pero algunas mujeres la sufren de manera precoz y, en estos casos, es clave iniciar un tratamiento de los síntomas cuanto antes para mejorar su calidad de vida

Guardar
Una mujer con síntomas de menopausia (Getty Images)
Una mujer con síntomas de menopausia (Getty Images)

Muchas mujeres reconocerán los síntomas: sudores nocturnos, irregularidades en el ciclo menstrual o cambios en el estado de ánimo. Son apenas algunas de las señales de la menopausia que casi todas las mujeres sufren o sufrirán a lo largo de su vida. Sin embargo, la menopausia, y el tratamiento de los síntomas que provoca, siguen siendo un tema tabú en la sociedad, especialmente para aquellas mujeres que la sufren de forma prematura, o lo que se conoce como el fallo ovárico precoz.

“Las mujeres a día de hoy pasan más de la mitad de su vida en menopausia”, ha comentado a Infobae España la ginecóloga Natalia Camaño González. “Esta etapa representa la transición entre el período fértil y la vejez. A pesar de no ser una enfermedad, provoca, en la mayoría de las mujeres, síntomas molestos que alteran la dinámica social y laboral”, ha asegurado.

Te puede interesar: ¿Tengo covid o gripe? Estas son las claves para diferenciar sus síntomas

Hasta una de cada 100 mujeres de menos de 40 años sufren la menopausia precoz, que se manifiesta cuando los ovarios ya no liberan óvulos de forma regular y dejan de producir las concentraciones premenopáusicas habituales de hormonas reproductivas. La condición se puede tratar mediante el uso de terapia hormonal que, además, puede contribuir a la prevención de enfermedades cardiovasculares y la osteoporosis, entre otros.

Cuáles son los síntomas de la premenopausia

Las primeras señales de la menopausia pueden empezar a mostrarse años antes de que realmente se produzca este cambio, que suele producirse entre los 45 y 55 años para la mayoría. “Es característico que el primer síntoma en la mujer durante la premenopausia suelen ser las irregularidades en el ciclo menstrual como los ciclos más cortos, baches amenorreicos o aumento de duración de su menstruación o reglas de mayor cuantía”, ha apuntado Camaño.

Te puede interesar: Los efectos secundarios de la Lasea, el medicamento utilizado para tratar síntomas transitorios de la ansiedad

“Debemos diferenciar el concepto de menopausia y el síndrome climatérico”, ha reiterado la ginecóloga. “Los signos y síntomas que se le atribuyen a los cambios hormonales que suceden durante esta época ya pueden aparecer 4-6 años antes durante la perimenopausia o en la transición a la menopausia”, ha asegurado. Los síntomas más frecuentes son los sofocos y las sudoraciones nocturnas que suelen ocurrir en hasta el 80% de las mujeres. Aproximadamente un 20% de las mujeres experimentan este tipo de síntomas durante más de cinco años, pero son “fácilmente tratables”, ha afirmado Camaño.

Otras señales de la menopausia incluyen las alteraciones del ánimo, los problemas con el ciclo sueño-vigilia y la disminución de la libido. Además, puede producirse un incremento de la grasa corporal y las mujeres menopáusicas presentan mayor susceptibilidad de padecer osteoporosis. Por último, también pueden manifestarse los síntomas como la atrofia, sequedad vulvovaginal, dispareunia, frecuencia urinaria, urgencia, nicturia y el aumento de las infecciones urinarias.

Cómo prepararse para la menopausia, un tema que todavía es tabú

Una de las preguntas más frecuentes en sus consultas de ginecología es cómo prepararse para la menopausia, según la doctora Camaño, que asegura que la preguntan porque “temen a todos los síntomas que pueden aparecer y que pueden disminuir su calidad de vida” y que “les da miedo comentarlo con la gente de su alrededor”.

“Las mujeres menopáusicas y postmenopáusicas tienen miedo a comentar que tienen sintomatología y ya no solo por sofocos, sino por la sequedad vaginal y el dolor con las relaciones, lo cual empeora sus relaciones sexuales y por tanto lo consideran como un tema tabú y que no consultan por ello”, ha asegurado.

La ginecóloga Natalia Camaño González
La ginecóloga Natalia Camaño González

Según Camaño, la mejor manera de afrontar esta etapa de la vida es “presentar unos buenos hábitos de ejercicio, alimentación y salud previo a la menopausia”, incluyendo el ejercicio de fuerza para mantener los músculos fuertes y prevenir la osteoporosis. “El ejercicio físico también va a aumentar los niveles de serotonina, dopamina y endorfinas y va a producir una mejoría de las alteraciones del ánimo produciendo felicidad y disminuyendo dolores”, ha apuntado.

Seguir una alimentación cardiosaludable rica en calcio con lácteos, legumbres, vegetales, pescados y frutos secos, así como la ingesta de fuentes de omega 3 como el pescado azul, nueces, semillas de lino o chía, contribuye también a prevenir enfermedades cardiovasculares y la osteoporosis.

Más sol y menos estrés

Mujer hace yoga al aire libre (Shutterstock)
Mujer hace yoga al aire libre (Shutterstock)

La exposición solar controlada para mantener unos niveles de vitamina D óptimos es clave para la prevención de la osteoporosis. La ginecóloga recomienda tomar cada día el sol entre 10 y 15 minutos sin protección solar, dejando al descubierto cara, cuello, escote, antebrazos y piernas y evitando las horas con mayor radiación solar de 12h a 16h. Asimismo, la doctora resalta la importancia de abandonar el hábito de fumar tabaco y disminuir lo máximo posible el estrés, ya que van a adelantar la menopausia y favorecer la osteoporosis.

Mediante un tratamiento adecuado, Camaño asegura que es posible mejorar notablemente la calidad de vida de las mujeres menopáusicas y estima que una de cada cuatro mujeres necesitarán tratamiento médico para los sofocos como, por ejemplo, la terapia hormonal. “La terapia hormonal va a mejorar muchos de los síntomas: sofocos, sequedad vaginal, alteraciones del sueño y del ánimo, así como el tratamiento de la osteoporosis, a pesar de que (esta terapia) sigue siendo un tema tabú en la sociedad”, ha indicado.

“Es importante que comenten sus síntomas con su ginecólogo o profesional de la salud para que pueda ser ayudada y tratar si es preciso para mejorar su calidad de vida”, ha concluido.

Guardar