La psoriasis es una enfermedad de la piel con alta prevalencia: según informan desde el Hospital Alemán, afecta a entre el 2 y el 5% de la población, tanto en niños como adultos. y en menor medida, pueden presentar alteraciones las plantas de los pies, palmas de las manos, las uñas, la mucosa labial y genital y, en algunos casos, eventualmente puede comprometer articulaciones.
Según los Institutos Nacionales de La Salud de los Estados Unidos (NIH), el médico tratante debe examinará la piel, el cuero cabelludo y las uñas para buscar indicios de la afección. También le puede hacerle preguntas sobre su salud y sus antecedentes. Esta información ayuda al médico a determinar si tiene psoriasis y, de ser así, a identificar qué tipo. Para descartar otras afecciones de la piel que se parecen a la psoriasis, los médicos pueden tomar una pequeña muestra de piel (biopsia) para examinarla con un microscopio.
“Es primordial desterrar el mito de que la psoriasis es algo lapidario, que no tiene vuelta atrás. Mucha gente se deprime al conocer el diagnóstico, pensando que es algo terrible, lo que genera un círculo vicioso, ya que en la mayoría de los casos la depresión provoca mayores brotes. Los principales aspectos que deben ser destacados son que no contagia, es benigna, y por lo general es leve”, dijo la doctora Paula Luna, médica del Servicio de Dermatología del Hospital Alemán.
Y sumó: “No hay curas definitivas para la psoriasis, nada puede garantizarle al paciente que no vuelva a brotarse y, en la gran mayoría de los casos, se prolonga durante varios años. Sin embargo, hay un 35% de los pacientes que se curan solos”
Causas
Ivonne Arellano Mendoza, Jefa del Departamento de Dermatología del Hospital General de México Eduardo Liceaga, explicó en un comunicado de la Secretaría de Salud de México que “durante mucho tiempo, la psoriasis fue olvidada. Se consideró una enfermedad que únicamente tenía repercusiones en la piel pero hoy en día, se sabe que es un padecimiento ligado a otros como artritis, obesidad, sobrepeso y cardiovasculares”.
“La Psoriasis es una enfermedad multifactorial, aunque la causa preponderante es genética. Esto no significa que es hereditaria en sí misma, sino que se heredan determinados genes predisponentes”, agregó la doctora Luna y explicó en detalle otros factores que inciden en su aparición:
Antecedentes familiares
Tabaquismos
Consumo excesivo de alcohol
Lesiones en la piel (traumatismos, cortes, picaduras de insectos y quemaduras solares)
Estrés
Exponerse a climas muy fríos y secos
Infecciones cutáneas, u otras como amigdalitis
Como se explica desde la prestigiosa Clínica Mayo, la psoriasis es una enfermedad frecuente y de larga duración (crónica) que no tiene cura. Puede ser dolorosa, interferir en el sueño y dificultar la concentración. “Esta afección suele presentarse en ciclos, con brotes que duran algunas semanas o meses y luego disminuyen. Los factores desencadenantes comunes en las personas con predisposición genética a la psoriasis incluyen infecciones, cortes o quemaduras y determinados medicamentos”, detallaron.
También es importante desestimar el mito de que es una enfermedad psicosomática, ya que está comprobado que tiene carácter inmunológico.
Tratamientos
Si bien la enfermedad puede ser leve y manejarse con medicamentos tópicos, en algunas ocasiones puede presentar mayor gravedad. “Por esa razón, se debe consultar a un médico para adoptar el tratamiento adecuado. En este tipo de procesos, el rol del profesional es acompañar y llevar a cabo tratamientos para disminuir los síntomas y reducir las molestias. Si una persona comienza a notar las áreas rojas, o las escamas, debe consultar inmediatamente”, dijo la doctora Luna.
“Hay una gran variedad de tratamientos, dependiendo de cada caso en particular. La mayoría de los pacientes no se brota todo el tiempo, es decir, son muchos los momentos en los que están bien. Para el momento en que aparecen las lesiones, se utilizan cremas cuyo uso debe suspenderse al cabo de unos días, cuando los brotes mejoran. El que guía todo este proceso es el profesional médico”, agregó la experta.
Y sumó: “En los pacientes en los que la enfermedad es más importante, o está más extendida, se pueden usar fototerapias, que consisten en la aplicación de luz UBV, siempre monitoreadas por un médico que controla el tiempo de exposición. También existen múltiples tratamientos por boca o inyectables , de acuerdo a la severidad y la extensión de la psoriasis”.
Con respecto a los corticoides, si bien se pueden aplicar localmente en cremas, “está absolutamente desalentado el uso por boca, ya que al suspenderlos, surge un brote mucho más exagerado”, dijo Luna.
A su vez, hay hábitos y estrategias que ayudan a contenerla:
Llevar un correcto seguimiento de la enfermedad con un especialista en dermatología
Canalizar el estrés de forma positiva
Llevar una alimentación saludable y realizar ejercicio físico acorde a la edad
Aplicar cremas hidratantes con regularidad
“Poder diagnosticar que un paciente tiene psoriasis resulta favorable para él, debido a que puede llevar adelante un tratamiento adecuado lo antes posible. Si la psoriasis está relacionada con problemas articulares, cuanto antes se la detecte, mayores posibilidades va a tener de prevenir secuelas a futuro”, cerró la experta