La gripe aviar avanza en EEUU: pumas y tigres de bengala murieron en un santuario de grandes felinos en Washington

Las autoridades reportaron la muerte de 20 animales en tan solo pocas semanas. Confirmaron que la enfermedad se propaga a través de secreciones respiratorias y el contacto con aves infectadas o ambientes contaminados

La gripe aviar devastó un santuario en Washington, causando la muerte de más de la mitad de su población de grandes felinos en semana (Wild Felid Advocacy Center)

Un brote de gripe aviar devastó el Centro de Defensa Wild Felid, un santuario de vida silvestre ubicado en Shelton, Washington, provocando la muerte de más de la mitad de su población de grandes felinos en tan solo unas semanas.

La pérdida de 20 animales dejó al equipo del centro de atención a estos animales y la sociedad estadounidense de ese estado, en una situación de shock y profunda tristeza.

Mark Mathews, director del santuario, describió la experiencia como una “pesadilla viviente”.

Antes del brote, la instalación albergaba a 37 felinos de diversas especies, incluyendo pumas, linces y tigres. Ahora, quedan solo 17, de los cuales cuatro están en proceso de recuperación.

El santuario afectado, ubicado en Shelton Washington, permanece en cuarentena mientras desinfectan instalaciones y tratan a los felinos sobrevivientes (Wild Felid Advocacy Center)

El brote se detectó inicialmente alrededor del Día de Acción de Gracias, que fue el 27 de noviembre pasado, cuando comenzaron a aparecer los primeros casos entre los felinos.

Según los funcionarios de salud, la gripe aviar se propaga principalmente a través de secreciones respiratorias y el contacto con aves infectadas o ambientes contaminados. Aunque no está completamente claro cómo contrajeron la enfermedad, la proximidad de los felinos al entorno natural del estado de Washington, donde se ha registrado un aumento de casos en aves silvestres, podría haber sido un factor determinante.

El virus demostró ser particularmente letal para los grandes felinos, con síntomas que progresaron rápidamente, causando la muerte en muchos casos dentro de las 24 horas. Entre las especies afectadas se cuentan cinco servales africanos, cuatro pumas, cuatro linces, dos linces canadienses, un caracal africano, un tigre híbrido de Amur y Bengala, y un gato de Geoffroy, entre otros.

Historias detrás de las pérdidas

En 20 años de operación, el santuario nunca había enfrentado un brote como este, que acabó con especies rescatadas y amenazadas (Wild Felid Advocacy Center)

Cada uno de los animales fallecidos tenía una historia única que reflejaba la labor del santuario en la protección de estas especies. Tabbi, una tigresa híbrida de Amur y Bengala, era especialmente querida por Mathews.

Según el director, Tabbi disfrutaba jugar en el agua y era una de las favoritas del equipo. Otra pérdida destacada fue la de Hannah, una puma que llegó al santuario cuando era cachorra tras la muerte de su madre en Wyoming. La felina era conocida por su carácter dulce y su afición a acercarse sigilosamente a los voluntarios.

Mouse, un gato de Geoffroy, también se contaba entre los animales que fallecieron. Este pequeño felino, una de las especies más pequeñas del santuario, había capturado los corazones de todos quienes lo conocían.

El santuario ha sido colocado bajo estricta cuarentena para evitar la propagación del virus. Además, el personal está trabajando con autoridades estatales y federales, así como con veterinarios, para desinfectar las instalaciones y diseñar estrategias que protejan a los animales que sobreviven.

Los expertos trabajan para prevenir la propagación de la gripe aviar en el santuario, tomando medidas extremas de bioseguridad y monitoreo (Wild Felid Advocacy Center)

Estamos haciendo todo lo posible por cuidar a los animales que se están recuperando”, dijo Jolie Connolly-Poe, empleada del santuario, quien expresó sentirse devastada por la rapidez con que el virus afectó a los felinos.

