La posición de la lengua es clave para la salud bucal y oral, según los expertos

El posicionamiento de la lengua al descansar es crítico para la salud bucal y general, advierten especialistas. Priya Mistry, una dentista con sede en Vancouver, Washington, señaló que la forma en que se coloca la lengua podría causar problemas dentales y mandibulares e incluso desplazar el cartílago en la nariz. La posición adecuada, según Mistry, requiere que la punta, el medio y la parte posterior de la lengua estén presionadas contra el paladar con una ligera succión.

La postura incorrecta de la lengua puede provocar dificultades respiratorias, ya que si la lengua se desplaza hacia la parte inferior de la boca, el individuo podría comenzar a respirar por la boca en lugar de por la nariz. “No se puede respirar por la boca y mantener la lengua en la posición correcta; es imposible,” dijo Mistry a Goop.

Este hábito de respiración puede causar problemas con la producción de saliva, lo que a su vez conduce a caries, decadencia dental y inflamación de las encías. Mistry también indicó que una mala postura de la lengua es común en pacientes que sufren trastornos temporomandibulares (TMJ), condiciones que afectan la articulación de la mandíbula y causan dolor en la mandíbula, cara y cuello.

Entre el 5 y el 12% de los adultos en Estados Unidos sufren de TMJ, según la Clínica Cleveland. Los síntomas incluyen dolor intenso en la mandíbula, cara y cuello, migrañas, dolor de dientes, zumbidos en los oídos y chasquidos de la mandíbula. En algunos casos, la articulación puede bloquearse, provocando trismus y artritis, y alterar la forma en que los dientes encajan en la boca. Mistry explicó en su canal de YouTube que mantener la lengua en la posición adecuada ayuda a moldear el paladar en una estructura amplia y poco profunda, capaz de sostener todos los dientes.

La importancia de la postura de la lengua es particularmente crítica durante el desarrollo, ya que “la lengua es una piedra angular de nuestra cara y nuestra cabeza”, según Jessica Luffey, especialista certificada en miología orofacial. Si la lengua no ofrece el soporte adecuado, el paladar puede desarrollarse más estrecho de lo debido, generando estrés en las estructuras circundantes. La anatomía de la boca y la nariz puede cambiar debido a una mala postura de la lengua, estrechándose y arqueándose el paladar y, potencialmente, causando un tabique desviado en la nariz que dificulta la respiración.

Las causas de una postura deficiente de la lengua incluyen frenillos linguales, que limitan el movimiento de la lengua debido a una membrana corta o tensa que conecta la lengua con la base de la boca. Esta condición frecuentemente se diagnostica en bebés y puede corregirse con una cirugía menor. Además, alergias o amígdalas agrandadas pueden forzar a bajar la postura de la lengua para respirar por la boca. Otra razón es la desviación del tabique nasal, también asociada con una mala postura de la lengua.

Para diagnosticar problemas con la postura de la lengua, Luffey recomendó una prueba de fuerza de la lengua: colocar su mano en el mentón, abrir la boca lo más posible y sacar la lengua en línea recta. Si no puede mantenerla en el aire sin el apoyo de los labios o el apretamiento de la mandíbula, podría ser un signo de que la lengua no está en la posición correcta.

Ante cualquier sospecha de problemas con la postura de la lengua, Mistry advirtió que se debe consultar a un dentista y no intentar corregir la postura por uno mismo, ya que podría provocar tensión en los músculos de la boca y el cuello.