Vacaciones no siempre es sinónimo de descanso y relax para muchas personas. Son tantos los temores y la ansiedad que les genera alejarse de su hogar, viajar, compartir espacios con mucha gente, que muchos prefieren evitarse el "disgusto".
El motivo principal en estos casos es el temor a alejarse de su casa y lo que produce ansiedad es la perspectiva de ir hacia un espacio desconocido. "Cuando a la crisis de ansiedad se le suma el miedo a encontrarse en lugares o situaciones donde la fuga resultaría ser difícil o no se podría contar con ayuda en el caso de sufrir un ataque de pánico, estamos en presencia de lo que se denomina agorafobia desde una perspectiva psicológica", analizó la licenciada en Psicología Marina Rovner, especialista en trastorno de pánico y crisis de ansiedad.
La mayor parte de la población con trastorno de pánico muestra signos de agorafobia y ansiedad antes de desarrollarlo; es lo que se conoce como el miedo al miedo
Según especificó la especialista, las personas con agorafobia evitan realizar viajes por miedo y ansiedad a:
– Salir solo de la casa
– Viajar en transporte público
– Estar en lugares donde no se identifiquen los baños ni salidas de emergencia
– Estar en lugares muy abiertos (parques, plazas)
– Estar en eventos con mucha gente y ruido
– Estar en lugares cerrados (cines, teatros)
"La ansiedad en sí no es mala, muchas veces nos sirve para prepararnos ante situaciones nuevas como, por ejemplo, averiguar datos sobre un nuevo empleo o informarnos antes de conocer a una persona -explicó-. Es importante diferenciarla de la agorafobia, ya que esta puede dificultar la realización o el disfrute del viaje al instalarse involuntariamente algunos pensamientos catastróficos".
Y tras destacar que "hay que estar atento a los primeros síntomas y contactarse con un profesional especializado para asegurarse no tener una crisis antes de viajar", Rovner aseguró: "La mayor parte de la población con trastorno de pánico muestra signos de agorafobia y ansiedad antes de desarrollarlo; es lo que se conoce como el miedo al miedo".
Las estadísticas indican que la posibilidad de padecer agorafobia con o sin historia de trastorno de pánico en algún momento de la vida es del 3,5%, según datos de la USA National Comorbility Replication.
Es importante diferenciar la ansiedad de la agorafobia, ya que esta puede dificultar la realización o el disfrute del viaje
"La persona sabe que su miedo es irracional, pero no termina de creer que estará seguro fuera de su lugar conocido o 'zona de confort' por mucho que intenten repetírselo -ahondó la especialista-. La agorafobia tiene un costo social elevado porque quienes lo sufren suelen alejarse de amistades y reducir actividades sociales, autoexcluyéndose de grupos de participación".
En caso de padecer este tipo de fobia es muy importante no automedicarse y sí recurrir a un profesional con experiencia en el tema.
Diez consejos para disfrutar salir de vacaciones
-Elegir en qué medio de transporte viajar (auto, micro, avión, barco)
-Llevar elementos para distraerse durante el trayecto (tablet, libro, música)
-Conocer con anticipación la cantidad de paradas y dónde se realizarán, ya sea en transporte público o privado
-Intentar viajar acompañado
-Si es familia: pautar de antemano permisos y límites esperables
-Si son amigos: elegir a personas de confianza que posibiliten la expresión de los miedos
-Elegir en qué tipo de lugar se van a alojar teniendo en cuenta el piso, número de camas, ventanas, baños
– Prever el emplazamiento del alojamiento teniendo en cuenta la distancia a lugares de esparcimiento público (cafés, cines, balnearios, centros comerciales)
-Participar activamente en la elección de actividades durante el tiempo que dure el viaje
-Viajar con ropa cómoda y llevar en el bolso de mano alguna muda de ropa extra por si es necesario cambiarse
LEA MÁS:
Los límites no se toman vacaciones: cómo lidiar con los adolescentes durante el receso de verano