Desde hoy y hasta el domingo 17 se lleva a cabo la edición 2024 de la Semana Internacional del Cerebro, con el fin de dar a conocer los avances que se realizan en la investigación del cerebro, así como en el diagnóstico, tratamiento y prevención de trastornos como el Alzheimer, Parkinson, esquizofrenia y depresión.
En el último tiempo, se tomó real conciencia de la importancia de una buena alimentación para un buen estado de salud en general, y de salud mental en particular.
Dicho de otra manera, lo que una persona come afecta y determina la función de su cerebro, incluida su capacidad para protegerse de la enfermedad de Alzheimer, cuya prevalencia en la población de la mano con el aumento de la expectativa de vida preocupa a los especialistas.
En ese sentido, hay ciertos alimentos que brindan mayores beneficios y conviene sumar a la dieta.
¿Cuál es el mejor alimento para un cerebro sano?
Según dos expertas de la Universidad de Harvard, las verduras de hojas verdes son “el alimento número uno para un cerebro sano”.
Para la nutricionista de Harvard doctora Uma Naidoo, y la neurocientífica formada en esa casa de altos estudios Lisa Genova, “hay un alimento en particular que es la clave para un cerebro sano, y son las verduras de hojas verdes”.
Los expertos coinciden en que comer verduras de hojas verdes es esencial para la salud en general, especialmente para el cerebro. Y enumeraron que algunas de las verduras de hojas verdes que se pueden agregar a las comidas son: col rizada -también conocida como kale -, espinaca, lechugas, repollo, acelga y col china.
Y enumeraron tres razones por las que una dieta rica en vegetales de hojas verdes es beneficiosa para la salud del cerebro.
- Son ricos en vitamina B. Según un estudio de la Facultad de Medicina de la Universidad Estatal de Wayne, muchas afecciones como la depresión y la demencia se asocian con una deficiencia de vitamina B, por lo que se trata de un nutriente “clave para la salud cerebral y neurológica, la función óptima de los neurotransmisores y la salud psicológica equilibrada”, aseguró Naidoo.
- Tienen un alto contenido de folato, luteína y betacaroteno. Para Genova, estos nutrientes son “estimulantes del cerebro”. Recientes estudios demostraron que estos nutrientes se relacionan con una mejora en la función y la estructura cerebral de los adultos mayores, además de que pueden mejorar la “memoria verbal y cognitiva”.
- Están llenos de fibra. Según un estudio, “el aumento de la ingesta de fibra dietética se asoció con una menor probabilidad de desarrollar depresión”.
Tres recetas para sumar verduras de hoja verde a la alimentación
Licuado de kale
Ingredientes (para una porción grande)
- 2-3 hojas de kale lavadas y cortadas
- ¼ taza de tallos de perejil
- Media manzana mediana, pelada, sin núcleo y cortada en trozos
- ⅔ tazas de mango fresco o congelado
- 1 cucharada de jugo de limón
- ¾ taza de agua fría, o más si se necesita
- 2 cubos de hielo (opcional)
Procedimiento
- Colocar todos los ingredientes en la licuadora y procesar hasta que estén uniformes. Si se usa mango fresco, es recomendable añadir el hielo. Servir y beber en el momento para una mejor absorción de los nutrientes.
Frittata con vegetales
Ingredientes (para cuatro porciones)
- 1 manojo de verduras verdes (espinaca, acelga, col, diente de león o acelga joven)
- 3 huevos
- 2 cucharadas de cebollín o ajo picado
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 2 chalotes grandes, pelados, picados y rebanados
- 3 cucharadas de perejil cortado
- Sal y pimienta
Procedimiento
- Pelar las verduras frescas de tallo duro. Si se utiliza acelga, cortar y guardar los tallos. Lavar bien las verduras. Colocar en una sartén grande con el agua que se apega a sus hojas. Salpique un poco de sal. Hervir hasta que las hojas se hayan secado y estén suaves. Escurrir cualquier exceso de humedad. Cortar y reservar.
- Batir los huevos en un recipiente con sal, pimienta y 1 cucharada de agua. Mezclar el ajo picado. Reservar.
- En una sartén grande, saltee lentamente los chalotes en aceite hasta que estén caramelizados y tengan un color dorado, 5-8 minutos sobre calor medio-bajo.
- Elevar la temperatura a media-alta y mezclar los verdes cocinados con los chalotes. Saltear por 2 minutos. Añadir el perejil y saltear para mezclar.
- Verter los verdes en la mezcla de los huevos y mezclar bien, luego llevar todo el contenido en una sartén para freír. Moldear con una espátula para formar una frittata parecida a una crepé. Cocinar hasta que la frittata esté a medio cocinar y dorada donde toca la sartén. Cuidadosamente deslizar en el plato, con la parte no cocinada hacia abajo.
- Limpiar la sartén con una servilleta de papel aceitada. Colocar la sartén sobre la frittata. Voltear el plato y la sartén a la vez para transferir la parte no cocinada de la frittata de nuevo a la sartén. Cocinar por 1-2 minutos hasta que esté dorada. Deslizar la frittata a un plato y servir en porciones con una ensalada crujiente.
Budín de hojas verdes y zanahoria
Ingredientes (para ocho porciones)
- 1 zanahoria grande rallada
- 1 paquete de verduras de hoja
- 1 cebolla picada
- 2 huevos grandes
- 1 cucharada colmada de almidón de maíz
- 1/2 cdta polvo para hornear
- 1 taza chica queso rallado
- 200 gramos queso cremoso en cubitos
- Sal y pimienta a gusto
Procedimiento
- Rehogar la cebolla y agregar la verdura picada. Cocinar hasta que ablande y agregar la zanahoria. Cocinar unos minutos más.
- Agregar los huevos, el almidón de maíz y el polvo para hornear. Mezclar bien. Condimentar y agregar los quesos.
- Preparar un molde budinera. Untar con aceite y cubrir con pan rallado. Colocar la mezcla y hornear a horno fuerte durante unos 35 minutos.
- Desmoldar y servir