Los 12 restaurantes más antiguos de Madrid: vinos, tapas y cocido en tabernas con más de 100 años de historia

Estos son los locales centenarios que debes visitar si quieres conocer la gastronomía más castiza de la capital

Guardar
Restaurantes centenarios en Madrid (Getty Images)
Restaurantes centenarios en Madrid (Getty Images)

El panorama gastronómico madrileño es amplio y muy variado. Cada día nacen nuevos negocios, bares restaurantes o tiendas de alimentación especiales, curiosas y llenas de propuestas innovadoras. Pero Madrid y su cultura tienen detrás un largo recorrido, que se puede observar a través de sus platos más castizos y sus tabernas más tradicionales.

La Asociación de Restaurantes y Tabernas Centenarios de Madrid ha reconocido a doce establecimientos de restauración con más de 100 años de trayectoria, locales en cuyas paredes se ha escrito la historia de la Villa de Madrid. Cada uno de estos restaurantes cuenta con una historia de más de un siglo, años en los que han recibido a artistas, políticos y otras figuras, además de haber sido testigos de hechos históricos como la Guerra Civil o la transición democrática.

Te puede interesar: El primer buffet libre de hamburguesas en Madrid: producción casera y ternera gallega ilimitada por 22 euros

Gracias a la singularidad de su decoración y a la antigüedad de sus recetas, estos 12 restaurantes crean un núcleo de atención turística en sí mismo, reconocido incluso por el Ayuntamiento de Madrid, que los declaró espacios culturales y turísticos de especial significación ciudadana e interés general para la ciudad. Estos son los doce restaurantes y tabernas centenarias para conocer la gastronomía más castiza de la capital.

Posada de la Villa (1642)

Posada de la Villa (Web del restaurante)
Posada de la Villa (Web del restaurante)

En el siglo XVII, en la Cava Baja, se encontraba el único molino de harina de Madrid, que pasó a convertirse en 1642 en la primera Posada de la Corte, al amparo de las murallas árabes, donde se daba comida y aposento a todos los viajeros que llegaban a Madrid. En 1980 fue cuando, vencida por el paso del tiempo, esta posada fue rescatada por un enamorado de Madrid y del oficio hostelero, D. Félix Colomo para que continuara en pie y se convirtiera en Horno de Asar. Gracias a su larga trayectoria, esta posada centenaria ha recibido reconocimiento de la Guía Michelín, el Gran Collar Gastronómico Internacional, el Premio Nacional de Gastronomía Internacional, el Chaine des Rotisseurs...

Restaurante Botín (1725)

Comedor del restaurante Casa Botín (Casa Botín)
Comedor del restaurante Casa Botín (Casa Botín)

Casa Botín, es considerado por el Libro Guinness de los Récords como el restaurante en activo más antiguo del mundo. Lleva funcionando ininterrumpidamente desde su inauguración en 1725 y, a día de hoy, sigue siendo un icono gastronómico en la capital. Ubicado en la calle Cuchilleros 17, a solo unos minutos de la concurrida Plaza Mayor, sus asados son su marca de identidad. Si por algo destaca la cocina de Casa Botín es por sus platos tradicionales, recetas clásicas que, gracias a un buen producto y a la experiencia de los años, se convierten en verdaderas delicatessen. Destacan sus dos especialidades, ambos platos asados al horno de leña: los deliciosos cochinillos y corderos asados al estilo castellano.

Taberna Antonio Sánchez (1787)

Taberna de Antonio Sánchez (Wikimedia Commons)
Taberna de Antonio Sánchez (Wikimedia Commons)

La Taberna Antonio Sánchez fue fundada en 1787 y desde entonces ha estado ininterrumpidamente abierta y regida por personas ligadas al mundo taurino. Este castizo establecimiento de la calle del Mesón de Paredes n.º 13, en el Lavapiés madrileño, mantiene la estética intacta desde su origen, pues conserva la azulejería original y su típica decoración de cabezas disecadas de toros estoqueados en 1902, entre otros variados motivos y cuadros con escenas taurinas. De su carta destacan especialidades como la olla gitana, el cocido madrileño o el rabo de toro.

Casa Pedro (1825)

Interior del restaurante Casa Pedro (Casa Pedro)
Interior del restaurante Casa Pedro (Casa Pedro)

En 1702, Pedro Guiñales funda esta casa con el nombre de su mujer ‘Casa de la Pascuala’. El establecimiento era entonces una fonda y casa para arrieros, ganaderos y todos aquellos que entraban o salían de Madrid por el camino de Francia. El restaurante fue ganando fama con la venta de vinos garnacha y moscatel y con sus platos más castizos, como los asados de cordero o el cochinillo. La pasión de la familia Guiñales por los vinos les ha llevado a restaurar la antigua bodega que poseía el restaurante, que ahora se caracteriza por ser un bello edificio de arquitectura rústica y singular ubicado en la calle de Ntra. Sra. de Valverde.

