“Necesitamos imperiosamente reducir los costos de producción, porque cuando un fruticultor o un ganadero no tienen rentabilidad, no pueden hacer inversiones en innovación tecnológica, y no pueden aumentar su producción”, aseguró a Chacra TV Pablo Vernengo, Director Ejecutivo de Economías Regionales de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
Señaló, además, que “la caída de la demanda repercute seriamente en el comercio y la producción industrial pyme”. En ese marco, CAME dio a conocer un relevamiento acerca de la participación de los productores en los precios de venta finales de los agroalimentos. El resultado consigna que el productor participa del 31,4%, en promedio, de los precios en góndola.
El estudio concluye que los precios de los alimentos provenientes del campo se multiplicaron por 3,5 en abril, lo que implica que los consumidores pagaron $3,5 por cada $1 que recibió el productor.
En ese marco, la mayor participación la tuvieron los productores de frutilla (81%), mientras que la menor fue para los productores de limón (8,1%).
El informe detalla que los precios que se pagaron por las 19 frutas y hortalizas que integran la canasta que analiza CAME, se multiplicaron por 4,3 veces en abril, mostrando una baja de 6,5% con respecto a marzo.
En el caso de los 5 productos y subproductos ganaderos que releva la entidad, los consumidores abonaron 3,2 veces más de lo que recibió el productor. Es decir, 3,3% más que en marzo pasado.
El informe agrega que, según el Índice de Ventas Minoristas de CAME, las ventas del rubro alimentos y bebidas cayeron 23,8% en los primeros cuatro meses del año frente al mismo período de 2023, producto de la detracción de la demanda.
Por otra parte, explica que “durante el primer cuatrimestre del año, todos los eslabones de las distintas cadenas de valor han visto afectada su rentabilidad por los incrementos de costos, no sólo debido a la devaluación, sino también al aumento del transporte y la logística, luz, gas, patentes e impuesto inmobiliario, arrendamientos, combustibles, fertilizantes y repuestos de maquinarias”, entre otros.
Mayores brechas
De acuerdo con el índice de precios en origen y destino elaborado por CAME (IPOD), los productos que mostraron mayores brechas en abril fueron:
- limón (12,3 veces). Registró una suba en la oferta ocasionada por la baja demanda. En tanto que los precios cayeron 16,7% al productor y 2,6% en góndola
- mandarina (6,9). Se incrementó el precio al productor (14,1%), pero hubo una caída a nivel del consumidor (14%)
- naranja (6,3). Presentó una disminución de 20,4% en origen y 5,7% en destino.
- pera (5,9). Los precios en origen no mostraron variaciones y en góndola aumentó 1%.
- carne de cerdo (5,6). Bajó tanto en origen (11,5%), como en destino (3%).
Menores brechas
Los cinco productos que presentaron menor diferencia entre el precio que recibió el productor y el que pagó el consumidor fueron:
- frutilla (1,2 veces). Aumentó sus precios en ambos extremos de la cadena: 48% en origen y 13,2% en destino, debido a la poca producción por las inclemencias climáticas.
- calabaza (1,9). Se incrementó 58,3% al productor y cayó 0,8% al consumidor.
- y cebolla (1,9). Aumentó 7% en origen y 14,7% en destino.
- tomate redondo (2,1). Creció el precio al productor 177,4%, mientras que al consumidor aumentó 82,3%.
- pimiento (2,1). Su precio se incrementó tanto en origen (37,6%), como en destino (33,9%).