El cáncer de colon y recto es el tercer tipo de tumor más común en todo el mundo. Se estima que hay más 930.000 muertes por ese tipo de patología oncológica cada año.
Pero también se sabe que las muertes prematuras por esa enfermedad podrían prevenirse en gran medida mediante estrategias de tamizaje que permiten detectar y eliminar las lesiones precancerosas de manera temprana.
Con la idea de despertar conciencia sobre el valor de la prevención y las pruebas a tiempo, este miércoles 17 de abril desde las 8.30 a las 14 horas se instalará un colon inflable gigante en el estacionamiento del Hospital de Gastroenterología “Dr. Carlos B. Udaondo”, Avenida Caseros 2061, Ciudad de Buenos Aires.
El cáncer de colon y recto se detecta cada vez más entre los menores de 50 años. En los últimos años, los diagnósticos han aumentado entre un 1% y un 2% anual en ese grupo demográfico en los Estados Unidos, según la Sociedad Estadounidense del Cáncer.
Durante toda la mañana, las personas que concurran al Hospital Udaondo podrán hacer recorridas interactivas en forma totalmente gratuita por el interior del colon. Serán acompañadas por personal capacitado que le explicará sobre la importancia de la prevención y compartirá material de folletería con consejos saludables.
“Esta iniciativa representa una excelente oportunidad para acercarse a una problemática muy prevalente, como lo es el cáncer de colon, pero que se puede prevenir o detectar tempranamente mediante estudios diagnósticos relativamente sencillos. No obstante lo cual, es el tipo más frecuente de tumor luego del cáncer de mama, y el segundo en mortalidad con más de 7 mil muertes por año en la Argentina, solo superado por el cáncer de pulmón”, explicó la doctora Karina Collia, jefa del Servicio de Coloproctología del Hospital. La campaña de concientización cuenta con apoyo del laboratorio Merck.
Cómo se puede prevenir el cáncer de colon
Los cambios en el modo de vida y los exámenes periódicos pueden ayudar a prevenir el cáncer colorrectal. Entre las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se incluyen las siguientes:
- Tener una alimentación sana que incluya muchas frutas y verduras.
- Dejar de fumar tabaco.
- Mantener un estilo de vida activo.
- Reducir el consumo de alcohol.
- Evitar la exposición a factores de riesgo ambientales.
Se recomienda que las personas que sospechen tener cáncer colorrectal se pongan en contacto con un profesional de la salud inmediatamente. La mejor manera de detectar a tiempo el cáncer colorrectal es mediante la realización de exámenes periódicos (prevención secundaria).
El acceso a ese tipo de estudios es recomendable en tanto hay una mayor probabilidad de que los tratamientos a tiempo curen la enfermedad en las fases iniciales.
Los estudios han demostrado que el tamizaje puede reducir tanto la incidencia como la mortalidad del cáncer colorrectal mediante la detección precoz y la extirpación de lesiones precancerosas.
Qué se puede hacer para la detección temprana
El cáncer colorrectal es prevenible. La progresión lenta de los pólipos o adenomas favorece la realización de exámenes periódicos para detectarlos y extirparlos permitiendo prevenir la enfermedad. Además, este tipo de cáncer se puede curar porque si se detecta tempranamente las posibilidades de curación son superiores al 90% y los tratamientos son menos invasivos, de acuerdo con el Ministerio de Salud de la Nación de Argentina.
Todas las personas de 50 a 75 años aunque no tengan síntomas deben realizar chequeos regulares para detectar y extirpar los adenomas o detectar y tratar el cáncer colorrectal en una etapa temprana.
En caso de tener antecedentes familiares o personales de cáncer de colon o pólipos, las personas debe consultar a un médico especialista y preguntar si es necesaria la realización de exámenes a más temprana edad.
Uno de los estudios es el test de sangre oculta en materia fecal inmunoquímico. Se utiliza para saber si hay presencia de sangre en la materia fecal, no observable a simple vista.
Varias son las causas que pueden generar la aparición de sangre oculta en la materia fecal, entre ellas los pólipos o el cáncer colorrectal. Una ventaja de este examen es su simpleza y que puede ser realizado por la persona en su propia casa.
Otro estudio es la colonoscopía. Con esta tecnología, se utiliza un tubo flexible con una cámara para examinar minuciosamente el colon y el recto. Posibilita la detección y extirpación de pólipos previniendo el cáncer colorrectal.
Cuáles son los síntomas del cáncer de colon y recto
A menudo, el cáncer colorrectal no causa síntomas en las fases iniciales. Según la OMS, entre los síntomas habituales figuran:
- Cambios en el hábito intestinal como diarrea, estreñimiento o heces delgadas.
- Sangre en las heces (hemorragia rectal), de color rojo brillante o que produce heces oscuras y alquitranosas.
- Cólicos, dolor o distensión abdominal que no desaparecen.
- Pérdida de peso sin causa aparente que es repentina y pérdida de peso sin intención.
- Sensación constante de cansancio y falta de energía, incluso con suficiente descanso.
- Anemia por déficit de hierro debida a hemorragia crónica, que provoca cansancio, debilidad y palidez.
“Al visitar el colon gigante de la campaña, las personas podrán ver de qué se tratan los pólipos y cómo actuar ante su detección”, explicó la doctora Collia a Infobae.