La Amazonía peruana es conocida no solo por su vasta biodiversidad, sino también por los tesoros que ofrece en forma de frutos. Entre ellos destaca el aguaje, un producto estrella que ha capturado la atención de investigadores y nutricionistas.
Este fruto posee propiedades antioxidantes que ayudan a prevenir el envejecimiento prematuro, mejorando la salud cutánea y contribuyendo a evitar la aparición de arrugas.
De igual manera que existen alimentos como el aguaje que combaten el envejecimiento prematuro, hay otros que aceleran este proceso del cuerpo, tal como señala el Dr. Christophe de Jaeger, especialista en prevención del envejecimiento humano.
El azúcar contribuye al envejecimiento
El envejecimiento prematuro se manifiesta como la aparición acelerada de signos de envejecimiento en la piel, órganos o tejidos antes de los 35 años, causando síntomas como arrugas, líneas de expresión, debilidad muscular o enfermedades crónicas.
Este fenómeno ocurre debido al envejecimiento de las células del cuerpo y a la disminución en la regeneración celular. Puede ser provocado por condiciones genéticas y/o ambientales, tales como exposición excesiva al sol, una dieta inadecuada o el estrés crónico, por ejemplo.
Al respecto, el Dr. De Jaeger, especialista en prevención del envejecimiento humano, advirtió al medio francés Le Journal des Femmes que el consumo excesivo de ciertos alimentos podría acelerar el envejecimiento celular. Este médico explicó cómo los alimentos que elegimos consumir impactan directamente en el proceso de envejecimiento celular, destacando la importancia de mantener una dieta equilibrada para preservar la salud y la longevidad.
De acuerdo con De Jaeger, el consumo excesivo de azúcares es uno de los factores más dañinos en este proceso. El azúcar se ha vuelto omnipresente en nuestra dieta diaria, y su naturaleza adictiva facilita su consumo en grandes cantidades sin darnos cuenta. A largo plazo, este hábito puede aumentar crónicamente los niveles de glucosa en sangre, desencadenando un proceso conocido como glicación.
La glicación ocurre cuando el azúcar se adhiere a las proteínas del cuerpo, alterando su estructura y funcionalidad, lo cual puede dañar órganos y tejidos. Entre los órganos afectados se encuentran el cerebro, los ojos, las arterias, los nervios y visiblemente, la piel, contribuyendo al envejecimiento interno y externo.
Las grasas saturadas incrementan el riesgo de enfermedades cardiovasculares
Además del azúcar, las grasas saturadas son otro factor que contribuye al envejecimiento celular. Presentes en productos como el queso, la mantequilla, las carnes grasas y los alimentos fritos, las grasas saturadas son responsables de aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares, un factor clave en el envejecimiento prematuro.
A medida que se envejece, el metabolismo básico se ralentiza, lo que lleva a una mayor acumulación de colesterol en el cuerpo y, por ende, aumenta el riesgo de desarrollar estas enfermedades. El Dr. De Jaeger resalta la importancia de mantener una actividad física regular para estimular el metabolismo y contrarrestar estos efectos negativos.
El alcohol y su efecto tóxico a nivel metabólico
Otro alimento que se debate en el contexto del envejecimiento celular es el alcohol. Según De Jaeger, este actúa como una toxina doble. Primero, las moléculas de alcohol son tóxicas para el cerebro, el hígado y los nervios. Segundo, una vez ingerido, el alcohol se transforma en azúcar, lo que agrega un efecto tóxico metabólico adicional que perjudica al organismo.
El médico enfatiza que este efecto nocivo se produce con todos los tipos de alcohol, advirtiendo sobre los peligros de consumir, por ejemplo, dos copas de vino tinto al día, un hábito comúnmente considerado saludable, pero que podría resultar más perjudicial de lo esperado.
En resumen, de acuerdo al Dr. De Jaeger, es fundamental mantener una dieta equilibrada y moderar el consumo de ciertos alimentos, como azúcares, grasas saturadas y alcohol, para preservar la salud a largo plazo y prevenir enfermedades relacionadas con el envejecimiento prematuro.
Por otro lado, el especialista enfatiza que nuestras decisiones alimentarias diarias pueden influir profundamente en nuestro bienestar futuro, y que el equilibrio y la moderación en la dieta, junto con la práctica regular de ejercicio físico, son claves para evitar un envejecimiento acelerado y mantener el cuerpo en óptimas condiciones.