El nombre científico de esta fruta es Persea Americana, fue cultivado desde épocas precolombinas en México y América Central, donde se le nombró ahuacatl, que significa “testículo de árbol” en náhuatl, este es un término que fue luego transformado en aguacate por los españoles. En algunos países de América Latina también es conocido como palta.
Esta fruta de origen mexicano crece en árboles que pueden medir hasta 20 metros de altura, tiene propiedades benéficas tanto para la salud como para la belleza, ya que la composición de su aceite tiene vitaminas A, C, E, B1 así como calcio, magnesio y otros minerales.
De acuerdo con Ma. Elena Jiménez, investigadora del Instituto Politécnico Nacional, la composición química del puré de aguacate es principalmente de humedad, de proteínas tiene menos del 2%; las grasas, la ceniza y la fibra conforman otro 20% y de carbohidratos tiene apenas el 4.32%, lo que vuelve a este fruto un alimento con múltiples bondades alimentarias.
De acuerdo con la investigación del ingeniero agrónomo Rodolfo Pérez Rosales, la composición de ácidos grasos del aguacate tiene características nutricionales que se pueden enfocar en reducir la cantidad de grasa saturada en la dieta de las personas.
Esto quiere decir que podría contribuir a evitar el desarrollo de enfermedades cardiovasculares, el cáncer, la hipertensión arterial, la diabetes o la obesidad.
Los estudios de Alvizouri-Muñoz demostraron que el aguacate ayuda a evitar el exceso de lípidos en el cuerpo sin los efectos que provocan las dietas bajas en grasa saturada sobre las concentraciones de colesterol.
También concluyeron que una dieta enriquecida con aguacate es más efectiva que una dieta alta en carbohidratos complejos para disminuir el colesterol total.
La adición del aguacate en la dieta cotidiana diaria también puede reducir marcadamente la necesidad de usar medicamentos que eviten la hipertensión.
Una investigación realizada por el profesor Joan Sabaté, director del departamento de Nutrición de la Universidad de Loma Linda (California, Estados Unidos), afirma que consumir medio aguacate al día ayuda a comer menos. Lo que han comprobado es que el efecto que produce esta fruta sobre el organismo, reduce en un 40% el deseo de picar algo durante las tres horas siguientes.
Este fruto ha sido estudiado a nivel internacional, en la investigación Propiedades físicas y químicas del aceite de aguacate obtenido de puré deshidratado por microondas, tres investigadoras del Instituto Politécnico Nacional (IPN) reportaron su experimentación para deshidratar el aguacate y extraer el aceite con el objetivo de averiguar si sus propiedades podrían perderse, obtuvieron que no había cambios significativos en su extracción.
Algunas de sus variedades más comunes son: Hass, la más consumida a nivel mundial, su color es verde oscuro; Lamb Hass, es de la misma familia que la primera, su parte superior es más robusta, también tiene mayor resistencia al viento y Zutano, de color verde claro, su corteza es lisa.
De acuerdo con El Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera, el aguacate Hass (el fruto de mayor preferencia en el mundo) es el resultado de un híbrido obtenido de una variedad mexicana y guatemalteca.
El aguacate también es rico en luteína, pigmento que protege la vista y reduce la posibilidad de desarrollar cataratas. Debido a la humedad y diversas vitaminas que contiene, la pulpa molida de esta fruta suele usarse como mascarilla para humectar la piel.
En 2017 Pamela Alexandra Márquez, una estudiante de la Facultad de Química de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) desarrolló un bioplástico con extracto de la cáscara de aguacate, como alternativa del uso de plástico en la conservación de fresa.
Este producto está hecho a base de un compuesto orgánico derivado de la celulosa, gelatina tipo B y glicerol, a la cual adicionó compuestos de cáscara de aguacate.
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