Te puede interesar: 8 pueblos de España con restaurantes que tienen dos estrellas Michelin

Casa Alberto (1827)

Restaurante Casa Alberto (Web del restaurante)
Restaurante Casa Alberto (Web del restaurante)

Ubicado en el Barrio de las Letras, Casa Alberto es otro de los más antiguos templos de la gastronomía madrileña. Se fundó en el año 1827, según se puede leer en la placa colocada por el Ayuntamiento de Madrid en el suelo de la entrada al local. De aquellos tiempos es el edificio actual, construido sobre otro anterior, de mediados del siglo XVI, donde se dice que vivió Miguel de Cervantes. Entre sus recetas más castizas se encuentran el rabo de toro, bacalao a la madrileña, callos, albóndigas de ternera, manitas de cordero, croquetas de jamón y los clásicos platos de cuchara que siempre están presentes en su carta, así como postres caseros.

Lhardy (1839)

Interior del restaurante Lhardy
Interior del restaurante Lhardy

El famoso restaurante Lhardy lleva casi dos siglos en la misma casa de la Carrera de San Jerónimo, donde abriera sus puertas en 1839. “No se puede concebir Madrid sin Lhardy”, decía Azorín, cliente habitual de uno de los restaurantes más antiguos de la capital. Esta lujosa casa de comidas sigue sirviendo sus platos de cocina castiza en un ambiente cortesano y aristocrático que nos traslada directamente a las tertulias y reuniones más elegantes del siglo XIX. Su especialidad es el cocido madrileño, que se sigue sirviendo a día de hoy en sus clásicos dos vuelcos, siguiendo aún la receta tradicional de casi dos siglos de antigüedad.

Casa Labra (1860)

Restaurante Casa Labra (Web del restaurante)
Restaurante Casa Labra (Web del restaurante)

Situada en la calle de Tetuán, a pocos metros de la Puerta del Sol, este restaurante permanece inalterable desde su fundación en 1860. Famoso por sus frituras y croquetas de bacalao, cuenta también con una amplia carta de pescados y carnes, así como una cuidada selección de vinos. En esta Taberna madrileña fue fundado en 1879 el actual Partido Socialista Obrero Español de manera clandestina, un evento rememorado por una placa de bronce en la fachada del local.

Te puede interesar: Así se hacen las croquetas de jamón de Nacho Manzano, el chef de Casa Marcial: suaves y deliciosas

Casa Ciriaco (1887)

Casa Ciriaco fue fundado en el año 1887, en el número 84 de la calle Mayor, en el mismo edificio donde el famoso anarquista Mateo Morral lanzó una bomba escondida en un ramo de flores al paso del cortejo nupcial de Alfonso XIII el día 31 de mayo de 1906. En este legendario restaurante madrileño de cocina tradicional y casera, se puede comer el cocido madrileño y otros platos de cocina tradicional como la pepitoria de gallina, ambas recetas con más de 100 años de antigüedad.

Café Gijón (1888)

Café Gijón (Instagram / @cafe_gijon)
Café Gijón (Instagram / @cafe_gijon)

El Café Gijón fue un local de reunión de grandes literatos, pintores, escultores, periodistas, actores… lugar de encendidas tertulias que fue fundado en la primavera de 1888 por Gumersindo García, un asturiano afincado en la capital de España que llamó al Café con el nombre de la ciudad que le vio nacer. En su sala han sentado personajes de la talla de Canalejas, Ramón y Cajal, Pérez Galdós, Romero de Torres, Ramón María del Valle-Inclán, Gerardo Diego, Torrente Ballester, Sastre, Cela y un largo etcétera que incluye a las mentes más avanzadas de la cultura madrileña.

Bodega de la Ardosa (1892)

Bodega Ardosa (Web de la taberna)
Bodega Ardosa (Web de la taberna)

A finales del siglo XIX, Rafael Fernández decidió abrir esta cadena de bodegas para comercializar el vino que producían sus viñedos, de ahí que su nombre haga referencia a la comarca vinícola de Toledo. En la actualidad subsisten apenas cuatro de ellas, pero en aquellos tiempos llegaron a pasar la treintena. A partir de 1979, su sucesor Gregorio Monje enfocó el negocio más como cervecería que como bodega, debido mayormente a las modernas normativas que prohibieron la venta de graneles. En la actualidad, en estas bodegas se puede disfrutar de tapas variadas y una exquisita cerveza checa reconocida mundialmente.

Malacatín (1895)

Restaurante Malacatín
Restaurante Malacatín

En el corazón del barrio de La Latina, entre la Plaza de la Cebada y el Rastro, se encuentra el restaurante Malacatín, otro de los locales centenarios que han marcado la historia de la capital. Comenzó sirviendo, en 1895, vinos y aguardientes, para más tarde servir friaduría y otras tapas y su famoso cocido madrileño, que hoy le da su fama. Su decoración se mantiene intacta desde hace décadas, permitiéndonos así hacer todo un viaje al pasado.

La Casa del Abuelo (1906)

Restaurante Casa del Abuelo (Web del restaurante)
Restaurante Casa del Abuelo (Web del restaurante)

Cierra la lista La Casa del Abuelo, un restaurante ubicado en la calle Victoria 12, en pleno centro de Madrid, y que ofrece sus tapas desde 1906. En sus primeros años, La Casa del Abuelo empezó a ser famosa por sus rosquillas y su vino dulce, una oferta a la que más tarde se unieron los bocadillos y, tras la escasez de pan de la Guerra Civil, las gambas. Estas son su especialidad, preparadas entonces a la plancha acompañadas de un vaso de vino y, más adelante, al ajillo.

Seguir leyendo:

Guardar