La ministra de Salud, Carla Vizzotti, y su par de Turismo y Deportes, Matías Lammens, brindaron esta mañana una conferencia de prensa sobre los avances del Plan de Vacunación contra el COVID-19 en la que se destacaron algunos anuncios importantes.
“Argentina tiene un alto nivel de inmunización por haber avanzado fuerte en la campaña de vacunación. Y a partir de ello, se comenzará a avanzar con las terceras dosis de la vacuna contra el coronavirus AstraZeneca a los mayores de 50 años que hayan recibido la (vacuna) Sinopharm y las personas mayores de 3 años inmunocomprometidos que hayan iniciado el esquema de vacunación con cualquier componente”, destacó la funcionaria y aclaró la diferencia entre vacunas de refuerzo y terceras dosis.
“La tercera dosis complementa el esquema primario para ampliar la protección; y el refuerzo, después de haber recibido el esquema primario recomendado, lo que hace es reforzar la inmunidad en forma periódica y eso es al menos 6 meses después de haber recibido el esquema primario”, precisó y aclaró que en el país los refuerzos también están planificados, a partir de los estudios que lleva adelante la Conain. Las autoridades de salud están “trabajando para que 2022 sea el año de refuerzos”, dijo la ministra.
¿Cuál es la diferencia entre una tercera dosis y una dosis de refuerzo?
Aunque a menudo se usan indistintamente, hay una distinción. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), una tercera dosis (también conocida como dosis adicional) es para personas que son inmunocomprometidas. A veces, las personas inmunocomprometidas no desarrollan suficiente protección cuando se vacunan por completo. Cuando esto sucede, recibir otra dosis de la vacuna puede ayudarlos a construir más protección contra la enfermedad.
Una dosis de refuerzo se refiere a una dosis de una vacuna que se administra a alguien que generó suficiente protección después de la vacunación, pero que esa protección disminuyó con el tiempo (inmunidad menguante). Es por eso que necesita una vacuna de refuerzo contra el tétano cada 10 años, porque la protección de la vacuna infantil contra el tétano disminuye con el tiempo.
“Generalmente hablamos de tercera dosis cuando estamos dentro del año de aplicación. Ejemplo: vacuna contra hepatitis B son 3 dosis: a los 0, 1 y 6 meses. Los refuerzos son al año y 5 años. En el caso del COVID-19, todavía no sabemos si los refuerzos serán necesarios, pero asumimos que sí. Esto se verá una vez transcurrido al menos un año de aplicadas las primeras dosis, que será hacia fin de año”, explicó a Infobae la doctora Cristina Freuler, médica infectóloga y jefa del Departamento de Medicina Interna del Hospital Alemán.
“Sinopharm es la vacuna que ha demostrado, siendo muy buena, la menor eficacia sostenida en el tiempo y por ello la necesidad de la tercera dosis en esos casos. Pareciera además que con 3 dosis se está mejor protegido contra la cepa Delta, probada de mayor contagiosidad”, precisó la especialista.
Y agregó: “Por otro lado se sabe que, como con todas las vacunas, quien tiene su sistema inmunológico comprometido responde menos. A la espera de algún comunicado similar están muchos médicos que recibieron la vacuna muy al inicio de año y están preocupados por la ola de Delta, que esperemos que no llegue fuerte”.
El doctor Ricardo Teijeiro, el infectólogo del Hospital Pirovano y expresidente de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI), explicó a Infobae una tercera dosis puede ser considerada para ciertos grupos poblacionales con factores de riesgo específicos.
“Todos aquellos que tienen baja respuesta a la vacunación como los adultos mayores, o las personas con enfermedades oncológicas o inmunosupresión, y que, por edad o por estas afecciones, responden de manera inadecuada porque su organismo genera una menor respuesta inmune, es probable que necesiten un refuerzo”, afirmó y recordó que hay millones de argentinos adultos que tienen una sola dosis y necesitan aplicarse ya la segunda como complemento. “Hay que tener en cuenta que aún tenemos una gran población mundial que no tiene el calendario de vacunación completo, y esa debería ser la prioridad”, argumentó Teijeiro.
Según explicó la Ministra de Salud esta mañana, la decisión de las terceras dosis se tomó en base a recomendaciones de la OMS y de organismos internacionales: “La evidencia muestra que se puede avanzar en las personas inmunocomprometidas, que tengan las defensas bajas por cualquier motivo, mayores de 3 años que hayan recibido cualquier esquema de vacunación. Vamos a trabajar en la planificación y distribución con cada una de las provincias”. Estos dos grupos contienen aproximadamente 1,6 millones de personas.
¿Por qué los funcionarios consideraron la posibilidad de combinar vacunas como terceras dosis?
Permitir que las personas reciban cualquier vacuna como refuerzo puede ser una bendición para las personas ansiosas por recibir una inyección adicional. “El futuro estaría en combinar vacunas para COVID-19 que están basadas en diferentes plataformas e incluso se harían combinaciones de vacunas basadas en la misma plataforma”, sostuvo Angela Gentile, especialista en vacunas de la Sociedad Argentina de Pediatría y de la Comisión Nacional de Seguridad en Vacunas. “Si el coronavirus se convierte en una endemia como la gripe cada año, existe la posibilidad de que se necesiten combinar dosis de vacunas diferentes. La humanidad hoy necesita tanto combinar vacunas como tener más dosis en el contexto de una pandemia trágica y sorprendente”, dijo.
