La publicación del informe del Instituto Nacional de Estadística e Informática ‘Evolución de la Pobreza Monetaria 2014-2023′ no solo reveló los problemas económicos de las familias en el Perú, sino que además reveló que el estado de salud de los niños menores de 3 años está en riesgo.
Según el documento, en el año 2023 se registró que el 43.1 % de los niños entre 6 y 35 meses (menores de tres años) padecen de anemia por déficit de hierro en la sangre. Estos niños y niñas tienen una concentración de hemoglobina menor o igual a 11,9 por decilitro.
Este es el segundo año seguido en el que el INEI presenta un incremento de esta cifra. En 2021 se detectaron 38.8 % de casos, mientras que en el año 2022, se registraron 42.4 % de niños en el Perú con este mal, luego de que el Perú haya reducido esta cifra de forma sostenible desde el año 2024.
En general, las cifras actuales de anemia en menores de tres años ha alcanzado niveles similares a las del año 2018. Según el Instituto Peruano de Economía (IPE), las cifras reportadas por el INEI representan a más de 700 mil menores de tres años que fueron afectados por esta condición. Alrededor de 50 mil casos más que antes de la pandemia.
De igual forma, las cifras reportadas por el INEI indican que los casos en las zonas rurales (50.3 %) del Perú -aunque se redujeron en el último año- siguen siendo más que los reportados en zonas urbanas (40.2 %), con una diferencia de 10 puntos porcentuales entre ambas cifras.
Solo en los casos de Lima Provincias, Cajamarca y Huánuco, la anemia subió en 8 puntos porcentuales con respecto a años anteriores. De igual forma, solo en el año 2023 los casos de anemia en Puno se incrementaron y alcanzaron al 70.5 % de los niños y niñas menores de tres años.
Problemas en la alimentación de los niños
El incremento de la anemia en varias regiones de Perú se ha asociado a las condiciones laborales adversas enfrentadas por los hogares, según datos recientes. Entre 2019 y 2023, la incidencia de anemia aumentó significativamente en regiones con caídas pronunciadas en el empleo adecuado, particularmente en Lima y Arequipa.
Las restricciones económicas derivadas de un entorno de alta inflación han limitado la capacidad de las familias para consumir alimentos ricos en nutrientes necesarios, como el hierro, lo que ha afectado la calidad nutricional de su alimentación.
Según El Comercio, las regiones que experimentaron una caída de más del 1% en el empleo adecuado vieron un aumento en la incidencia de anemia, cuatro veces superior al registrado en otras regiones, según difundió el informe del INEI. En Lima y Arequipa, aún faltan por recuperar aproximadamente 291 mil empleos adecuados, mientras que las tasas de anemia aumentaron de un promedio del 31.7 % al 37 % entre 2019 y 2023.
La Encuesta Nacional de Hogares (Enaho) indicó que la reducción en el consumo de carnes rojas e hígado de res, esenciales para combatir la anemia, ha sido notable. Entre 2019 y la actualidad, el consumo de estos alimentos en los niveles socioeconómicos C, D y E disminuyó un 13.5 %, pasando de 1,1 kg anuales, lo que reflejaría la dificultad de las familias para acceder a una dieta balanceada y rica en hierro.
Este contexto resalta la vulnerabilidad económica a la que se enfrentan muchas familias peruanas, especialmente en un panorama de altos costos de alimentos y empleo inadecuado. Las políticas públicas dirigidas a mejorar las condiciones laborales y la accesibilidad a alimentos nutritivos son cruciales para combatir este problema de salud pública.