Cuando se piensa en los récords mundiales de Guinness, es probable que imaginen a atletas de élite o jóvenes entrenados físicamente. Sin embargo, la historia de DonnaJean Wilde, una abuela canadiense de 59 años, desafía todas esas expectativas. En un periodo de pocos meses, esta mujer rompió dos récords mundiales: uno por el mayor tiempo en posición de abdominales (plancha) y otro por realizar más de 1.500 flexiones en una hora. Su historia es una lección de resistencia física, determinación, familia y el poder de seguir activos independientemente de la edad.
Un récord de flexiones que desafía los límites
En mayo de 2024, DonnaJean Wilde rompió el récord mundial de flexiones para mujeres al completar 1.575 push-ups en 60 minutos y ahora recibió la certificación. Este logro superó el récord anterior de 1.207 flexiones, y se considera un hito impresionante en su categoría. Lo más destacable de este intento no fue el número de flexiones realizadas, sino la calidad técnica que se requería para que el récord fuera válido: las flexiones debían cumplir con un ángulo de 90 grados en los codos al llegar al suelo, y los brazos debían extenderse completamente al subir.
Lo sorprendente fue que Wilde alcanzó el récord superándolo con 17 minutos de sobra, completando aproximadamente 10 flexiones por minuto durante ese tiempo. Durante el transcurso de su intento, también tuvo que lidiar con dificultades físicas, como la dislocación de su hombro, pero esto no la detuvo. Este tipo de resistencia física y mental demuestra que, incluso a una edad avanzada, se puede alcanzar un nivel de rendimiento físico impresionante.
Entrenamiento para el récord: de las abdominales a las flexiones
El éxito de DonnaJean no fue fruto de la casualidad. Para prepararse para su primer récord de abdominales (plancha), que batió en marzo de 2024, ella comenzó a realizar flexiones a diario, llegando a completar hasta 500 al día. Esta preparación fue crucial para su éxito en el intento de romper el récord de flexiones. La abuela, una atleta de toda la vida, entrenaba con disciplina en la quietud de su hogar, ubicado en las montañas Rocosas de Alberta, donde el entorno natural la inspiraba a seguir adelante.
Su régimen de entrenamiento fue progresivo y bien planificado, asegurando que sus músculos estuvieran listos para soportar la exigencia física de realizar flexiones de alta intensidad durante una hora. La combinación de su experiencia como deportista y su dedicación al ejercicio fue esencial para llevar a cabo su logro.
El apoyo familiar: un momento emotivo y lleno de energía
Uno de los aspectos más conmovedores de esta historia fue el apoyo de su familia, especialmente el de sus 11 de sus 12 nietos, quienes estuvieron presentes durante su intento. Un momento de gran ternura se vivió cuando el cartel hecho a mano por los menores decía: “¡Mi abuela es oficialmente increíble!”. Mientras ella realizaba las flexiones, los pequeños la animaban con sus gritos de aliento, haciendo más llevadera la prueba. La energía positiva que le transmitieron fue vital para mantener su motivación durante los momentos más difíciles del desafío.
DonnaJean mencionó que, a pesar de la emoción que sentía y el cansancio, luchó contra las lágrimas y se concentró en seguir adelante. Esta atmósfera de amor familiar y apoyo incondicional le dio la fuerza para superar los límites físicos de su cuerpo y alcanzar un récord que, a muchos, les parecería imposible.
Requisitos técnicos y reglas del récord
El intento de DonnaJean Wilde fue un logro físico, sino también técnico. Para que el récord fuera válido según las reglas de Guinness World Records, debió cumplir con estrictos estándares técnicos: las flexiones debían ser completas, con un ángulo de 90 grados en los codos en la bajada y el brazo totalmente extendido al subir. Además, estaba permitido tomar descansos, pero la cantidad de repeticiones debía ser monitoreada de cerca por testigos independientes.
A lo largo de los 60 minutos, DonnaJean alternaba entre series de 20 y 5 flexiones, lo que le permitió mantener un ritmo constante sin llegar a agotarse por completo. Incluso cuando el dolor físico comenzó a intensificarse, como en el caso de la dislocación temporal de su hombro, su determinación le permitió continuar hasta el final del desafío.
Para ella, sus logros no solo se refieren a los récords. Más allá de la fama que conlleva haber batido dos récords mundiales, ella considera que lo más importante es promover una vida activa y saludable a cualquier edad. Según afirmó a Guinness World Records, mantenerse físicamente activo y tener metas de bienestar son fundamentales para envejecer con gracia y fuerza.
Beneficios de las flexiones: un ejercicio para todos
Las flexiones son uno de los ejercicios de resistencia más efectivos para trabajar los principales grupos musculares del cuerpo, incluyendo el pecho, hombros, tríceps, abdomen y espalda. Además, al ser un ejercicio de peso corporal, no requiere de equipos costosos y puede realizarse en cualquier lugar.
Según la Academia Nacional de Medicina Deportiva (NASM), una correcta alineación corporal es fundamental para evitar lesiones: las manos deben estar alineadas con el pecho, los pies a la altura de las caderas y la espalda en posición neutral. Los beneficios van más allá de la fuerza muscular; las flexiones también mejoran la resistencia cardiovascular y la estabilidad del core. Además, este ejercicio contribuye a la tonificación general del cuerpo y es accesible tanto para principiantes como para avanzados.
Sin embargo, las flexiones no son adecuadas para todos. Las personas con limitaciones de movilidad pueden optar por versiones modificadas, como flexiones de rodillas o flexiones de pared, en las cuales se ajusta la postura para hacer el ejercicio más accesible. La clave es adaptar el ejercicio a las necesidades y capacidades de cada individuo.