“Lo vamos a demostrar científicamente” fueron las palabras que utilizó la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo al descalificar los recientes reportajes publicados por The New York Times relacionados con la producción de fentanilo en Sinaloa.
“No es muy creíble, vamos a ponerlo así. El fentanilo se produce de otras maneras, la Secretaría de Marina o la propia Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) pueden informar cuáles son los métodos de producción, pero no son creíbles las fotografías que se presentan ahí, incluso por el daño que podría causar para quien está ‘cocinando’ estas drogas”, aseveró Sheinbaum en su conferencia matutina del 30 de diciembre.
Concretamente, la mandataria hizo referencia al trabajo periodístico presentado el 29 de diciembre por Natalie Kitroeff y Paulina Villegas, el cual retoma su visita a un aparente laboratorio clandestino de fentanilo en Culiacán.
Las reporteras manifestaron que, después de múltiples intentos, tuvieron acceso a una de las instalaciones clandestinas en las que se fabrica este opioide en la capital sinaloense.
“Vestíamos trajes de protección tipo hazmat y máscaras de gas, pero el cocinero solo llevaba un cubrebocas quirúrgico. Él y su ayudante habían llegado hasta aquí con prisa para atender un pedido de 10 kilogramos de fentanilo. Si bien a nosotras una sola inhalación de los químicos tóxicos podía matarnos, nos explicaron, ellos ya tenían tolerancia a la droga letal”, puede leerse en el reportaje del NYT.
Ante la información y las fotografías presentadas por el medio neoyorquino, Sheinbaum Pardo sostuvo que el fentanilo no se produce así, sino que el procedimiento ocurre en otras circunstancias.
Consumo de fentanilo en México no tiene la misma dimensión que en EEUU
Después de emitir una serie de cuestionamientos a la investigación del NYT, Sheinbaum recordó que en la segunda llamada que tuvo con el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, él le preguntó si en México había un problema de consumo de fentanilo como lo hay en aquel país.
“Le dije que no. No quiere decir que no haya consumo, pero no a los niveles que hay en las ciudades de Estados Unidos. Sí es un tema limitar la producción y la entrada de esta droga, pero también es un tema de salud pública y de comunicación”, explicó la presidenta mexicana.
En este sentido, Sheinbaum reiteró que ambos gobiernos mantendrán una estrecha relación “para evitar que esta pandemia de consumo de fentanilo continúe. Avocarnos a que no haya esto en México y evitar que continúe en Estados Unidos”.