La Asociación Estadounidense de Medicina Veterinaria informó que los felinos pueden mostrar síntomas como fiebre, pérdida de energía y apetito, además de problemas respiratorios que pueden derivar en neumonía severa. Harley, un puma en recuperación, presentó complicaciones poco habituales incluso después de recibir tratamiento, lo que subraya la complejidad de combatir el virus en estas especies.

La gripe aviar no solo afecta a los animales. Aunque la transmisión a humanos es rara, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) han documentado dos casos en los que el virus pasó de mamíferos a personas: uno en 2016 que involucró a un felino y otro en 2024 relacionado con una nutria. Estos incidentes resaltan la importancia de manejar brotes con extremo cuidado para minimizar el riesgo de propagación.

En todo el estado de Washington, los casos de gripe aviar han ido en aumento, afectando tanto a aves silvestres como a animales en cautiverio. Recientemente, se confirmó que dos pumas en una región distinta del estado también contrajeron el virus, lo que plantea preocupaciones sobre la diseminación entre especies.

La gripe aviar, transmitida por aves infectadas, ya ha afectado a pumas en otras regiones de Washington aumentando la preocupación por su propagación (Wild Felid Advocacy Center)

“Aunque los virus de la influenza aviar (gripe aviar) infectan y se propagan principalmente entre aves acuáticas migratorias silvestres y aves de corral domésticas, algunos también pueden infectar y propagarse a otros animales. En el pasado, los virus de la influenza aviar han infectado en ocasiones a mamíferos que comen aves o aves de corral (posiblemente infectadas), lo que incluye, entre otros, animales silvestres como leones, osos, zorros y zorrillos; visones de granja; los animales domésticos o callejeros, como gatos y perros; y los animales de zoológico, como tigres y leopardos”, explicaron desde los CDC.

La influenza aviar empezó a propagarse con fuerza en 2022 y afectó a más de 1100 bandadas de aves en 48 estados. En marzo de 2024, el virus se detectó por primera vez en vacas lecheras y ha infectado a algunos trabajadores de productos lácteos y avícolas.

Actualmente, los zoológicos de todo el país han comenzado a tomar medidas de precaución. Cinco animales de zoológicos murieron de gripe aviar en las afueras de Phoenix y un animal murió en un zoológico de Seattle.

El nuevo brote en la reserva de gatos salvajes representa no solo una pérdida biológica significativa, sino también un golpe emocional profundo para el equipo del santuario. Mathews, quien ha dedicado más de dos décadas a proteger a estas especies, admitió nunca haber enfrentado una situación de tal magnitud. “Nunca pensé que algo así nos pasaría. Te despiertas y piensas que es una mala pesadilla, pero no lo es”, declaró.

Los síntomas de gripe aviar en felinos incluyen fiebre y pérdida de apetito, y pueden agravarse rápidamente hasta causar complicaciones respiratorias fatales (Wild Felid Advocacy Center )

El santuario espera reabrir en el próximo año, una vez que las instalaciones sean desinfectadas y se establezcan protocolos adicionales para prevenir futuros brotes. Mientras tanto, el equipo continúa trabajando para garantizar el bienestar de los felinos restantes y buscando el apoyo de la comunidad para superar esta crisis.

El caso del Centro de Defensa Wild Felid pone de manifiesto los desafíos que enfrentan las instalaciones de conservación en un mundo donde las enfermedades zoonóticas se están volviendo cada vez más comunes. Las conexiones entre especies, tanto en la vida silvestre como en cautiverio, subrayan la necesidad de implementar medidas más estrictas de bioseguridad y monitoreo.

Este brote también invita a reflexionar sobre el delicado equilibrio entre proteger a los animales en cautiverio y los riesgos que enfrentan debido a enfermedades emergentes. A medida que los equipos veterinarios y científicos investigan más sobre la gripe aviar y su impacto en mamíferos, el caso de este santuario podría servir como una valiosa lección para mejorar las prácticas en el manejo de vida silvestre.

Con el apoyo de la comunidad y el compromiso del equipo, el santuario buscará honrar la memoria de los animales perdidos mientras trabaja para asegurar un futuro más seguro para los que quedan bajo su cuidado.