En el marco del Día Mundial del Microbioma, que se celebra hoy, los especialistas buscan visibilizar la importancia de los miles de millones de microorganismos, entre bacterias, levaduras, hongos, virus, arqueas y parásitos, que habitan en el cuerpo y cuya convivencia equilibrada significa que el organismo conserva la salud, ya que conecta el intestino con el cerebro y de las infecciones agudas y de enfermedades crónicas.
El Monitor Global de Servicios de Salud Ipsos llevó a cabo un estudio de salud digestiva en Argentina, Colombia y Ecuador. El sondeo mostró, para el primero de estos países, que entre las principales conclusiones, en los últimos 12 meses, el 66% de los argentinos tuvieron al menos una molestia digestiva.
El estudio, que se realizó en el mes de abril con una metodología representativa frente a la distribución de la población de Argentina en regiones, principalmente en AMBA (53%) y otras ciudades (47%), de distinto nivel socioeconómico, edad y sexo, reveló que entre las afecciones digestivas más comunes se encuentran en primer lugar el malestar a causa de flatulencias (35%), malestar por síntomas estomacales (24%); diarrea (22%) y falta de energía debido a molestias digestivas (19%).
El estudio también reveló que el 14% de las personas que participaron de la muestra, presentaron “muy a menudo” síntomas de desequilibrio en la microbiota intestinal durante el último año. El 35% lo padece “a menudo” mientras que casi la mitad de las personas (51%) raramente sienten malestar por este tipo de desequilibrio en la flora intestinal o disbiosis intestinal.
En tanto, el mismo trabajo detectó que, en Colombia, el 84% de los consultados dijeron sufrir de molestias digestivas, debido al desequilibrio de la flora intestinal. Hombres y mujeres, entre 35 a 44 años, son quienes más padecen este tipo de dolencias.
En ese país, el 72% de las personas dijo haber experimentado al menos una condición relacionada con la salud digestiva en los últimos 12 meses, con un promedio de tres condiciones por persona.
Las molestias digestivas más comunes incluyen el malestar general debido a molestias digestivas (42%), diversas molestias digestivas como estreñimiento, vómito e hinchazón abdominal (39%), y diarrea (38%). Además, un 27% de los encuestados reportaron falta de energía relacionada con problemas digestivos.
En Ecuador, el estudio detectó que el 61% presentaba al menos una condición de malestar digestivo. El 30% indicó que sufría incomodidad general debido a la salud digestiva; malestar digestivo (por ejemplo, constipación, vómito, distensión abdominal) presentaba el 27%; diarrea el 22%; falta de energía por malestar digestivo, el 19%; desequilibrio de la flora intestinal el 17%; dieta desordenada que afecta mi digestión el 15%; problemas de piel por malestar digestivo el 11%; falta de inmunidad debido a malestar digestivo, el 9%.
“Es necesario concientizar sobre la importancia del autocuidado para evitar un desequilibrio de la microbiota intestinal que genere molestias digestivas, dolores de cabeza y pérdida de energía.
Para mantener un equilibrio saludable en la flora intestinal existen dos claves de autocuidado, la ingesta de alimentos ricos en prebióticos como: el ajo, la cebolla, el puerro, los espárragos, la banana, la avena, etc. y el consumo de probióticos que los encuentra en alimentos fermentados como el yogur, el vinagre de manzana, los pepinillos, la col, entre otros”, señaló la doctora María Claudia Cruz, (MN:52869312) gerente médico de Digestive en Sanofi CHC
La alteración de la microbiota intestinal se puede producir por diversas causas, entre ellas la intolerancia alérgica a ciertos alimentos o las infecciones intestinales.
Otros factores, tal vez menos conocidos, que produce la perturbación pueden ser los siguientes:
- El consumo excesivo de alimentos altos en grasas saturadas
- Exceso de bebidas alcohólicas
- El tabaco
- El estrés
- La falta de ejercicio
“El equilibrio de la microbiota intestinal es fundamental en la salud digestiva. Mantener el nivel y diversidad de microorganismos correcto ayuda a prevenir el crecimiento de bacterias dañinas para el organismo. Entre los tratamientos eficaces se encuentran los suplementos de probióticos que contienen Bacillus clausii, resistentes a los ácidos gástricos y a las sales biliares, que contribuyen a restaurar el balance de la flora intestinal y, como consecuencia, a fortalecer la barrera intestinal y a mejorar la función inmunológica, reduciendo la incidencia de infecciones gastrointestinales y respiratorias. También es efectivo para la prevención y tratamiento de diarreas causadas por el uso de antibióticos, al restaurar el equilibrio de la microbiota intestinal”, sumó Cruz.
En la encuesta de Ipsos el 35% de los argentinos dijo que, ante una molestia intestinal, recurre a los remedios caseros, mientras que el 24% busca cualquier tipo de medicamento de venta libre que les ayude a disminuir los síntomas, solo el 14% utiliza los suplementos de probióticos de venta libre.
Esto significa que la ingesta de probióticos en alimentos o como suplementos podría ser una de las formas para mejorar la salud digestiva de los argentinos.
¿Por qué el estrés, la falta de ejercicio, el consumo excesivo de alimentos altos en grasas saturadas, el exceso de bebidas alcohólicas y el tabaco afectan el equilibrio de la microbiota intestinal?, preguntó Infobae.
“Cualquier cambio de rutina tiene el potencial de afectar el equilibrio de mi flora intestinal. La flora intestinal de cada individuo es única y su equilibrio se basa en la rutina que seguimos, si hacemos o no ejercicio, cómo nos alimentamos, si consumimos agua, dónde vivimos, qué enfermedades tenemos y qué medicamentos tomamos. Esto significa que cualquier cambio en esta rutina puede afectar la diversidad y/o cantidad de microorganismos (o bacterias) buenas que tenemos en el intestino. El desbalance y los síntomas correspondientes se dan cuando estos cambios superan la capacidad de adaptación de mi flora intestinal, es decir, no logro adaptarme a este cambio de rutina y mi flora intestinal se desequilibra”, detalló Cruz.
Y remarcó: “Lo primero es confirmar algún tipo de sintomatología intestinal y en retrospectiva, ver algún factor de riesgo mencionados, como asociado a la aparición de estos síntomas. En este caso, es muy probable determinar que mi flora intestinal se encuentra desbalanceada y, para restaurarla, la recomendación es utilizar probióticos”.