¿Qué es el colágeno, para qué sirve y cuál es su efecto en la salud?

El colágeno, una de las proteínas más abundantes del cuerpo, compone el tejido conectivo, por lo que brinda fuerza y resistencia a huesos, piel, músculos, tendones y cartílagos. Ayuda a que los tejidos sean fuertes y resistentes, capaces de soportar el estiramiento del organismo, según detalla la Escuela de Salud Pública de Harvard.

El colágeno tipo I, el más abundante en el organismo, está constituido por fibras compactas que confieren estructura a la piel, los huesos, los tendones, el cartílago fibroso, el tejido conectivo y los dientes.

Por otro lado, el colágeno tipo II se caracteriza por fibras menos densas y es un componente clave del cartílago elástico que se encuentra en las articulaciones, proporcionando amortiguación, según el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo de México.

Además, el tipo III es esencial para mantener la estructura de los músculos, de diversos órganos y de las arterias. En tanto, el tipo IV juega un papel importante en los procesos de filtración y se halla en las capas subyacentes de la dermis.

La pérdida de colágeno con la edad se produce por varios motivos. Naturalmente, las células encargadas de producir esta proteína, como los fibroblastos, disminuyen su actividad con el tiempo, de acuerdo con la profesora peruana en Nutrición, Matilde Bustamante.

“Además, las enzimas que degradan el colágeno aumentan, mientras que los procesos regenerativos disminuyen. El envejecimiento también conlleva una menor capacidad de reparación del tejido conectivo, y los factores ambientales y de estilo de vida contribuyen a la disminución y deterioro del colágeno en el organismo”, señaló para Infobae.

La especialista indicó que “hay indicios de su disminución, como mayor flacidez y arrugas en la piel, hundimiento facial, debilidad muscular, rigidez en tendones y ligamentos, dolor articular, pérdida de movilidad, problemas digestivos y alteraciones en el flujo sanguíneo”.

El colágeno es una proteína que sirve como uno de los principales componentes de los huesos, la piel, el cabello, los músculos, los tendones y los ligamentos. Aporta tensión a la piel, por lo que muchas personas relacionan sus presencia con el aspecto facial terso y juvenil.

El cuerpo humano produce colágeno de forma natural, pero esta producción, como se mencionó, disminuye con la edad. Por eso un buen recurso es prestar atención a qué alimentos contienen esta proteína.

La Escuela de Salud Pública de Harvard señala que cuando el colágeno se digiere en el estómago, se descompone en aminoácidos, que luego se distribuyen donde el cuerpo más necesita proteínas. Muchos alimentos que favorecen la producción de colágeno generalmente se recomiendan como parte de un plan de alimentación saludable.

Los especialistas en nutrición de Harvard detallan que el colágeno se encuentra en cortes de carne duros y llenos de tejido conectivo como el asado, la pechuga y el filete. Sin embargo, no se recomienda un consumo elevado de carnes rojas como parte de una dieta saludable y ambientalmente sostenible a largo plazo .

Esta proteína también está presente en las espinas y la piel de pescado de agua dulce y salada.

La misma institución señala que el caldo de huesos, considerado un alimento moderno y saludable rico en esta proteína, se elabora al cocer lentamente huesos animales con agua y un poco de vinagre durante 4 a 24 horas, proceso que facilita la extracción de colágeno y minerales.

Según explicó la profesora Bustamante en Infobae, el colágeno hidrolizado es una forma de colágeno que ha sido descompuesto en péptidos más pequeños mediante un proceso de hidrólisis, facilitando su digestión y absorción en el cuerpo.

Una revisión de la revista Experimental and Therapeutic Medicine llegó a la conclusión que el consumo de colágeno hidrolizado, obtenido de varias fuentes como la piel de bovino, porcino y organismos marinos, y combinado a veces con vitaminas, puede ser beneficioso para la salud de la piel y aliviar el dolor articular.

Respecto a las cremas y suplementos, la médica especialista en estética Alexandra Rada señaló a Infobae Colombia que “existe también el colágeno que podemos utilizar tópico, como cremas. Hoy en día hay muchas cremas enriquecidas con colágeno; lo importante es no solamente reponer el colágeno sino el ácido hialurónico, la vitamina C, la vitamina E, pero ya existen muchos sueros enriquecidos con colágeno con las que debemos cuidar a diario nuestra piel”.

Un estudio de la revista Nutrients sobre un metaanálisis de 26 ensayos controlados aleatorios concluyó que la suplementación con colágeno hidrolizado (HC) es beneficiosa para aumentar la hidratación y la elasticidad cutáneas. Se observó que estos efectos son más notables cuando la suplementación se mantiene durante un periodo prolongado en comparación con un consumo breve.

No obstante, los investigadores señalaron que es esencial realizar más estudios controlados y aleatorios con una muestra más amplia para evaluar de manera concluyente los efectos clínicos de los suplementos de colágeno por vía oral.

En otra revisión bibliográfica de Dolores García Gordillo, de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Sevilla, en España se llegó a la conclusión que el colágeno hidrolizado, suplemento de esta proteína, se presenta como un complemento útil en el tratamiento de patologías osteoarticulares, capaz de aliviar el dolor, mejorar la movilidad y reducir la necesidad de medicamentos analgésicos. Además, la investigación destaca que la proteína tiene un papel preventivo en personas sanas y es efectivo en etapas tempranas de enfermedades a los huesos, mejorando los síntomas y contribuyendo al fortalecimiento de huesos y aumento de la masa muscular.

Asimismo, de acuerdo con un estudio publicado por Journal of Bone Metabolism, la ingesta prolongada de péptidos de colágeno bioactivos muestra ser efectiva en mitigar la disminución de la densidad mineral ósea (DMO). Además, el incremento notable en la DMO a través de esta suplementación puede favorecer la fortaleza de los huesos.

Bustamante señaló que no existe una edad específica estandarizada para comenzar a consumir esta proteína.

Sin embargo, se suele recomendar su uso en adultos, particularmente cuando se presenta una disminución natural de la producción de colágeno. “La decisión de iniciar la ingesta de colágeno debe basarse en necesidades individuales, objetivos de salud, y ser siempre consultada con un profesional de la salud que pueda proporcionar asesoramiento personalizado”, señaló a Infobae.