Cualquier vacuna de refuerzo, incluso si es la misma que su primera vacuna, aumentará la cantidad de anticuerpos que pueden combatir el coronavirus. Pero, en algunos casos, mezclar vacunas puede ofrecer una mejor protección, dicen los expertos. Los primeros datos han demostrado que el seguimiento de una primera dosis de Johnson & Johnson con una vacuna de ARNm, Moderna o Pfizer, proporcionó niveles significativamente más altos de anticuerpos neutralizantes.
“La Comisión Nacional de Inmunizaciones está trabajando en esa recomendación específica junto con las provincias y a partir de diciembre se va a empezar con el refuerzo —que es diferente a una tercera dosis—, empezando por el personal de salud y escalonadamente como fuimos avanzando con nuestra campaña de vacunación”, destacó Vizzotti, y precisó que a partir de diciembre se va a empezar con el refuerzo en el personal de salud y escalonadamente de acuerdo al plan de vacunación vigente. “A las personas inmunocomprometidas, las personas que tengan las defensas bajas por cualquier motivo, mayores de 3 años, que hayan recibido cualquier esquema de vacunación disponible, se recomienda aplicar una tercera dosis en función de los planes provinciales. A partir de los próximos días vamos a trabajar en la planificación, la distribución”, señaló Vizzotti, que también busca avanzar en la vacunación de niños de 3 a 11 años con la vacuna de Sinopharm y en adolescentes, con las vacunas de Pfizer y Moderna.
“Hemos tenido reuniones durante esta semana con el Consejo Federal de Salud, la Comisión Nacional de Inmunizaciones y expertos y expertas para avanzar en la revisión de recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, de organismos internacionales y analizar nuestra situación epidemiológica. La primera recomendación es avanzar en las coberturas de vacunación. Tenemos las dosis disponibles para completar todos los esquemas de vacunación de quienes lo han iniciado, y para comenzar los esquemas de vacunación de adolescentes y de niños y niñas. Es muy importante que avancemos con esta estrategia para sostener la situación epidemiológica”, puntualizó Vizzotti, que recordó que a partir de diciembre se empezará con el refuerzo. “Vamos a comenzar por el personal de salud y a avanzar escalonadamente como fuimos avanzando con nuestra campaña de vacunación. El año de los refuerzos en la Argentina será 2022″, recordó.
La semana pasada, el ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, admitió que “luego de 6 a 8 meses de la segunda dosis para algunas vacunas empieza a haber alguna disminución del grado de anticuerpos”. De todas formas, precisó que “todavía no está claro para las que estamos usando aquí en Argentina mayoritariamente, que son las de vector viral o de virus completo”. “No lo tenemos confirmado porque falta información científica” sobre el tiempo de inmunidad de cada vacuna, agregó, pero insistió en que es probable que “empecemos el año recuperando esquemas de los primeros que se han vacunado”.
Vacunación a turistas
Vizzotti, junto a Lammens anunciaron que el país ofrecerá vacunas anticovid para turistas extranjeros menores de 18 años, que son quienes hoy pueden ingresar al país sin el requisito de estar vacunados.
“Para avanzar con la mirada que tenemos de que recién cuando todos los países puedan vacunar a su población vamos a poder dar vuelta la página de la pandemia, estamos trabajando con las jurisdicciones que tienen puntos de frontera para ofrecer la vacunación en esos puntos, fundamentalmente Formosa con Paraguay, y Salta y Jujuy con Bolivia. También atento a que tenemos stock suficiente de dosis de vacuna para poder vacunar a todos los argentinos y argentinas en todas las etapas de la vida, vamos a avanzar con la oferta a los turistas y las turistas que vengan a Argentina, fundamentalmente menores de 18 años que son quienes van a poder ingresar por turismo sin tener la vacunación. Y a las personas que ingresen por alguna excepción, ofrecerles la vacuna cuando vengan a nuestro país a visitarnos”, afirmaron.
“Ya a partir del 19 de octubre, el antígeno a la entrada no es necesario. La otra novedad es que vamos a eximir a los turistas que vengan del PCR a los cinco o siete días. Es decir que solamente se les pide el esquema completo de vacunación y el PCR negativo 72 horas antes de la entrada. Y después, la eximición de cuarentena para menores de 18 años que vengan con su familia, y la posibilidad también de que se vacunen cuando vienen a la Argentina”, destacó Lammens, sin precisar una fecha determinada de a partir de cuando comenzará esta etapa.
Situación epidemiológica
En relación a la situación epidemiológica, Vizzotti indicó que “estamos en una situación favorable, de mucho optimismo, con un número promedio de casos en octubre de 717, comparado de 1634 de septiembre, y en mayo 26.892″. Hay un “descenso sostenido mes a mes y en las últimas semanas se ha estabilizado el número de casos en un número muy bajo, incidencia baja, con porcentaje de positividad bajo en 5.982 casos semanales promedio”.
Sin embargo, advirtió, que en las últimas semanas “la proporción de casos está aumentando en menores de 18 años”, del 8 a 25%, por eso remarcó que “es muy importante avanzar con la vacunación de niños, niñas y adolescentes entre 3 y 11 años con Sinopharm y entre 12 y 18 años con Pfizer, que están disponibles”. “Hemos superado el 50% de coberturas de vacunación en los adolescentes de 12 a 18 años y ya llegamos al 22.4% de entre 3 a 11 años”, agregó.
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