El mundo del fitness está en constante evolución y crecimiento. En la actualidad, es habitual "toparse" con nuevos estilos para trabajar el físico, conocer instructores que proponen modalidades poco convencionales. Los modo de ejercitarse van mutando con el paso del tiempo. Y lo propio sucede con los lugares de entrenamiento.
Los gimnasios del futuro rompen con las características de los tradicionales. La industria se inclina hacia aquellos que sean interactivos y personalizados. De la mano de la tecnología, apuntan a que la actividad de cada atleta esté signada por la combinación de prácticas reales con digitales, dejando de lado las clásicas máquinas.
Ahora, en China comenzó a imponerse una tendencia que aúna los dos conceptos: tecnología de vanguardia y una experiencia peculiar. Se trata de gimnasios comprendidos en un espacio de solo cuatro metros cuadrados, ideal para activar el cuerpo y dispersar la mente en horas libres durante la jornada.
La iniciativa es de la empresa Mipao Technology, una compañía de Beijing que se encargó de repartir una serie de cabinas por la capital oriental para que los usuarios puedan hacer ejercicio en plena calle. Estos habitáculos están equipados con una cinta de correr, además de un televisor y aire acondicionado.
¿Cómo funcionan? Cualquier usuario que quiera utilizar el microgym debe hacerlo a través de una aplicación. Para acceder, basta con leer un código QR y contar con un saldo de 15 dólares. A partir de ese instante, el reloj empieza a contar el tiempo que el cliente está dentro del cubículo, con un coste de 3 centavos por minuto (1,8 dólares por hora).
El equipamiento está disponible las 24 horas del día. Hasta el momento sólo hay cinco equipos instalados en la zona este de Beijing, pero por el apego que generaron se ampliará la oferta considerablemente. La agencia de noticias Xinhua informó que próximamente la capital contará con 1.000 microgimnasios repartidos por toda la ciudad. Y se piensa en agregarle otros aparatos, como una máquina elíptica o una bicicleta.
Esta opción está pensada para aquellos que quieran hacer una pausa en el día, desconectándose con el deporte. Es además una alternativa para realizar actividad física en espacios abiertos, algo difícil en el país asiático debido a la contaminación del aire. Los creadores también apuntan su valía para suplir la falta de disponibilidad, como por ejemplo para los que deben viajar constantemente por motivos de trabajo.
LEA MÁS:
Cómo se entrena en los nuevos gimnasios que no tienen máquinas
Cómo es el gimnasio más caro y extravagante del mundo
El asombroso origen de las máquinas del gimnasio
Exóticos y asombrosos: los gimnasios más extravagantes del mundo
El llamativo e ingenioso gimnasio hecho de chatarra
Cycflix, la bicicleta que obliga a pedalear para ver las series favoritas