Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), los trabajadores constituyen la mitad de la población del mundo y son los máximos contribuyentes al desarrollo económico y social. Sin un adecuado nivel de bienestar, no es posible que puedan desarrollar sus habilidades, afrontar el estrés normal de la vida, trabajar de manera productiva, y hacer una contribución significativa a la comunidad.
Con el fin de analizar distintos indicadores de bienestar en los trabajadores argentinos, el Observatorio de Tendencias Sociales y Empresariales de la Universidad Siglo 21 desarrolló el Índice de Bienestar Emocional y Estrés en trabajadores argentinos 2018.
La investigación, que abarcó a más de 1000 trabajadores en relación de dependencia de entre 18 y 65 años y de diferentes lugares del país, arrojó una de las principales conclusiones: el 50,4% de los encuestados expresa su preferencia por irse del país. ¿Es por el salario?: "No observamos diferencias entre los trabajadores que quieren irse y quienes quieren quedarse según el salario. Las diferencias se aprecian en los niveles de satisfacción con la vida, dedicación y orgullo por el trabajo, satisfacción con los recursos laborales y valoración por parte de la organización", describió Leonardo Medrano, secretario de investigación del Observatorio de Tendencias Sociales y Empresariales de la Universidad Siglo 21, quien llevó a cabo la investigación.
La motivación para los argentinos no radica en cuestiones salariales. De hecho, las variables que impactan negativamente y a la vez las que más valoran son: los niveles de satisfacción, la dedicación y el orgullo del trabajo, como también la aceptación con los recursos que tienen y hasta la valoración que perciben como parte de su organización.
Y así como la motivación es fundamental para el bienestar, un factor clave son los niveles de felicidad y satisfacción de cada argentino. En este punto analizado, el índice reveló que 1 de cada 3 trabajadores se encuentra satisfecho con su vida actual. "Con frases como 'en general, estoy satisfecho con mi vida' y 'en la mayoría de los aspectos mi vida es como quisiera que sea', hubo una disminución en los valores promedios con respecto a años anteriores", comentó Medrano.
La salud mental y emocional de los trabajadores argentinos
La OMS define a la salud mental como un estado de bienestar en el cual el individuo es consciente de sus propias capacidades, puede afrontar las tensiones normales de la vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera y es capaz de hacer una contribución a su comunidad.
La salud mental y emocional de las personas es una dimensión central para la calidad de vida. En este contexto, la investigación reveló que 1 de cada 4 señala que la mayor parte de los días experimenta síntomas de malestar emocional tales como dolor o tensión emocional (25,4%), sentirse ansiosos (24,7%), cansancio físico (19,3%), inquietud motora (18,7%), sensación de poco energía (16,6%) dificultades para concentrarse (11,8%) y dificultades para controlar la preocupación (10%).
Y como la salud mental es un todo, 1 de cada 3 trabajadores presenta síntomas de Burnout. "Este es un sentimiento muy claro que se observa a través de distintos síntomas como el agotamiento y otro que es al que deben prestar vital atención es al cinismo, cuando una persona siente que su propósito en el trabajo perdió todo tipo de sentido", enfatizó Medrano.
Los resultados en el estudio demuestran los sentimientos de los trabajadores argentinos: el 21,8% señala que cada vez se siente menos involucrado con su trabajo; el 21,1% duda que su labor contribuya en algo interesante y el 18,1% declaró que luego de su jornada se encuentra tan cansado que no puede realizar otra actividad.
A pesar de los elevados niveles de agotamiento, el 90% de los encuestados señaló: "Soy persistente en mi trabajo"; y el 89,7% declaró que a pesar de los problemas laborales continúa en sus tareas e intenta dar lo mejor de sí.
El estrés y bienestar emocional, por provincias
La investigación se llevó en distintas partes del país. La Ciudad de Buenos Aires, Comodoro Rivadavia, Córdoba, Corrientes, Mendoza, Rosario y San Miguel de Tucumán fueron las elegidas para realizar la investigación y comparar los niveles de estrés, motivación laboral y satisfacción con la vida.
Las provincias de Mendoza, Tucumán y la Ciudad de Buenos Aires presentan los mayores niveles de estrés, es decir, mayor agotamiento, cinismo por el trabajo y sintomatología emocional. Por otro lado, los niveles más bajos de motivación laboral se observaron en Córdoba, Ciudad de Buenos Aires y Tucumán, mientras que Corrientes y Rosario se aprecian los mayores niveles de motivación. Respecto a la satisfacción con la vida, los niveles más bajos se encuentran en Córdoba, Ciudad de Buenos Aires y Tucumán.
"Es de suma importancia entender lo importante que es promover el bienestar en las organizaciones y de hecho, ubicar el bienestar en el trabajo como un valor estratégico", comentó Néstor Vázquez, vicerector de innovación, investigación y posgrado de la Universidad Siglo 21
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