Guía para runners: recomendaciones para entrenar durante las fiestas

La planificación es la clave fundamental. Consejos para correr durante la Navidad, Año Nuevo y no descuidar los días que los separan

Santiago García brinda algunos consejos para que los corredores sigan durante las Fiestas

El último mes del año tiende a ser un caos en la agenda de todas las personas. Ni hablar del 2022, que incluyó una Copa Mundial de fútbol. Encuentros, balances, cierres y, finalmente, las Fiestas, ocupan las jornadas y el entrenamiento tiende a verse un poco más apretado en esos días. Pero no hay nada que les impida a los runners seguir entrenando, tan solo deben tenerse en cuenta algunos detalles para disfrutar las fiestas y no perder entrenamientos en el intento.

Lo bueno de la Navidad y el Año Nuevo es que todos sabemos cuando caen, con lo que se puede planificar el calendario con total anticipación. Los corredores que entrenan cuatro veces por semana pueden tomarse sin problema alguno uno de los dos días y hacer un entrenamiento liviano en el siguiente. Los que entrenan cinco veces por semana no pueden saltearse dos días seguidos y los que corren seis veces por semana pueden elegir en qué momento se toman el día libre.

Si la Navidad o el Año nuevo caen justo en el día de descanso, no hay nada que alterar. Pero imaginemos que se desea entrenar todos los días o que, porque este año estos días caen en fin de semana, no queremos perder ni un día.

Disfrutar de las reuniones de las Fiestas y comer rico, sin excedernos (Gettyimages)

El 24 de diciembre es un día muy ajetreado. Se necesita organizar un montón de cosas y a partir de cierta hora ya todo es fiesta. Entrenar en la mañana del 24 es ideal. Nos sacamos un poco el estrés, calmamos la ansiedad, y hacemos lo que más nos gusta: correr. Lo mismo para el 31 de diciembre.

Este año, ambos días caen en sábado. Los más complicados son el 25 de diciembre y el 1 de enero. Las noches previas son de comida, tal vez bebida y festejo. Casi seguro la hora de ir a dormir es más tarde y la pregunta es si vamos a salir a correr o no. No son días sencillos para entrenamientos difíciles o extensos, por lo que se puede optar por trabajos livianos, que permitan disfrutar de correr y equilibrar un poco los excesos de la noche. También claro, se pueden tomar estos dos días como libres, dormir bien y, como pasa en muchos casos, pasar al almuerzo familiar directamente.

Pero por otro lado, cualquier corredor que se precie sabe que correr en Navidad y todavía más en Año Nuevo tiene una enorme carga simbólica. ¿Hay algo más lindo que empezar un nuevo año con un lindo trote? Claro que no, por lo que sí podemos, salir y hacer unos pocos kilómetros nos hará bien al cuerpo pero también a la mente.

Los entrenamientos fuertes conviene programarlos para la mañana del 24 y 31 de diciembre, que son momentos más tranquilos (pexels)

Depende de cada uno, sólo es cuestión de decidir lo que queremos hacer. Solo recuerden que son dos semanas consecutivas, en al menos una de las dos hay que mantenerse perfectamente entrenado, de lo contrario se nos van dos semanas.

Con respecto a la alimentación, es posible que se suba un poco de peso porque se cambia, aunque sea en parte, la dieta. Hay que ser prudentes sin que eso implique dejar de disfrutar. Comer un poco de cada cosa que nos guste, sin excedernos, es un buen consejo. No comer nada que no sea de nuestro absoluto disfrute, solo por comer.

Lo mejor siempre es tener un nutricionista que nos guíe todo el año, porque cuando rompamos una dieta estricta sabremos que lo estamos haciendo. Siempre, recuerden, hablamos de alimentación para gente que quiere estar en forma para correr. Si se cuida la comida, más aún debe cuidarse la bebida. Deshidratarse es lo más peligroso para cualquier y para un corredor aún más. Tener agua a mano y una bebida isotónica para la mañana siguiente. Recuerden que las fiestas son largas, como los maratones, así que como en ellos, se debe ir tranquilo para no llegar sin resto.

No hay nada que les impida a los runners seguir entrenando en las Fiestas, tan solo deben tenerse en cuenta algunos detalles para planificar (Gettyimages)

Un repaso rápido

Elegir qué días corremos y en qué horarios, dejar los entrenamientos más livianos para después de la noche de fiesta y el más complicado para antes. Si queremos empezar el año corriendo, aunque sea un trote suave alcanza para la salida motivadora. Ser prudente con la comida y la bebida. No dejar de disfrutar, pero entender que hay mucho disfrute en no lastimar el cuerpo por caer en excesos.

Unas lindas fiestas con buenos entrenamientos es la fórmula perfecta para cualquier verdadero runner.

*Santiago García es maratonista, autor del libro “Correr para vivir, vivir para correr” y “Volver a correr”. Completó la Six World Marathon Majors dos veces. En Instagram: @sangarciacorre.

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