Uno de cada 10 japoneses tiene 80 años o más y hay más de 92 mil personas mayores a 100 años en el país nipón, lo que hace posible que cada año Japón rompa el récord de centenarios a nivel mundial.
Estos datos del Ministerio del Interior de dicho país muestra que la longevidad es una de las características más destacadas de Japón, lo que nos lleva a la siguiente pregunta: ¿Cuál es el secreto de la tierra del sol naciente para vivir más años?
El estilo de vida japonés nos propone bebida saludable, alimento frugal y movimiento moderado, tres hábitos que pueden contribuir para vivir más años.
1. Té para la longevidad
En Japón una vida saludable para alcanzar la longevidad está ligada al consumo diario de té en Japón, entre los que destacan el té verde y el té matcha, ya que esta bebida ofrece múltiples beneficios para la salud. Según un estudio de 2019, consumir entre 2 a 3 tazas de té a diario se asocia con una reducción en el riesgo de muerte prematura, enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares y diabetes tipo 2.
Además, el té también actúa como antioxidante, gracias a los polifenoles o flavonoides, dos compuestos que controlan los efectos dañinos de los radicales libres en el cuerpo. Estos últimos aumentan el colesterol LDL (lipoproteínas de baja densidad), que en un nivel alto contribuye a la acumulación de colesterol en las arterias. De esta manera, el té ayuda a prevenir la enfermedad de las arterias coronarias.
Si hablamos de estilo de vida japonés no podemos dejar de mencionar el té. Es una bebida cotidiana que se disfruta a lo largo del día, ya sea en las comidas o para experimentar un momento de relajación. En el país nipón, tomar té es un hábito asociado con una vida saludable.
2. Alimentación con moderación para una vida saludable
El segundo secreto de Japón para la longevidad es la manera cómo se alimentan los habitantes de Okinawa, una isla que tiene una de las mayores concentraciones de personas centenarias a nivel mundial: aproximadamente 5 por cada 50 mil habitantes. En esta isla japonesa, se practica una tradición denominada hara hachi bu (significa ocho partes del vientre), que consiste en alimentarse hasta alcanzar un 80% de sensación de saciedad, sin llegar a llenar por completo el estómago.
Este hábito alimenticio característico del estilo de vida japonés en Okinawa es la opción predilecta para los isleños que no se enfocan en dietas restrictivas, sino en comer ligeramente por debajo del apetito. Se trata de una estrategia efectiva que ayuda a mantener el peso corporal y promueve una vida saludable que favorece la longevidad.
El hara hachi bu es un hábito que se ha extendido en Japón y es conocido a nivel global, por eso ha generado el interés en el ámbito médico para entender el secreto de las blue zones (zonas azules), se les llama así a las áreas del mundo donde las personas tienen mayor longevidad. Prueba de ello es que el sistema de atención médica NCH Healthcare System (Florida, Estados Unidos), a través de su proyecto Blue Zones, recomienda aplicar el hara hachi bu para tener una vida saludable.
En el contexto de crecientes tasas de enfermedades relacionadas con la alimentación a nivel mundial, la atención hacia el hara hachi bu resalta la importancia de las costumbres alimenticias balanceadas. Los resultados observados en Okinawa ofrecen un caso de estudio para especialistas en nutrición y salud pública, que podrían inspirar posibles cambios en las recomendaciones nutricionales y en la promoción de hábitos saludables a nivel global.
3. El secreto japonés para hacer ejercicio a diario
Además de beber té y practicar el hara hachi bu, el estilo de vida japonés incluye mantenerse activo físicamente a diario. En Japón, la población muestra una preferencia por ejercicios de intensidad moderada a baja, como caminar, hacer yoga, pasear en bicicleta o realizar estiramientos, en vez de ir al gimnasio.
Este tipo de ejercicios se practica también en las escuelas y oficinas, donde se llevan a cabo ejercicios suaves cada mañana para incrementar la amplitud de movimiento. De esta manera, el pueblo nipón integra la actividad física continua en la rutina diaria para combatir el sedentarismo y mantener una vida saludable.
Entre los hábitos que benefician la longevidad, el ejercicio físico cumple un rol fundamental. Un estudio en una revista especializada en los procesos de salud y enfermedad de la Universidad de Oxford, mostró que una actividad física tan sencilla como caminar reduce los costos médicos al disminuir el riesgo de una variedad de enfermedades crónicas.