Luego de las declaraciones de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y otras figuras políticas, Paulina Villegas, reportera de New York Times en México, defendió el reportaje que co-escribió junto a la periodista Natalie Kitroeffy, mismo que advierte que estudiantes de química mexicanos están siendo reclutados por el crimen organizado para la fabricación de fentanilo.
En entrevista con la periodista Azucena Uresti para Radio Fórmula, Villegas fue cuestionada sobre el procedimiento que llevaron en NYT para la elaboración de la pieza periodística. Al respecto, la comunicadora mexicana reveló que fueron meses de trabajo que incluyeron viajes, trabajo de campo e investigación.
Respecto a los cuestionamientos de credibilidad que se han presentado en los últimos días, aseguró que confirmaron cada detalle con distintas fuentes, incluyendo autoridades estadounidenses.
“Nosotras quisimos ser siempre muy claras y transparentes, con nuestros lectores de cuáles son las fuentes y cómo se construyó este reportaje. Ahí bien lo dice, nuestras fuentes son nueve miembros del Cártel de Sinaloa de distintos niveles, empezando por estudiantes, reclutadores y personas de más alto nivel que confirmaron y nos dieron con mucho detalles como se lleva este proceso, las razones por las cuáles los jóvenes deciden entrar al negocio”, señaló.
Cuestionada respecto a la reacción de la titular del Ejecutivo, quien el pasado 2 de diciembre aseguró que el gabinete de seguridad no contaba con información sobre el reclutamiento de estudiantes de química y quien comparó el reportaje con la serie Breaking Bad, dijo:
“Me extraña un poco la declaración de la presidenta que dice que no existe información de su gabinete de seguridad, cuando también esto ya fue publicado en un reporte de inteligencia de Sedena. Ahí está muy claro de dónde sacamos la información y cómo la corroboramos”.
Adicionalmente, Villegas apuntó que se trata de una realidad grave y preocupante, pues incluso cuentan con información que refiere que el reclutamiento de los estudiantes de química no solo se da en universidades de Sinaloa, sino en otros estados del país.
“Lo que nos corresponde es hacer este tipo de trabajo que considero relevante y sostener la información. Lo demás, las decisiones y los comentarios que tomen funcionarios públicos es su responsabilidad”, aseveró.
―”¿Sostienen cada palabra del reportaje?”, cuestionó Uresti.
“Absolutamente. Para los que no saben, el NYT tiene estándares altísimos de control, de ética, de verificación de datos. Se checa una y otra vez. (...) Jamás publicaremos algo que no esté completamente sustentando”, afirmó.
Las revelaciones
El pasado 1 de diciembre, Villegas y Kitroeffy publicaron un reportaje a través de NYT titulado “Los cárteles mexicanos atraen a estudiantes de química para fabricar fentanilo”.
En él, se advierte que el Cártel de Sinaloa está reclutando estudiantes de química para producir fentanilo por un salario mensual de 800 dólares, poco más de 16 mil pesos mexicanos ―de acuerdo con el tipo de cambio actual―.
El reportaje señala que sus fuentes fueron siete cocineros de fentanilo, tres estudiantes de química que aceptaron el trabajo, un profesor de química, dos agentes estadounidenses de alto rango y un reclutador del Cártel de Sinaloa de alto nivel.
Además de requerir a personas con conocimiento para la fabricación del opioide sintético, NYT señala que el CDS recluta a estudiantes de química con otro objetivo: sintetizar los compuestos químicos y dejar de depender de los precursores químicos que normalmente provienen desde Asia.