¿Le pasa a usted que con frecuencia que se muerde la parte interna de las mejillas o se muerde los labios sin querer?
¿Qué es el bruxismo? Es un trastorno que ocurre cuando se contraen los músculos de la mandíbula y se dañan los dientes. Las personas manifiestan -o quien duerme al lado de quien padece bruxismo- que rechinan los dientes, hacen ruido, como que si se apretaran con fuerza.
Puede suceder en cualquier momento, durante el día o por la noche, o en ambas circunstancias. Una gran parte de la población sufre bruxismo a lo largo de su vida, a veces con más frecuencia y a veces con menos. Si bien se debe a múltiples causas, la principal es las situaciones de tensión o de estrés en el caso de los adultos, mientras que los niños lo pueden tener asociado al recambio dentario.
Claro, usted va a decir: “no es un tema muy importante”. Pero yo le digo que sí, es relevante para la salud por varias razones.
- Puede dañar las piezas dentales. Pregúntele a su odontólogo: “¿Tengo lastimado los dientes? ¿Los tengo pulidos porque se tocan mucho?” Es importante saberlo. Pero incluso puede tener dolor o rotura de piezas dentarias.
Pero no es el único síntoma que puede tener. Le puede dar dolor de mandíbula, de cabeza o de cuello.
¿Por qué? Porque es manifestación de por lo menos dos o tres cosas frecuentes. En primer lugar, el bruxismo diurno o nocturno puede ser estar asociado a situaciones de estrés. Cuando uno duerme, los vaivenes de una vida tensionada por estrés pueden manifestarse a través del rechinar de dientes.
Pero, en segundo lugar, muchas veces cuando las personas tienen bruxismo de noche y hacen ruido con sus dientes es por apneas del sueño o ronquidos.
Quiero decir no es un tema menor, es un tema para la consulta odontológica en principio y de medicina general.
¿Cómo se diagnostica el bruxismo?
El Brigham and Women’s Hospital de Boston, asociado a la Universidad de Harvard menciona que el diagnóstico del bruxismo se realiza durante las visitas regulares con su dentista, quien examinará minuciosamente sus dientes en busca de señales de esta afección, como el desgaste de las puntas de los dientes.
Si se identifican signos y síntomas, su dentista o un profesional de la salud seguirá observando el problema en las visitas posteriores antes de comenzar el tratamiento.
¿Cuál es el tratamiento para el bruxismo?
El tratamiento adecuado para el bruxismo se determina individualmente, teniendo en cuenta diversos factores, que incluyen: la edad, el estado general de salud y su historial clínico, la tolerancia a ciertos medicamentos, procedimientos o terapias y el estilo de vida.
En la mayoría de los casos, el bruxismo se puede tratar con éxito. Las opciones de tratamiento pueden comprender:
- Modificación del comportamiento. Aprendizaje de técnicas para descansar la lengua, los dientes y los labios de manera adecuada. También puede aprender cómo mantener la lengua hacia arriba para aliviar la incomodidad en la mandíbula, manteniendo los dientes separados y los labios cerrados.
- Protector bucal. Un dispositivo de plástico diseñado para usarse durante la noche absorberá la fuerza de la mordida, evitando así daños futuros en los dientes y contribuyendo al cambio del comportamiento.
- Biorretroalimentación. Este enfoque implica el uso de un dispositivo electrónico que mide la actividad de los músculos de la boca y la mandíbula, alertando al paciente cuando hay una actividad muscular excesiva, permitiéndole modificar su comportamiento. Es especialmente útil para el bruxismo diurno. Se requiere más investigación para desarrollar un programa de tratamiento eficaz para las personas que sufren de bruxismo nocturno.